Una vez leí en un libro que las personas indicadas aparecen en el momento indicado.Pero lamentablemente Keitan no era el indicado y este momento tampoco lo era.
-¿Qué pasa, White? ¿Acaso te comieron la lengua los ratones? -preguntó levantándose.
Lo miré de arriba a abajo, estaba consciente de que había pasado una semana desde aquella pelea, pero aún así, no parecía que aquellos golpes hubiesen dejado secuelas.
-¿Qué quieres ahora? -pregunté poniendo una mano sobre el pasamanos de la escalera.
-Que vengas conmigo -sonrió.
-No -negué automáticamente -, no puedo salir del edificio.
-Pero no sería la primera vez que lo haces -murmuró pensativo.
Y miren que era una mala influencia.
-Josh... ¿está... está muerto? -por más horrible que fuese la respuesta, necesitaba saber qué había pasado.
Él me observó fijamente durante varios segundos hasta que negó con su cabeza.
-No -dijo serio -, no está muerto. De hecho, se encuentra bastante bien y callado. Se niega a hablar, es por eso que necesito que vengas conmigo, él confía en ti.
Analicé la situación. Por más que odiase admitirlo, sabía que debía ir con él. Sabía que Josh no confiaría en ninguno de estos agentes. Aunque nada me garantizaba que Josh estaría dispuesto a hablar conmigo.
Pero luego estaba Antonio. Se había disculpado por su comportamiento y yo por el mío. ¿Y ahora iba a volver a escaparme? Ciertamente estás cosas nunca me habían importado mucho, pero ver el reflejo de malos días de preocupación por mí en el rostro de Antonio, me hacían sentir miserable. Antonio también me había permitido regresar a las clases en la academia de bellas artes, y yo realmente deseaba ir, y si me escapaba y desaparecía, el privilegio que segundos atrás me había vuelto a otorgar se iría al diablo.
Lo cierto era que ya me estaba cansando de estar encerrada en el apartamento, y la parte de mí que ansiaba ser libre había comenzado a buscar maneras de escapar en silencio.
Pero estaba cansada de seguir las órdenes de todo el mundo, así que...
-Tendrán que arreglárselas solos -dije finalmente -, me niego a seguir ayudándote. Casi matas a mi amigo, ¿qué me asegura que no me harás lo mismo en un ataque de ira? Quiero que te alejes de mí, haremos como si nada de esto hubiese pasado. Y si intentas algo sospechoso, algo que me de a entender que quieres llevarme otra vez a la A.S.I.O. para que me borren la memoria, le diré todo a mi guardaespaldas. Él tomará cartas en el asunto. Si antes no confiaba mucho en ti, ahora lo hago menos.
-Te lo dije una vez, White, y te lo repito; es gracioso que pienses que tienes elección, porque no la tienes -dijo dando un paso hacia a mí.
-Yo nunca quise aceptar ese trato. Todo esto es tú culpa -dije seria -Tú me metiste en este mundo y ahora me obligas a cargar con tus cadenas. Morgan dijo que debías protegerme, pero, ¿cómo voy a dejar que me proteja alguien del que no sé absolutamente nada, alguien del que desconfío?
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Tazmania
Action"Aléjate de los hombres de negro." -una advertencia sin sentido. Erika White está segura de una cosa: su vida es demasiado supervisada y aburrida. O al menos eso creía hasta que encontró a un chico herido en el jardín trasero de su instituto. Un e...