57//Él no es así

387 36 7
                                    

Ya sé, dije que actualizaría el viernes y enserio lo siento por no hacerlo pero fue una semana muy ajetreada. Aquí les traigo un maratón, espero que les guste:) ❤

--------------------------------

MARATÓN 1/?

Luego de abordar nuestro vuelo, pasadas aproximadamente 3 horas el cansancio me consumía lentamente y la música clásica que salía de mis auriculares no eran de mucha ayuda. Cada vez pesaban más mis párpados hasta que termine recargando mi cabeza en el hombro de Sebastián, y en menos de lo que canta un gallo ya me había quedado dormida.

•••

Comencé a abrir los ojos y todo el avión estaba oscuro y en silencio, revise la hora y eran las 4:30 am. Sentí un peso sobre mi cabeza y me moví sin hacer mucho esfuerzo, dándome cuenta de que Sebastián también se había quedado dormido encima de mi. Se veía tan lindo que no quise despertarlo.

Casi una hora después hablo el capitán por el micrófono y aviso que como máximo en 20 minutos estaríamos aterrizando. Prendieron las luces y algunos comenzaron a despertar, claro, solo los que tienen el sueño demasiado ligero. Me arregle el cabello y comí unas mentas, cuando faltaban como 10 minutos decidí despertarlo.

– Sebas.... Ya casi llegamos - susurre y nada - Sebas......... Sebastián - aumenté mi tono al ver que no respondía - Hey! - le di un codazo por lo que abrió los ojos

– Auch! - dijo adormilado - Porque eres tan agresiva mujer. - sobo su brazo y bostezo

– Ya casi llegamos, ya despierta hombre.

•••

Note a un chico con un cartel que decía "Bienvenida a Canadá _____". Castaño, alto, tez blanca, mejillas algo rosadas y lindos ojos color avellana.

– Hola, tu eres _____ verdad? - dijo en español

– Si, tranquilo, se inglés no te tienes que esforzar. - dije con una sonrisa

– Uff, que alivio. - miro a Sebas - Tu hablas inglés?

– Perfectamente. - dijo con ego.

Me choca que haga eso.

– Bueno como sea, tu padre dijo que nos llevarías a mi casa. Nos vamos?, estoy algo cansada.

– Oh seguro, solo que en ningún momento me menciono que vendrías con alguien más.

– Tranquilo hermano, mi casa está unas cuantas de la suya. - dijo Sebas "tranquilo"

– De acuerdo entonces vamos.

Dijo sonriente y me ayudó con mi equipaje, dejando atrás a Sebastián con el suyo.

– Déjame ayudarte... - dije arrastrando su maleta

– Yo puedo solo! - me la arrebato y la jalo

– Luego no andes llorando... - camine rápidamente y lo rebase. Subí al auto y chisque los dedos para que se apurara.

•••

– Es aquí. - dijo Matt estacionando el auto enfrente de un portón viejo y con partes oxidadas.

– Creí que sería más lindo, pero puedo cambiarlo - dije viendo su lado positivo.

– Lamento que no podrás, el chiste es no llamar la atención. Créeme, te encantará por dentro.

Salió del auto, me abrió la puerta y me ayudó a bajar, que caballeroso, lleva 10 en presentación. Sebastián también se bajó pero dio un portazo molesto, y dale con sus celos!

Una vez que entramos a la casa se me hizo bien, ni muy grande y muy chica, probablemente la mayor parte del tiempo me la pasé sola o en otras partes así que al menos para mí está más que bien.

– ¿Que te parece? - pregunto Matt dejándome pasar a la casa

– Me gusta, perfecta para mi. - dije observando cada detalle de la sala

– Dices que vivirás sola aquí, ¿no?

– Si así es, por? - lo mire dudosa

– Ven sígueme, te mostraré algo.

Comenzó a subir las escaleras y lo seguí al igual que Sebas a mi.

– Lo siento Sebastián, solo debe verlo ella. - dijo algo penoso Matt

La mandíbula de Sebas se tenso y note como empuñó la mano, sus nudillos comenzaban a ponerse blancos por la presión y su cara levemente roja.

– Claro, mientras iré a ver mi casa. - forzó una sonrisa y salio echando humo por las orejas.

– ¿Se habrá molestado? - me pregunto Matt nervioso por lo que sus mejillas se pusieron rojas

– Si pero no te preocupes, así es él. - sonreí y tomé su hombro

– De acuerdo...

En realidad no es así, desde que salí del hospital a estado teniendo ataques muy seguido de celos y especialmente conmigo. Quién sabe que pedo está pasando por su vida.

Totalmente Diferentes (Sebastian Urdiales) [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora