31 | Pasado

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M A R T E S

Luna POV

Bostecé una vez más para beber otro sorbo de mi café. Como disfrutaba de desayunar sin la molestosa compañía del resto de mi familia. Sé que a estas horas debía estar en el Blake, pero logré convencer a mis padres de ausentarme hoy con la excusa de visitar a Matteo en su casa ya que estaba obligado a pasar todo el día en cama.

Obviamente no les conté que fue lo que hizo que terminara en el hospital porque le prometí no decir nada, pero ganas me sobraban de delatar a Simón y que pagara por lo que hizo.

Y justamente hablando de él, Simón apareció en mi campo visual al entrar al comedor provocando que le regalara un bufido mientras que él me fulminó con la mirada.

—¿Qué hacés vos acá?— Preguntó sin una pizca de amabilidad.

—¿Sentada en el comedor de mi propia casa?— Solté irónica logrando que él ruede los ojos —La pregunta más bien sería, ¿qué hacés vos acá? ¿No deberías estar en la facultad?... ¡Ah no!... Cierto que la dejaste hace mucho.

—Mira Luna, no estoy de humor para hablar con vos, así que será mejor que me vaya...

—Adelante, nadie te lo impide, es más, vete de mi casa y no regreses nunca más — Dije para morder un pedazo de un tostado sin mirarlo a los ojos.

—Yo verdaderamente no entiendo como me dejé engañar por alguien como vos— Soltó con disgusto.

—Vos no tenés derecho a reprocharme nada después de lo que hiciste.

—¡No! Vos no tenés derecho a decirme que hacer después de lo que vos hiciste— Alzó el tono de vos provocando que la furia comenzara a crecer en mí.

—¡¿Lo qué yo hice?!— Exclamé levantándome de mi asiento —¡Vos fuiste quien mandó a Matteo inconsciente al hospital y ahora él está con un collarín sin poder salir de su cama! ¡Así que no vengas vos a darme lecciones de moral!

—¡Todo lo qué pasó es por tu culpa!

—¡¿Mi culpa?!— Grité incrédula —¡¿Ahora me vas a culpar a mí de tus acciones?!

—Si vos nunca te hubieras metido con Matteo mientras estaba de novio con Ámbar nada de esto hubiera pasado...— Reí burlona ante sus palabras.

—Yo no obligué a Matteo a nada, si él estuvo conmigo fue porque él quiso, porque estaba harto de la princesita y se dio cuenta como es verdaderamente.

—No metas a Ámbar en esto, esto es entre vos y yo— Demandó cruzando de brazos.

—No, te equivocas, vos y yo no tenemos nada de que hablar...

—Yo creo que sí... No sólo te bastó con meterte con Benicio, sino que ahora hacés lo mismo con Matteo... ¿Cuál es tu problema en la vida que querés todo lo que es de mi hermana?

—Estás muy equivocado, Simón... Si las cosas pasaron de esta manera es porque Ámbar se empeña en quitarme todo en la vida, me quitó a Benicio cuando más enamorada estaba de él y ahora hizo lo mismo con Matteo... ¿Seguís pensando que ella es la buenita del cuento? ¡No, no lo es! ¡Es sólo una zorra más!

Ella o Yo | TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora