Te recuerdo

Me importas

-Erika despierta.

-¿Nevra?

-Ya es hora de partir... -la miró.

La chica sin esperar a que el vampiro se fuera comenzó a vestirse.

-¡Espera, espera!.. Déjame salir primero -se tapó los ojos.

El nocturno salió rápidamente de la carpa para dejar sola a la joven cuando de pronto esta lo siguió.

-¿Hay una parte donde bañarse?

-Si... allá –apuntó con el dedo. -Shaitán te acompañará.

Erika comenzó a caminar hacia donde había apuntado su compañero mientras él se dispuso a desarmar todo. Para cuando la chica volvió el vampiro ya tenía todo preparado.

-¿Te duele el pie? -preguntó el crepuscular al ver que su amiga cojeaba.

-No -respondió la castaña sin mirarlo a los ojos.

-¿Segura? -insistió.

-Estoy bien Nevra -confesó molesta.

-Solo me preocupo por tí... -la miró triste.

-Lo sé... -agachó la cabeza- lo siento... solo que enserio no me duele...

-Te creo hermosa -le sonrió.

Imitando los días anteriores comenzaron a caminar por el bosque, sin embargo a pesar de la calma que trató de transmitirle la chica al vampiro este no pudo evitar sentir preocupación por la humana, esto se acrecentó más al ver que su compañera seguía teniendo problemas para caminar.

En medio del bosque el joven se detuvo.

-Siéntate en esa raíz del árbol- comenzó el pelinegro mientras se quitaba la mochila de la espalda.

-¿Para qué? -preguntó inmediatamente la muchacha.

-Para revisarte el pie. -contestó serio.

-Estoy bien...

-Siéntate...

-No. -se cruzó de brazos.

-Bueno si no quieres sentarte no lo hagas -contestó exasperado- pero pásame el pie.

Parada, la joven estiró la pierna en el aire.

-Eres tan testaruda Erika. -Le tomó el pie.- si te caes va a ser tu culpa.

Comenzó a sacarle el zapato para después sacarle el calcetín. Con cuidado acarició el tobillo hasta darse cuenta de que estaba completamente hinchado.

-Oye preciosa ¿porque no me dijiste que tu pie estaba así?

-... -lo ignoró.

El vampiro suspiró, luego la miró y con una sonrisa pícara comenzó a mover bruscamente el pie de la chica.

-¡Cuidado Erika está temblando!

-No Nevra- se enojó la faelienne mientras trataba de sostenerse de su amigo mientras se apoyaba en un pie.

-Quizás si te hubieras sentado no estaría temblando ahora -se rio juguetonamente mientras seguía agitando a la joven.

-Nooo Nevraa -comenzó a reír la faelienne- me voy a caer.

-Pero si está temblando primor... -seguía moviendo a la chica mientras se reía.

-Jaja para enserio.

-¿Me perdonas? -se detuvo mientras aún sostenía el tobillo de la muchacha.

-No -se rio la oji violeta.