Amores pasajeros

¿Novios?

>POCHÉ<

El sol entraba por la ventana de mi habitación y daba directo en mi cara haciendo que tapara mi rostro con el edredón, esto no duró mucho ya que pronto comencé a quedarme sin aire y tuve que levantarme de la cama.
>Eso te pasa por floja< Pensé mientras me sentaba en el borde de la cama para colocarme las pantuflas, una vez puestas estiré mi pequeño cuerpo intentando librarme de mi pereza, lo cual por cierto, no funcionó.
Revisé mi celular y eran las 7:00 am, decidí darme una ducha para luego ir a la cocina y prepararme un desayuno express debido a la falta de tiempo, piqué un poco de fruta y les esparcí por encima un poco de queso cottage.

Aún tenía el número de Calle debido a la noche anterior y mis ganas de enviarle un mensaje me mataban hasta que vencieron al fin.

-¿Qué tal se encuentra tu ropa? ¿Se salvó?- Rápidamente oprimí el botón de enviar antes de que mi razón me hiciera borrarlo.

De inmediato sonó mi celular mostrándome la respuesta de Calle.

-Mmm... creo que si, la llevaré al doctor por si deben checarla.- Solté una pequeña risa y de inmediato le respondí

-Buenos días señorita Calle.-
-Buenos días señorita Garzón.- Respondió haciéndome sonreír.
-Te veo en un rato, debo apurarme.- Solté el celular y fui a acomodar la pequeña mochila que cargaba.

El camino a la escuela fue relativamente aburrido, cuando llegué a la institución el primero en recibirme fue Adam, aquel chico sabía hacerse notar.

Buenos días Garzón, ¿qué tal la mañana?- Cuestionó

Bastante bien joven Murphy, ¿vamos a clase?- Reí un poco debido al tono tan gracioso que estábamos utilizando.

Será un placer.

Comenzamos a caminar y en el pasillo me encontré con Calle, por desgracia en manos del chico que la acompañaba la última vez, decidí sonreírle y de pronto sentí como el brazo de Adam pasaba por encima de mis hombros haciendo un tipo de abrazo, comencé a reír y entramos al salón del profesor Wood.

La clase fue realmente tediosa ya que el profesor solo dio una platica sobre los jóvenes que ahora somos el futuro del mundo y de la sociedad, a lo cual Adam hizo burla toda la clase haciéndome reír con cada acción, ese chico era más agradable de lo que creí.
Cuando al fin llegó la hora del almuerzo decidimos comer en la misma mesa así que colocamos la charola en nuestro lugar y nos dispusimos a comer.

Ese profesor es mi favorito, me inspira.- Expresó en tono de burla.

¿Te inspira para burlarte?- Cuestioné tomando la manzana de mi charola para darle una mordida.

Debes admitir que no hubiéramos sobrevivido a su letanía sin mis chistes.

Comenzamos a reír recordando cómo en una ocasión mientras el profesor se volteaba a escribir algo en el pizarrón Adam llamó la atención de todos en él aula para expresarnos que estaba en total acuerdo con el maestro.

Mi parte favorita fue cuando le mencionaste que era tu ejemplo a seguir y lo creyó.- Solté una risa al recordar el momento.

Debía creerlo, soy muy buen actor para tu información.- Adam llenó su boca de la pasta que nos proporcionaron para comer.

De pronto observé cómo Calle se acercaba a la mesa y tomaba asiento a lado de Adam, el cual se ubicaba enfrente mío al otro lado de la mesa.

¿Qué tal chica nueva?- Saludó Calle mientras nos miraba.

Esta pasta es deliciosa, iré por mas.- Se apresuró a decir Adam mientras se levantaba de la mesa.

Comencé a reír y después de terminarme el bocado le respondí a Daniela.

¿No es peligroso que yo esté cerca de tu atuendo?- Cuestioné haciendo a un lado la bandeja de mi comida.

Tal vez... pero es un riesgo que planeo correr.

No puedo creer que hayas dicho eso. Ambas empezamos a reír de su comentario y de pronto se creó un silencio.

Su cabello estaba suelto e iba con un vestido bastante lindo junto con una chaqueta a juego.

Entonces... ¿tú y ese chico?- Preguntó sacándome de mis pensamientos.

No no, para nada, el no es mi tipo.- Me apresuré a decir.

¿Y cuál es tu tipo?- Cuestionó riendo levemente.

De hecho... soy lesbiana.

Mi respuesta pareció sorprenderla y creí que lo tomaría mal pero segundos después me sonrió y sentí un pequeño alivio.

Bueno pues... hay chicas bastante hermosas aquí, te presentaré algunas.- Bromeó

>¿Y si me interesaras tu?< Cuestioné en mi mente.

No hace falta, pronto comenzarán a lloverme muchas.

El timbre del colegio sonó indicando que debíamos entrar a la siguiente clase y Calle se despidió para unirse nuevamente al chico de veces pasadas y un grupo de atletas más.

¿Qué haces hablando con Daniela Calle?- Cuestionó Adam volviendo a la mesa.

La asignaron el día en que llegué para darme el recorrido.- Su mirada era de sorpresa y la curiosidad inundó de inmediato mi mente.-¿Por qué debería ser extraño?

Adam se quedó un momento en silencio y respondió.

Pues debido a que es una de las chicas más populares del instituto, muero por ella desde que nací.- Bufó y comencé a reír.-Tal vez podrías presentármela.

Sentí como literalmente el alimento bajaba a mi estómago y volvía a subir cuando escuché ese comentario.

Podría...- Me limité a responder y levanté mi bandeja de la mesa.