The boy in my dreams (VERSIÓN ORIGINAL)

2da Temporada- Capitulo veintitrés

—¿Por qué no vas a comer algo? —pregunto Brad mientras entraba a la habitación de Kyle y me pasaba una taza de café, lo acepte gustosa y me acurruque contra el sofá—. Tess.

—No quiero dejarlo, estoy segura de que va a despertar. —Bajó su mirada, decepcionado y dolido... Aun no podía ver las auras pero cuando lo veía sentía su dolor traspasar mi muro, ya no habían colores, muros, sueños...

El dolor no me permitía desempeñarme como Dreamer cuando el estaba así.

—Tess, tienes que dejar de engañarte —Miré a Brad y aparté la taza de mi vista, me senté derecha y le mandé la mirada más sincera que tenia.

—Él va a despertar Brad, y quiero que no lo haga solo. —Me asuste cuando el puño de Brad golpeo la pared que había detrás de mi, el yeso de la misma se hundió para dentro dejando la forma de su puño.

Jamas estaba así.

Su respiración se aceleró y pude ver como todo su cuerpo se tensaba antes de que volteara a verme.

—Él no ha despertado en 6 meses Tessa, y no despertara hoy ¿tanto te cuesta comprenderlo?—. Mis ojos se llenaron de lágrimas y pude escuchar como suspiraba, se agachó frente a mi y apoyó su mano en mi rodilla—. Tienes que seguir con tu vida, no puedes dejar todo ir.

—No lo estoy haciendo solo que no se...no se vivir sin él. —Abrió sus brazos y partí en llanto mientras me aferraba a él, era yo la que no podía despegarse de la habitación de Kyle y sabía que tampoco lo haría hasta que saliera de allí conmigo.

Mi vida se había vuelto una monotonía. Me quedaba en el sofá de la habitación, iba a la casa a ducharme y cambiarme para luego volver y sentarme en el mismo sofá por horas.

Todos los días me despertaba y me repetía que iba a despertar, que solo tenia que ser paciente pero ya ni los médicos me daban esperanzas.

—Lo sé, pero él no quiere esto para ti y me matará cuando despierte y note en lo que dejé que te convirtieras. —Le dolió hablar como si su mejor amigo o mejor dicho, su hermano fuera a despertar.

Le dolió llenarme de esperanzas.

—Él pateara tu trasero —afirmé intentando sonreír, escuché su risa forzada y mi corazón se estrujó al saber que sólo yo me mantenía de las esperanzas y los engaños, ya todos podían ver la realidad...Menos yo.

—Lo hará. Ahora hazme caso ¿vale? Ve a la casa, duerme un rato en una cama de verdad y vuelve por la noche...él no se ira.

—Esta bien. —Quise que se sintiera mejor y si cuidarme lo ayudaría pues estaba dispuesta—. Deja que hable con mi madre ¿esta bien? Le pediré que venga al menos cada 1 hora a chequearlo. —Asintió y beso mi cabeza, estiré mis miembros y esperé que dejaran de doler antes de levantarme y salir de la habitación.

La luz me encandiló por unos segundos hasta que me acostumbré a ella y caminé hasta el puesto de enfermería, ahí encontré a mi madre.

—Cariño, ¿Kyle como esta? —Sonreí por su preocupación y besé su mejilla mientras sentía las miradas de compasión que me mandaban sus compañeras.

Estúpidas cotillas.

—Esta bien, solo que Brad pidió que vaya a descansar y quería saber si tu podías chequear que Kyle estuviera bien.

—Claro, cariño. ¿Te veo mañana? —Negué con la cabeza, podían hacer que me fuera por horas pero no por una noche entera, eso si que no.

—Nos vemos antes de la noche. —Y así salí del hospital sintiendo que cada paso fuera era un paso más lejos de él, sentía que lo estaba abandonando y eso creaba un nudo en mi garganta.