Capitulo dos:

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—Viejo estúpido —murmuró Rose mientras salíamos de clase—. En serio, siempre me dicen que pasado pisado y mira, tenemos historia...¿acaso tiene lógica? No, ninguna.

Sonreí levemente mientras la miraba, tenía una trenza cosida y el sol impactaba en su pelo dorado provocando que pareciera angelical pero eso era imposible, la chica tenía más carácter que cualquier chico del instituto.

Esa pequeña rubia parecía un huracán cuando se enojaba y era mejor no estar cerca cuando lo hacía.

Pero imaginaba que Kyle tenía más carácter que ella.

—Kyle —dije repentinamente, había olvidado por completo que lo vería—.Oh no, viene a buscarme y no lo recorde. Joder ¿donde mierda he tenido mi cabeza?

—¿Como que viene? —Besé la mejilla de mi amiga y la tomé por los hombros.

—Luego te explico. No olvides llamarme en cuanto llegues a tu casa, por favor.

La vi sonreír de costado mientras me miraba divertida, acostumbrada a mis precauciones con ella.

—Claro que si, mamá —dijo divertida—. Ahora mueve tu culo antes que los nervios se te noten. Eres una chica sexy así que ve y haz que note que no tienes nervios.

No demoré en hacer una mueca.

—Pero si los tengo.

—¡Pero no los demuestres! —Enseguida me miró buscando algún detalle—.La ropa es adecuada, los jeans remarcan tu trasero así que solo deja de retorcerte los dedos. Coloca una sonrisa bonita y no bajes tu mirada en ningún momento, ¿vale?

Tome aire y asentí, sabiendo que ella tenía razón.

Podía mostrarme nerviosa ante cualquier persona, menos ante Kyle.

—Vale. —Me voltee y salí de la secundaria. Bajé unos escalones y a lo lejos pude ver su Audi R8 y un montón de chicas rodeando el carro.

¿Acaso esto le sucedía siempre? ¿Tan acostumbrado a la atención estaba? Si, joder, ¡él chico es condenadamente atractivo! ¡Claramente tendría varias chicas al asecho!

Mi suerte apestaba, siempre aparecía en los peores momentos.

—Permiso. —Me acerqué entre en montón de chicas y lo vi ahí, con unos lentes de sol oscuros, su mandíbula tensionada, una sonrisa coqueta en sus labios mientras su vestimenta iba totalmente acorde a su personalidad; camiseta gris con cuello en "V" , cadenas seguramente de oro, chaqueta negra, jeans negros y botas militares.

—Ahí estas. —Se acercó a mi y me tomó por el brazo. Segundos después sentí su aliento en mi oreja—. ¿Por que demoraste tanto? Estas chicas son un gran grupo de zorras. —Sonreí levemente y dejé que abriera la puerta del coche para entrar, en poco tiempo subió de su lado y aceleró el coche.

—¿Nunca has escuchado escuchado el dicho de "Si las zorras fueran chocolates mi escuela seria la fabrica de Willy Wonka"? Esto es exactamente igual.

Lo vi sonreír y no demoré en imaginar que soltaría un comentario estúpido.

Así lo hizo.

—Veo que alguien está de muy buen humor, ¿te han dado anoche? —Rodee mis ojos porque de alguna forma sus comentarios idiotas me sacaban de mis casillas.

Él lograba que mi paciencia se fuera de vacaciones y eso que generalmente tenía una paciencia increíble. Él se sentía como una jodida excepción.

No me gustaban las excepciones.

—¿Como sigue tu brazo? —Cambié de tema.

—Mucho mejor —respondió al instante.

The boy in my dreams (VERSIÓN ORIGINAL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora