– Y es por eso que decidimos pornerle "El cementerio de los desaparecidos". O dime, que hubieras hecho tú si no encuentras registro de esa persona.
– No se tal vez lo más obvio, como dejarla libre.
– Mientes.
– Nunca lo hago.
– Claro que sí, reconozco cuando alguien miente y puedo notar que tú lo haces por tu mirada.
Me agaché a su altura y lo mire fijamente a los ojos, podía sentir como me hundía en estos.
– Pues ahora te diré una mentira real. - frunció el ceño confuso por lo que dije - Mis hombres se dirigen al vecindario de tu familia para protegerlos, cuidarán que nadie se acerque. Tranquilo.
– Por favor no. Te pido que no les hagas daño, tengo dos pequeños, uno de 3 y otro de 9 años. Les prometí que volvería a casa para la cena.
– Acabas de romper una promesa Clay. Que mal padre eres.
Me di la vuelta y camine a las escaleras, sus gritos de súplica ahora son música para mis oídos. No sé que me pasa, pero se siente bien. Me adentre a mi auto y antes de cerrar la puerta pude oír disparo de bala, sonreí y cerré.
Sebastián Urdiales ⚡
La última vez que vi a _____ fue cuando mataron al oficial. Desde ese día no la he visto y tampoco llamado, no sé qué es de ella. Por si tenían duda, no, yo no estoy en lo mismo que ella. Yo no tráfico droga, se podría decir que soy más como su confidente, se cuando y cuánto se va a pasar, con quienes hace trato, quienes son sus socios y cosas aún más confidenciales.
Ella se encarga de hacer el trabajo rudo con los demás, la última vez que tocamos el tema seriamente recuerdo que me menciono que comenzaba a gustarle la idea. Aveces pilotea las avionetas o lanchas, descarga u observa el trabajo.
Me gusta que sea ruda, fuerte y que no le tema a nada, pero también me molesta el porque tuvo que tomar este rumbo, créanme, si por mí fuera, ahora mismo estaría terminando mi carrera musical y grabando canciones, dando conciertos o que sé yo. Ella estaría siendo una gran actriz y ganado premios, pero no... Decidió irse por el camino corto, y yo por amor aún sabiendo lo arriesgado que era todo esto, la seguí y hasta la fecha sigo con ella. Aveces solo me gana el impulso de querer hablar con ella y decirle todo, pero luego pienso en que podría pasar si lo hago, no creo que sea capaz de lastimarme.
Le marqué y luego de varios tonos por fin contestó.
– _____, necesito hablar contigo.
– ¿Te quieres casar conmigo?
Su voz.... Esta ebria.
– En dónde estás? Bebiste verdad?
– No no, no te diré mi edad, pedófilo.
Colgó la llamada y ahora le marqué a Matt, él debe saber dónde está.
– Hola Sebas, que pasa.
– Hola matt, una pregunta, ¿Sabes en dónde está _____?
– Mmm no, porque? Ya le marcaste?
– Si pero, esta ebria y no me quiere decir.
– Claro, bueno... Si dices que está ebria, creo saber en dónde puede estar. Ve a la casa marrón abandonada, seguro está ahí.
– ¿La casa marrón? Se supone que no hay paso para entrar a esa casa.
– No se si sabías que la casa es de ella, fue la primera que compró aquí en Canadá, como no le gusto bloqueo su paso y decidió por la que tiene ahora. Creí que lo sabías, con eso de que todo te cuenta.
– Pues ya ves que no, pero gracias, hasta luego.
Conducí hasta la casa y antes de llegar recargue mi arma, nunca se sabe.
Entre con cuidado y dentro de esta se oía ruido, me asome por la puerta trasera y pude verla sentada en el suelo con botellas de licor a su alrededor al igual que varios cigarrillos.
– _____.
Me miró sonriente y con los ojos rojos, me acerqué rápidamente a esta y la tome de las mejillas.
– Que haces aquí..
– Sentía la necesidad de desaogarme, así que quise estar un rato sola.
– Y crees que tomando y fumando compulsivamente te sentirás mejor?
Revise bien sus ojos, carajo _____!
– ¿Te drogaste?
– .....No.....
Miró el cigarrillo y rió.
– Bueno tal vez.
– Vas de mal en peor _____, tienes que parar.
– Lo siento pero la veo todos los días, es tentativa.
– _____.... Promete que no lo volverás a hacer, no volverás a probar la marihuana en tu vida.
– Pero....
– Prometemelo..., Por favor.
Me miró unos segundos y sus ojos se llenaron de lágrimas.
– En que me he convertido Sebastián...... Soy un monstruo.
– Claro que no, no eres un monstruo, es solo que aveces todos cometemos errores linda. - limpié sus lágrimas con mis dedos
– Pero yo los cometo todo el tiempo. Hoy yo.... Mate a una familia, y créeme que si antes me sentía mal por el niño ahora me siento lo peor que pude existir en este mundo.
¿Una familia?
– No digas eso, tenías tus razones para hacerlo. Pero también debes entender que no siempre matar a las personas es la solución a los problemas.
Asintio secando sus lágrimas.
– Necesito ayuda Sebastián, aveces solo... Solo pienso en la satisfacción que me da saber que una persona está muerta. Y sé que está mal pero.... No puedo retenerlo.
– Escúchame bien _____, juntos saldremos adelante, prometí estar contigo en todo momento y no pienso dejarte ahora que más lo necesitas, quiero que sepas que no estás sola cariño.
Tome su mano y ella la apretó ligeramente mientras trataba de sonreír.
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Totalmente Diferentes (Sebastian Urdiales) [EN EDICIÓN]
FanfictionT/n y Sebastian llevaban vidas de polos opuestos. Ella está acostumbrada al caos y él trata de evitarlo a toda costa. Una situación poco amigable los une y tienen que aprender a tratarse por más mal que se caigan. (CONTIENE FALTAS ORTOGRÁFICAS)