Clarity (Paulo Dybala)

Capítulo 67

- ¡Me ha pedido matrimonio!- sonreí viéndola por la pantalla.- ¡Tu hermano me ha pedido matrimonio!

- ¿De verdad? Vaya, no me lo esperaba.- dije con ironía y riendo.

- ¿Lo sabías? ¡¿Lo sabías y no dijiste nada?!

- Claro que no dije nada, era secreto de confesión.

- Sos una boluda.

- Eh, a mi en español o en catalán, nunca olvides tus raíces.

- Cállate.- miró ilusionada el anillo.- He aceptado, tranquila.

- Tranquila estoy, porque sabía que lo harías.

- Tú lo sabes todo, ¿No?

- Puede.- sonreí.- ¿Te gusta?

- Me encanta, ¿Lo compraste tú o fue todo suyo?

- Todo de él, yo no di ideas en nada.

- Sois tal para cual, los dos locos.

- Pero nos quieres igual, a mi más por supuesto.

- No sé si contárselo a mis padres o esperarme a las vacaciones.

- ¿Estás ilusionada?

- Sí.

- ¿Impaciente por hacerlo?

- Por supuesto.

- Pues diles por video llamada.

- ¿Se lo tomarán bie?

- Teniendo en cuenta que lo conocen y lleváis mucho tiempo, por supuesto.

- Es verdad, ni siquiera lo conocen, me lo tendré que llevar a Cataluña.

- ¡Eh! Nada de robar hermanos, deja un poco de Thiago para los demás.

- ¿Y entonces qué hago?

- Se los presentas y luego se lo dices.

- Van a pensar que estoy loca.

- Tranquila, ya lo piensan.

- ¡Oye!

- Calla, que me está llamando Paulo.

- ¿Él también lo sabía?

- Sí, se lo conté una vez, nada de secretos entre nosotros.

- Vaya tela, pues te dejo con el argentino original y después volvemos a hablar, te tengo que contar como ha ido todo con mis padres.

- Aquí estaré esperando, me quedaré ciega por el ordenador pero esperaré.

- Chao Tania.

- Chao.- me despedí, colgué la llamada y acepté por fin la de Paulo.- Hola.

- ¡Al fin! Te veía en línea pero no aceptabas, ¿Qué hacías?

- Engañarte, claramente.- me miró serio.- Es broma, hablaba con Bianca y ya sabes que me cuesta despedirme de ella.

- Te cuesta despedirte de todo el mundo.

- Menos de ti.- me volvió a mirar serio y reí.- Perdona.

- Hoy está graciosa la nena.

- Hoy más que nunca.

- ¿Pasó algo?

- Bianca y mi hermano, ella ha aceptado e ilusiona tener cuñada oficial.

- Aún no es oficial, sigues sin estar casados.

- Cállate.

- Sí, sargenta.

- Recuerdo que una vez dijiste que yo no te mandaba.

- Cállate.

Reí y seguí hablando con él y echando de mi cuarto a Marc, que había decidido pasar unos días en mi casa sin preguntarme. Una hora después hablando, él volvió al entrenamiento y yo a hablar con Bianca.

Me contó que sus padres habían aceptado a Thiago, aunque no estaban seguros de la boda hasta que les dijo que no sería inmediata y esperarían unos años. Después, terminé las video llamadas y me fui junto a Marc al cine.

- ¿Qué pasó con nuestras fiestas, Tania?

- No lo sé, no recuerdo ni cómo eran...

- Eso es por el alcohol, tranquila.

- ¡Oye!- los dos reímos mientras paseábamos por las calles de Barcelona después de terminar la película.- Deberíamos hacer una.

- ¿Te parece antes de las vacaciones?

- Me parece más que correcto.

- Pues está decidido, en una semana habrá una fiesta que hará explotar Barcelona.

Reímos y seguimos caminando. Hoy, después de la fiesta de ayer por la Liga ganada, tocaba descansar para seguir acabando los últimos días antes de la fiesta.