The boy in my dreams (VERSIÓN ORIGINAL)

Capitulo veinte

—Siento lo que viste esta noche. —Asentí con mi cabeza mientras miraba su perfil en la oscuridad que había dentro del coche.

Tal vez no tenía el perfil más perfecto pero me parecía el más hermoso...¿A quien engaño? Su perfil si es perfecto.

—Esta bien, es tu trabajo.

—Solo no se que fue lo que paso en mi cabeza para querer llevarte ahí... —Interrumpí.

—Kyle...

—Me siento el idiota mas grande del universo y... —Rodee mis ojos mientras una pequeña sonrisa se escabullía en mis labios.

—Kyle...

—Tú lo manejaste bien pero... —El chico no se callaba.

—¡Kyle, ya basta! —Por primera vez se calló y me miro asombrado—. Deja de tratarme como si fuera una pequeña idiota que no logra entender nada. Es tu trabajo y lo entiendo, nada de lo que paso allí me afecta o cambia mi forma de pensar.

—¿Hablas en serio? —preguntó y supe que no creía que me lo tomara tan bien.

—Hugh, si que eres complicado. —Vi como sonrió de costado, un poco más aliviado por mi reacción—. Esta todo en orden, no debes preocuparte por eso.

—Vale, ¿te llevo a tu casa...? —En ese mismo momento vibró mi móvil provocando que él soltara un suspiro pero no dijo nada mientras revisaba la pantalla y atendía al ver que era mi mejor amigo.

—¿Matt?

—¡Hola, princesa! —saludó a los gritos por el teléfono mientras escuchaba música de fondo, eso no era bueno—. Surgió una fiesta y...

—¿En mi casa? ¡Matt, te voy a matar!

—Lo sé, por eso estoy disfrutando y advirtiéndote de lo que puedes encontrar cuando vengas. Igual no te alarmes, cerré tu habitación y la de tus padres bajo llave.

Estaría borracho pero no era tan idiota como para cavar su propia tumba.

—Si destrozan algo y mis padres se dan cuenta sabes que me mataran y antes que ellos lo hagan yo acabo contigo. —Kyle me miro de costado mientras arqueaba su ceja—. ¡El idiota hizo una fiesta, Kyle!

Vi como se le escapo una risa frente a mi tonó histérico pero claro, no sería a el al que retarían.

—¿Quieres quedarte en casa? Ve si él puede arreglarse solo. —Lo pensé un momento antes de asentir con mi cabeza.

—Tu hiciste la fiesta así que espero que cuando llegue mañana este todo en orden ¿vale?

—Vale, ¡te quiero enana! —Rodee los ojos mientras dejaba escapar una pequeña risa—. Oh dios, ¡eso si fue un gran desastre! Tengo que dejarte ¿si?

—¡¿Qué hicieron?! —Esperaba que no hayan roto el jarrón favorito de mamá o estaría encerrada de por vida.

—No importa. ¡Te quiero!

—También te quiero pero tienes que.... —Cortó la línea dejándome hecha un manojo de nervios. No tenía ni idea de que fue lo que ocurrió en mi casa pero seguro se fue antes de que yo atravesara el teléfono y lograra matarlo.

Ese pequeño idiota.

—¿Qué paso?

—No lo se, el idiota me colgó.

—Quieres a ese idiota. —Resopló Kyle, lo mire con mi ceja arqueada mientras jugaba con el brazalete en mi muñeca.

—Claro que si, es mi mejor amigo —respondí más que obvia, era el colmo que estuviéramos hablando de eso.