LXVI

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LXVI. Triángulo.







El rey sonríe mientras yo juego con uno de los mechones que cae sobre su frente.

Sean se encuentra acostado de lado, con su mejilla descansando sobre su brazo izquierdo, mientras que yo me encuentro a unos centímetros retira de él, recostada boca abajo con mi brazo estirado hacia su cabello.

-Me estás dando una vista bastante maravillosa de tu pecho expuesto. -Dice sin borrar su sonrisa juguetona. Bajo mi brazo intentando taparlo a lo que él frunce su ceño en desaprobación. -No dejes de jugar con mi cabello, me gusta que lo hagas.

Me acerco más a él para así poder besar cortamente sus labios para bajar por su barbilla hasta llegar a su pecho, escucho como suspira antes de sentir sus brazos rodeándome.

Hemos cambiado nuestras posiciones anteriores, ahora Sean se encuentra recostado sobre su espalda mientras que yo me encuentro con medio cuerpo sobre el suyo.

-Deberías mudarte a mi alcoba, haría todo más fácil. -Sus palabras me sorprenden por lo que alzo mi rostro para poder mirarlo.

-¿Qué?

-La mayoría de las noches terminamos durmiendo juntos, ya sea en tu cama o en la mía, que te quedes permanentemente conmigo no debería marcar gran diferencia. -Lo miro con gracia.

-¿No crees que sería raro que una empleada y el rey compartieran habitación? -Señalo lo obvio.

-Tú no eres una simple empleada Thea, ya te he dicho que soy demasiado selectivo con las mujeres que me involucro. Puede que no seas hija de un duque o que no tengas un título relacionado a la realeza, pero vienes de una familia demasiado importante en Dinamarca. Esto sonará bastante crudo pero, ¿realmente crees que yo me hubiese involucrado contigo si fueras una empleada común? La respuesta es no, y mucho menos te hubiese pedido que me dieras hijos, yo no caería tan bajo. -Hace una breve pausa. -Además nadie puede decir algo al respecto, en el castillo y en toda Dinamarca se hace mi voluntad.

Sus palabras, tal y como lo advirtió, son demasiado crudas, pero después de todo tiene razón. Sean era demasiado tedioso con aires de grandeza, y tenía un buen motivo, él era el rey.

-De todas maneras no puedo quedarme aquí, a mi nana le daría algo. -Respondo y Sean sonríe de lado.

-Seguramente Ofelia piensa de ti como su pequeña nieta inocente y pura, si supiera en todas las posiciones en las que ya te he puesto, o en todos los lugares en los que ya te la he... -Le tapo la boca con mi mano izquierda sintiéndome sonrojar.

-Suficiente, no necesito que me menciones nuestras experiencias juntos. -Siento como su lengua lame mi mano y haciendo una mueca de asco la retiro con rapidez. -¡Eso ha sido asqueroso! -Chillo tallando mi mano en su hombro.

Una risa ronca brota de su garganta llenando la habitación, cuando esta cesa remoja sus labios antes de hablar. -No seas de doble moral; piensas que es asqueroso que pase mi lengua por tu mano, pero cuando la meto en tu... -Vuelvo a taparle la boca, esta vez con diversión.

-No sé que traes hoy, pero enserio necesitas dejar de decir ese tipo de cosas, no quiero que me recuerdes nada. -Trato de sonar seria, pero la sonrisa en mi rostro no ayuda mucho.

-¿Prefieres que te lo demuestre? -Pregunta en cuanto remuevo mi mano de su boca. Niego ante su expresión risueña.

-Así estoy bien, gracias. -Digo manteniendo un tono de voz firme.

-Hablando con total seriedad, mi propuesta siempre va a estar en pie. -Me recuerda y yo me limito a asentir.

Vuelvo a recargar mi mejilla en su pecho sintiendo como me abraza, suspiro dejándome envolver por la atmósfera tranquila que se ha creado, estos momentos eran los que más me gustaban al estar con Sean.

-¿Eres mío? -Le pregunto.

-Si Thea, lo soy. -Me responde y yo comienzo a entender su necesidad de recalcar que le pertenezco.

-Y yo soy tuya.

-Por supuesto que lo eres. Mía, absolutamente mía.








⚔️⚜️⚔️









Sean duerme plácidamente boca abajo, no me quiero levantar, pero las ganas de hacer pipí hacen que me apresure a ir al baño arrastrando una de las sábanas conmigo, al terminar lavo mi rostro y enjuago con agua mi boca tratando de deshacerme del mal sabor mañanero.

Al salir no puedo evitar detenerme a apreciar el trasero del rey, el cual se encuentra al descubierto ya que al moverse la sábana se había bajado.

Me vuelvo a subir a la cama tratando de no moverme demasiado, no me acuesto, en su lugar prefiero sentarme a su lado mientras analizo su espalda. Específicamente el triángulo en este, tan semejante al de Sky, podrían fácilmente ser una copia exacta.

Decido que ahora es cuando debería preguntarle a Sean sobre este.

Con cuidado de no aplastarlo, paso una de mis piernas sobre su cuerpo para después acomodarme de manera que quedo ligeramente sentada sobre su espalda baja, con cada una de mis rodillas a sus costados. Paso mi cabello detrás de mis orejas para que no me estorbe mientras me inclino comenzando a besar sus hombros, dejo pequeños mordiscos en su piel y siento como se remueve debajo de mi, se estaba despertando. Continuó besando su espalda bajando lentamente por esta hasta llegar a la curva donde inicia su trasero.

-Maldición Thea, estás haciendo que mi erección crezca. -Dice en un susurro ronco debido a que se viene despertando.

Beso exactamente el lugar donde se encuentra esa marca de nacimiento. -Tienes un triángulo raro. -Comento con total normalidad pasando la yema de mis dedos sobre este.

-Ese triángulo corre en la familia de mi padre, lo ha hecho por generaciones. -Dice vagamente.

-Igual me sigue pareciendo raro. -Suelto sin mostrar el más mínimo interés en lo que dice, pero en realidad quiero saber más.

-Raro o no, anteriormente así era como se aseguraban que los hijos de los reyes realmente lo eran, hasta el día de hoy no ha nacido un solo descendiente que no tenga este lunar. -Hace una breve pausa girándose de manera que ahora quedo sentada sobre su abdomen. -Cuando nuestros hijos nazcan tendrán exactamente la misma marca.

-Yo no quiero a mis hijos con ese triángulo raro. -Bromeo, realmente tratando de ocultar lo mucho que me ha afectado esa información.

¿Acaso Sky era hija de... No, tiene que haber otra explicación, una que aún no lograba encontrar.

Veo a Sean sonreír antes de morder su labio inferior. -Quiero verte así cada mañana; desnuda encima de mi.

Me sonrojo antes de inclinarme para alcanzar sus labios en un beso que se ve inmediatamente interrumpido en cuanto un quejido brota de mis labios, al sentir como Sean apretujó con fuerza mis pechos.

-Quizá aún no vamos a tener hijos, pero eso no impide que sigamos practicando. -Susurra esta vez pellizcando mis sensibles pezones. -Móntame, Thea.







Hola, hola. ¡KING YA TIENE 100k! Muchas gracias por todo. Los amo. ⚡️

*Para los que ya se pasaron por "TOXIC" no sé, tienen mi corazón, y aprovecho para avisar que la actualizaré cuando KING termine (que ya queda muy poco como entre 5-10 caps).

K I N G  #1 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora