Déjame amarte ©

47|Despedida de soltera.

Bazzi - Myself

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|ANNABET FOSTER|

—No bebas en exceso —susurra cuando vamos bajando las escaleras, al llegar al final de esta sonrío y giro a verlo, mientras me cruzo de brazos.

—Tú tampoco lo hagas.

Sonríe y niega con la cabeza.

—Soy el conductor designado.

—Mira que sorpresa, yo también lo soy.

Su sonrisa se ensancha y se inclina para plantar sus labios sobre los míos, el contacto es suave y dulce, un pequeño suspiro sale de mis labios. Debido a los ensayos para la boda, y que la organizadora —que mi madre buscó a última hora para que Less no se estresara por los preparativos—, sea una mujer gruñona y algo estricta, no me ha permitido verlo muy frecuente.

Solo en mis ratos libres, y cuando dormimos Timmy lo hace con nosotros, debido a que estamos lejos de casa.

—¡Anne mueve ese culo! —escucho el grito de Chloe y ambos reímos por ello.

—Nada de chicas —susurro a escasos centímetros de sus labios.

—Y tú nada de chicos. ¿Eh? —repite.

—Nah, tranquilo por ello. No hagas nada estúpido —pido y dejo un casto beso en sus labios, mientras caminamos hacia afuera de la mansión.

—No lo haré —susurra bajito y besa mi mejilla.

Sonrío y me alejo de él cuando ya estamos fuera de la casa, Chloe tiene la cabeza por fuera de le ventanilla del auto y rio entre dientes al escucharla gritar que lo mueva, lo mismo que hace Less, quien va de copiloto.

Me monto al auto y lo enciendo, escucho a Less gritarle a Andrew que no beba demasiado y él le grita que la ama. Salgo del área de la mansión para ir hacia uno de los clubs que Chloe y Gemma —quien está un poco distraída—, encontraron. La boda será dentro de unas horas, y la despedida de soltera de Less apenas solo empieza, igual que la de Andrew.

—¡Fondo, fondo, fondo! —coreamos para animar a Chloe que se tome el chupito de vodka.

Mi hermana, que ya luce como una loca con sus cabellos desordenados, alza el dedo pulgar y se toma de un solo golpe el líquido en el vaso de cristal, gritamos eufóricas y ella hace una mueca. Ya es la cuarta ronda que ellas llevan, mientras que es muy poco lo que yo me he tomado.

—¡Esa es la pequeña Foster! —brama Less y se acerca para abrazarla con fuerza.

Me limito a reír, la bufanda que tiene es de color purpura, igual a las demás, pero ella tiene una corona en su cabeza y sus ojos ya están achinados por el licor que ha consumido.

—¡Hay que pedir otra ronda! —grita Gemma y las otras dos gritan en afirmación.

Veo a la parlanchina mayor caminar algo desestabilizada hacia la barra y pedir otra ronda, para después venir hacia nosotras y sentarse mientras el mesero trae el pedido. La noche ha consistido en ver a hombres bailando, una despedida de soltera sin strippers, no es una despedida de solteras.

Palabras de Chloe, no mías.

—¡Buenas noches, hermosas mujeres! —habla un hombre por el micrófono—. Un pequeño pajarito nos ha dicho que hay una mujer celebrando su despedida de soltera.