Ámbar
En el día siguiente estaba saliendo del entrenamiento y escuché una melodía conocida. Era la canción que me Simón me había dedicado. Cerré los ojos y sonreí al escuchar su voz. Aun estaba todo tan reciente que me llegó al corazón. Abrí los ojos y lo busqué. Quizás él estaba haciendo aquello para llamarme la atención. Simón estaba sentado en la punta del escenario, pero luego vi que no estaba solo. Estaba con Alisha. No podía creer que él me estaba haciendo aquello. Aquella era nuestra canción, la canción que él me compuso y no era la primera vez que ellos la cantaban. Quería gritar, llorar y decir a todos que estaban en el Roller que aquella era mi canción. Los miré en silencio y Alisha empezó a cantar la segunda parte. Sonreí de manera irónica y Simón tocó su pelo rubio. Era la misma forma que él hacia conmigo. Simón no podía reemplazarme de aquella manera y menos hacer eso frente a mí. En aquel momento juré hacer la vida de Alisha imposible. Ella no se iba a quedar con lo que era mío. Me fui de vuelta al área de los lockers y encontré Emilia.
- ¿Qué te pasa? – Ella se dio cuenta que yo estaba prestes a explotar. - ¿Ámbar?
- Yo odio a esa chica nueva. – Dije, respirando profundamente. Mi respiración estaba alterada y Emilia me encaraba sin saber que decirme.
- ¿Por qué? ¿Qué ella te hizo?
- No sé, Emilia, solo la odio. – Respondí y suspiré. – Quiero hacerle la vida imposible. ¿Crees que ella se parece algo conmigo?
- No. – Emilia negó. - ¿Por qué estás preguntando eso de repente?
- Escuché unas personas diciendo que ella es mi remplazo. – Mentí. – Ella está afuera en el escenario cantando y llamando toda la atención para ella. Las personas la están mirando, exactamente como hacían conmigo.
- No, nada que ver. – Mi amiga repitió y me sonrío. – Ella es más joven que tú, dos años, creo. Sus ojos son un poco más hermosos que los tuyos y el pelo también me recuerda un poco de ti. Pero... - Ella miró a otro lado. – Ok, quizás ella puede ser tu remplazo algún día.
- Ella ya lo es. – Balanceé mi cabeza negativamente. – La vi cantando y todos estaban encantados con su voz.
- ¿Y? ¿Por qué te molesta tanto que ella esté cantando en el escenario?
- La vida cantando con... - Hice una pausa. Yo no me prestaría a ese papel. – Cantando cosas parecidas con las que yo canto. Y las personas dijeron que ella es mi remplazo y me molestó.
- Sigues siendo la mejor. – Emilia intentó confortarme. – Imposible que ella sea tu remplazo.
- Ella ya me remplazo en lo más importante que tenía.
- ¿De qué estás hablando?
- Emilia, necesito decirte algo. – Me odiaba en pasar esa vergüenza, pero necesitaba decir a alguien lo que estaba sintiendo.
- ¿Lo tuyo con Benicio?
- Ni me hables de Benicio. – Pedí. – Ya dije que no lo aguanto más y menos esa situación.
- Cálmate, Ámbar. Ayer no me dijiste que te pasaba y me quedé sin entenderte. – Ella se acercó de mí y me miró fijamente. – Decime que te pasa.
- ¿De que hablan? – Benicio apareció de la nada y me fui.
Salí del Roller arreglando mi bolsa en el hombro y me detuve cuando vi Simón y Alisha. Ella lo estaba abrazando tan cerquita y no sabía porque seguía parada, mirando aquella escena. Quizás yo era algo tipo de masoquista. Simón puso sus manos envuelta de su cintura mientras caminaban. Todo el mundo parecía haber parado. Yo no tenía ninguna reacción de como seguir caminando. Parecía que estaba presa en una pesadilla. Mis lágrimas empezaran a caer de forma involuntaria y intenté volver a moverme. Después que ya no los vi a mi frente, volví a la realidad y empecé a caminar de vuelta para casa, pero alguien agarró mi brazo impidiéndome de caminar.
- ¿Qué te pasa? – Emilia preguntó y yo no tenía coraje de mirarla. – Ámbar, saliste corriendo cuando viste a Benicio. Ya sé que no lo soporta, pero ¿Qué te pasa?
- Ya no puedo esconderte eso. – Dije y me volteé a Emilia. Matteo estaba parado a su lado y me miraba con compasión. – No me mire de esa forma.
- ¿De que forma? – Ella cuestionó y Matteo me dio una media sonrisa. – Decime que te pasa, por favor. Estoy preocupada por ti.
- Emilia, sé que no me vas a creer, pero... - No lograba decir la verdad. – No puedo, no consigo decirte eso.
- Ámbar, estás rarísima. – Ella constató y miró a Matteo. Él acordó y yo miré al suelo. – Primero me dices que no te gusta Benicio, después empiezas a quedarte obsesionada por la chica nueva, salís de esa manera del Roller y estás llorando.
- Emilia, estoy enamorada de Simón. – Dije de una vez y ella sonrió. – Es en serio que te digo.
- Ok, Ámbar, ahora decime la verdad. – Ella pidió riéndose de mí. Matteo solo me miraba sin manifestarse. – No me vas a estafar, Ámbar.
- Emilia, te estoy hablando la verdad. – Engullí mi llanto. – Yo me enamoré de Simón y él ya no quiere estar conmigo. Ahora está con Alisha haciendo las cosas que hacíamos juntos y me duele muchísimo.
- No te puedo creer. – Emilia seguía riéndose de mí. - ¿Estás escuchando eso, Matteo? Ámbar está enamorada del loser.
- Ya lo sabía, Emilia. – Él dijo y Emilia pareció darse de cuenta que era verdad. – Ellos estaban juntos en las vacaciones. Ya sabía de eso.
- No puedo creer que has caído tan bajo. – Ella movió su cabeza de forma negativa y me encaró. Matteo seguía sin decir nada. – Ahora te vas a quedar llorando por un loser, porque te enamoraste de un loser, porque te gusta un loser y porque no soporta que él no te quiera. Ámbar, ¿Ya te has dado cuenta que un loser no te quiere? Él prefiere estar con una chica nueva a estar contigo.
- Emilia, no le hables así. – Matteo pidió y Emilia volvió a reírse.
- No puedo con eso. – Ella dijo con desprecio y se fue.
- ¿Por qué dijiste eso? – Encaré a Matteo. – Nuestro trato era que no ibas a decir nada a Emilia.
- Ámbar, yo no rompí nuestro trato. – Él aseguró. – No tengo la culpa si eres tan tonta que dejaste hacerse notar que él te gusta. – Matteo también se fue.
En aquel momento resolví que olvidaría a Simón. No podía creer que había dicho a Emilia que estaba enamorada de él, después que lo dije me di cuenta de lo idiota que había sido. Matteo tenía razón: Yo era una tonta. Dejaría de ser una tonta y lo olvidaría, pero Alisha tampoco se quedaría con él. Era una promesa.
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JUEGOS | Fanfic Simbar (COMPLETA)
Novela JuvenilSinopsis: ¿Qué pasa cuando dos personas completamente opuestas se atraen? Ámbar es la chica más popular de su barrio y una de las integrantes de los Red Sharks, un equipo muy influyente de patinaje. Ya Simón no tiene muchos amigos, es parte del equi...