Totalmente Diferentes (Sebastian Urdiales) [EN EDICIÓN]

70//Enfermedad

– ¿A esta hora?

– Si, no le veo el problema. - suspiro frustrado

– De acuerdo. - saco su libreta - Su nombre por favor.

– _____ Herrera.

– Edad.

– 19 años.

– Estado civil.

– ¿Qué?

– Quería la consulta o no. - arque una ceja

– Pff, Soltera.

– Bien, cuenteme qué es lo que le pasa, señorita Herrera.

– Hace unos meses comencé a sentirme extraña, mis cambios de humor eran radicales y hasta cierto punto fastidiosos. Es como si no pudiera controlar mis emociones, un tiempo estoy molesta, luego triste, alegre y bueno aveces tengo miedo de lo que pueda hacer especialmente cuando estoy molesta con alguien o demasiado triste.

– Bien, ahora le haré algunas preguntas, de acuerdo?

Asentí y prosiguio a anotar algunas cosas.

– ¿A perdido peso en esta semana?

– Si tal vez como 4 kilos.

– ¿A podido dormir bien?

– No, hace días que no lo hago.

– ¿Se siente con suficiente energía apesar de no haber dormido?

– Si, la persona con la que vivo suele decirme que soy muy hiperativa y hablo muy rápido.

– De acuerdo... - anoto nuevamente - ¿A tenido episodios maníacos?

Fruncí levemente el ceño y recordé la satisfacción que me dió cuando supe que había muerto toda la familia.

– Si... - me limité a decir algo más

– ¿Cuando se tarda en arreglar su cama?

– Disculpe que?

– Creo saber que te está pasando _____, solo responde mis preguntas.

– No se como... Uff tal vez 20 minutos, o más.

– ¿A tenido otras emociones o sensaciones aparte de las ya mencionadas?

*Flashbacks*

– Necesito que vengas a la empresa, las estadísticas de venta están bajando _____. - dijo matt por teléfono

– Déjalo así, ya subiremos.

Pérdida de interés.

– Ya sal de la piscina, está refrescando y te vas a enfermar. - dijo Sebas con una toalla en la mano

– Un rato más por favor, se siente bien nadar. - volví a sumergirme.

Placer en hacer actividades.

Una tarde Sebastián salió al supermercado y yo me quedé sola en casa, al bajar al sótano saque una pequeña caja donde guardaba cocaína. Luego de que me descubriera, se deshizo de ella y ahora muero por querer probarla una vez más.

Ansiedad

– ¿¡Que demonios haces!? - Sebastián me quito el cuchillo ya que estaba jugando a pasarlo rápidamente por los espacios de mis dedos.

Conductas de riesgo.

– Ahora.... Dispara! - dijo mi entrenador y lo hice pero fallé. - Mal mal, muy mal _____. Una vez más.

Falta de concentración

*Fin de los Flashbacks*

– Si... He tenido pérdida de interés en mi trabajo, me siento bien cuando práctico en la piscina, tengo ansiedad por la cocaína, mi conducta es de riesgo y no logro concentrarme cuando práctico con mi entrenador.

Asintió comprendiendo todo lo que dije y reviso su cuaderno varias veces. Siendo sincera esto comienza a asustarme un poco.

– Señorita Herrera, hilando cada palabra que me ha dicho sobre lo que le pasa y revisando mis preguntas una y otra vez, bueno yo... He llegado a una conclusión.

– Que es lo que me pasa. - recargue mis brazos en el escritorio

– Me temo que.... Usted sufre de un Transtorno Bipolar.

Abrí los ojos sorprendida por sus palabras, ¿"Transtorno Bipolar"?

– E-eso, no puede ser cierto, tal vez se está confundiendo doctor. - mi voz comenzaba a quebrarse al igual que mis ojos.

– Me temo que es cierto señorita Herrera.

– Bueno y-y eso tiene cura?

Negó con lastima, odio la lastima.

– No, pero se puede tratar. Tiene suerte de que lo detectamos a tiempo, de haber sido mucho después sería más difícil tratarla.

Las lágrimas recorrieron mis mejillas y rápidamente las limpié.

– De acuerdo un tratamiento, como es, medicamentos, quimioterapias?

– Son solo medicinas y psicoterapias que le recomendaré para que pueda controlarlo. Tiene que saber que en caso de que deje de tomar las medicinas o deje de ir a consultas, las cosas podrían empeorar y podría terminar en un hospital psiquiátrico.

– Está claro doctor Hans, no tiene que paniquearme más de lo que ya me dejó. Quisiera saber que fue lo que causó este... Transtorno.

– Bueno, no se conoce exactamente la causa de esto pero comúnmente es hereditaria ¿Tiene familiares con esta enfermedad?

– No, bueno no creo, no lo sé.

– Le recomiendo que investigue eso, en otro caso también podría ser por estrés.

– Está bien, gracias por su ayuda doctor. - me dió una receta y la tome.

Salí del lugar y me dirigí a pagarle a la de recepción, luego de eso entre a mi auto y me quedé allí dentro unos cuantos minutos mientras mi cabeza repetía y repetía las mismas palabras, una y otra y otra vez.

"Usted sufre de un Transtorno Bipolar."

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Espero que les haya gustado, decidí agregar esto a la historia ya que siempre la he tratado de escribir con cosas que pasan en la vida real.

Lo que trato de decir es que sabemos que no todo en la vida es fácil, siempre hay algo que se interpone en nuestro camino ya sea bueno o malo. En este caso _____, al tener dinero y todo lo que quiere, también tiene que pagar un precio que en este caso es la enfermedad que se ve obligada a enfrentar.

Así pasa con muchas personas en el mundo, algunas terminan solas, sin dinero, sin amor, o enfermas.

Lamentablemente no todo en la vida es gratis ni fácil:')