The boy in my dreams (VERSIÓN ORIGINAL)

Capitulo cuarenta y cuatro

Narrado por Kyle:

—Debes calmarte —pedí mientras la veía capturar su labio inferior entre sus dientes. Tal vez yo no tenía el don para leer sus emociones pero sabia que estaba apunto de tener una crisis de pánico algo que hace mucho no veía que tuviera.

Si mal no lo recordaba la ultima había sido el día en el que me había encontrado con Clarissa, la estúpida animadora pero esta vez parecía distinto.

Ella no gritaba, no chillaba ni parecía apunto de colapsar pero vaya que yo lo sabia.

Le estaba costando cada vez mas respirar, la veía cerrar sus ojos con fuerza mientras presionaba sus puños y se obligaba a continuar respirando.

¿Como una persona que parece tan fuerte puede ser tan frágil?

—¿Como lo encuentro? le falle...yo le falle. —Su voz salio tan débil que me costaba mucho no atraerla a mi pecho y susurrarle que todo estaba bien pero sabia que no le gustaba que le mintieran en su cara y si su hermano realmente estaba vivo. Nada saldría bien.

—Mírame. —Negó con la cabeza mientras miraba el suelo. Solo pude arrodillarme frente a ella y tomar su rostro entre mis manos obligándola a que me viera—. No puedo prometerte que todo estará bien pero si que haremos esto juntos, si el esta vivo lo encontraremos.

Dejo que sus ojos celestes se llenaran de lágrimas antes de comenzar a frotar sus manos en sus jeans.

—Estoy segura de que el esta vivo, tienes que creerme...ustedes tienen que creerme —rogó con la voz angustiada. Su nariz comenzaba a quedar ligeramente rosada mientras nos quedaba viendo, esperando que alguno de nosotros le dijera que estábamos seguros de lo que ella decía.

Pero aunque quisiéramos creerle era todo demasiado confuso. Se supone que existía una autopsia y hasta había una lapida con su nombre en el jodido cementerio, si el estaba vivo era por alguna razón demasiado jodida. Le creía pero necesitaba tener mas información si quería poner a toda una banda en su búsqueda.

—¡Ustedes no me creen! —Se coloco de pie obligándome a apartarme de su camino. Comenzó a caminar por toda la habitación mientras unos gemidos involuntarios escapaban de su garganta y demonios, solo quería que jamás nada la perturbara pero los problemas parecían venir con nuestra relación.

—Se esta alterando demasiado —susurro Jaden para que sólo nosotros lo escucháramos, apoyo una mano en mi hombro antes de hacer un mueca—. Hay que sedarla, sabes que después del accidente quedaron secuelas y no puede alterarse de esa manera.

Y eso era mi estúpida culpa. Meses después ella seguía con secuelas.

Secuelas por salvarme cuando yo era quien debía protegerla de todo y de todos...No podía perder a otra mujer importante en mi vida.

—Trae el paño húmedo en cloroformo, yo me encargo del resto. —El solo asintió con su cabeza antes de voltear e irse escaleras abajo, en dirección al sótano.

—Cariño. —Ella volteo a verme—. Haremos esto pero tenemos que empezar por alguna parte. Hay información que necesitamos y no va a ser fácil dar con su jodido culo si alguien quiso desaparecerlo. Jaden apareció con la mano escondida y se coloco detrás de mi. No tarde en colocar mi mano detrás de mi espalda y a los segundos el dejó el paño allí—. Tess, ¿tu confías en mi?

—Sabes que si. —Tome aire, preparándome para lo que estaba apuntó de hacer.

—Entonces no intentes luchar. —Me miro sin comprender pero no tarde en rodear su cintura con mi brazo y presionar el paño en su nariz y boca para que no pudiera respirar nada mas que el químico.