XXXI.Desconcertante."Nadie en su sano juicio planea el fracaso, uno va por la vida creyendo que los sueños se harán realidad, pero la verdad es otra, algunos sueños no están destinados a cumplirse, y cariño, eso fue lo que pasó conmigo."
-KING.
16 Años y 6 meses atrás.
La reina de Dinamarca se encontraba arrullando a la pequeña princesa en su dorada cuna.
Cuando notó que se había quedado dormida sonrió mirando la conmovedora imagen de su hija, aún no se podía creer que hubiera sido capaz de crear algo tan bonito, y no sólo se refería a la niña frente a sus ojos, también se refería al dulce príncipe que probablemente se encontraba corriendo en los pasillos en compañía de su primo.
Sin hacer mucho ruido salió de la habitación de la princesa para dejarla dormir con tranquilidad, en cuando cerró la puerta detrás de ella su hijo apareció corriendo siendo perseguido por el segundo hijo de su hermana.
-Sean y Nash, deténganse en este instante. -Habló con autoridad tratando de no gritar demasiado alto para no despertar a Aaliyah.
Ambos niños se detuvieron como si de repente un enorme muro se hubiese puesto frente a ellos impidiéndoles así seguir su jornada.
La reina caminó los pocos pasos que la separaban de ellos y cuando estuvo justo a su lado se cruzó de brazos.
-¿Qué les he dicho sobre jugar frente a la habitación de Aaliyah? -Preguntó riñéndole a ambos.
Los pequeños se miraron el uno al otro antes de agachar la mirada sabiendo que lo que habían hecho había estado mal.
-Lo siento. -Dijeron ambos al mismo tiempo.
La reina no pudo continuar fingiendo su molestia, así que se puso de cuclillas frente a ellos depositando un beso en sus mejillas rojizas.
-Sólo no lo vuelvan a hacer, la bebé está dormida y no quiero que se despierte, ¿o acaso ustedes quieren que se levante llorando? -Les cuestionó a lo que ambos príncipes negaron.
-No, porque si se despierta llorando significa que ha perdido su sueño. -Habló su pequeño hijo.
-Y cuando un sueño se pierde es malo, porque nunca se va a cumplir y mi mami dice que todos los sueños se tienen que hacer realidad. -Concluyó el dulce niño de ojos azules.
-Tienen toda la razón, así que ahora váyanse a jugar, pero eso sí, no los quiero volver a ver por aquí, ¿de acuerdo?
Ambos niños asintieron dando la media vuelta para hacer su camino de regreso.
Y mientras se alejaban la reina no pudo dejar de pensar en lo que había acabado de escuchar, y deseó que la vida fuese así de sencilla para ellos y sobre todo, que todos sus sueños y deseos se cumplieran.
-Dios salve al rey. -Susurró, pensando más que en nada en su hijo.
Actualidad.
El día en el castillo se volvió un infierno.
La gente se preguntaba que era lo que había sucedido para que ambos príncipes trajeran el rostro golpeado de tal manera. Eran muchas las especulaciones respecto a ese tema que solo nosotros tres habíamos presenciado.
No me apetecía escuchar las suposiciones de las personas a mi alrededor, por lo que cada vez que salía el tema decidía marcharme.
Sky me miraba con los ojos entrecerrados, su mentón descansaba en la palma de su mano derecha, su cabello por primera vez estaba recogido en dos trenzas, haciéndola lucir como una niña pequeña.
-Tú sabes algo y no me lo quieres decir. -Aseguró.
Y tenía razón, pero no podía imaginar una situación en la que le contara lo que había pasado hoy en la mañana, no era como que podía simplemente decirle; Nash golpeó al príncipe porque nos encontró en la habitación semidesnudos, por cierto, las marcas que traigo en el cuello las causó el heredero de Dinamarca, no lo hizo Nash cómo seguramente piensas.
-Yo no sé nada, lo siento. -Traté de mentir lo mejor que pude pero pareció no haber funcionado pues la escuché bufar.
-Ambos príncipes amanecieron con los golpes, y por lo que puedo notar tú has pasado la noche con él, así que discúlpame si no te creo cuando me dices que no sabes nada, en algún momento tu príncipe debió haberte contado algo. -Sky me mira con sus ojos acusadores, mientras se endereza dejando así de estar recargada de la mesa donde ambas nos encontrábamos a punto de cenar.
-Pues te equivocas porque no me contó nada, me enteré al mismo tiempo que ustedes que ambos estaban llenos de golpes. -Sky bufó por segunda vez.
-Lo que digas. -Dijo aún sin creerme. -De igual manera algún día tendrás que contarme todo, por cierto, ¿cómo va tu relación con Nash? -Preguntó.
Un nudo en mi garganta se hizo presente, desde lo ocurrido Nash simplemente no me hablaba, si llegaba a topármelo en un pasillo me sacaba la vuelta, he tratado de hablar con él y explicarle la situación pero me es imposible, aunque ahora que lo pienso, ya no hay nada que explicar.
-No tengo ninguna relación con él y lo sabes. -Respondí, y creo que esa es la primera verdad que digo en todo el día.
-¿Y qué hay del príncipe Sean?
-¿Cómo? -Dije sintiendo como el corazón me latía con nerviosismo.
-Si, ¿qué es lo que piensa respecto a ti y a su primo, o acaso no lo sabe? -Ante su aclaración sentí como me relajé de inmediato, por un momento creía que ya suponía algo.
-La verdad es que no lo sé, además no creo que a él le interese. -Respondí tratando de sonar lo más casual que pude.
-Tienes razón, ¿por qué debería importarle? -Y la manera en la que lo dijo no me gustó en lo absoluto.
-Voy a ver si necesitan ayuda para servir la cena. -Avisé poniéndome de pie, tratando de marcharme y escapar así de Sky.
-¿Thea? -Me llamó antes de que me alejara, me detuve, aunque no me giré para mirarla. -Me parece un poco desconcertante el hecho de que tengas esas marcas en el cuello y el príncipe Nash no, y más raro aún, que el príncipe Sean también las tenga.
Y sin decir ni una sola palabra huí de la habitación.
Hola, hola. Estoy actualizando muy seguido, y quien piense que eso no es hermoso que se retire xdxd. Sentía que ya me hacía falta escribir un poco sobre el pasado. Pero bueno, aquí les dejo un nuevo capítulo, si bien no es tan emocionante como los anteriores de algo cuenta, ¿no? Muchas gracias por leer, por dejar sus votos y comentarios. Los amo. ⚡️
Síganme en Instagram: genesis16.xx
ESTÁS LEYENDO
K I N G #1
Fanfiction"Tu peor error sería dejarte engañar por esa carita de ángel, el futuro rey no es más que la pura maldad andante. Dios tenga piedad de nosotros, los simples mortales." |PRIMER LIBRO DE LA TRILOGÍA "KING"| |Disponible en Físico.|