Déjame amarte ©

Epílogo

Ed Sheeran - Perfect

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|OWEN JONES|

Meses después...

Cuando era niño no tenía idea de que era lo que iba a ser cuando fuera grande, había veces en las cuales quería ser futbolista, otras en las cuales quería ser boxeador profesional y otras veces decía que sería un juez o psicólogo para ayudar a las personas. Pero después termine haciendo lo mismo a lo cual se dedica mi padre, soy un empresario y estoy cumpliendo una de mis metas, las cual me propuse hace un año.

Cuando comienzas a enfocarte en un sueño o en una meta en específico, empiezas lleno de expectativas, sueñas por lo alto, pero también te llenas de terror, porque te da miedo fracasar, porque temes no poder alcanzar las expectativas o no lograrlo. Desde mi punto de vista, el fracaso solo es una pequeña prueba que debería llamarse obstáculo, porque lo intentaste y puedes volver a intentarlo, mejor llamemos fracaso a no intentarlo, a quedarnos de brazos cruzados por miedo.

Así que, si "fracasas", no significa que eres un fracasado, solo significa que debes mejorar algunos detalles de tu plan y debes volver a intentarlo, para poder pasar el obstáculo y llegar a la meta.

Sonrío amplio y saludo a algunas personas, en la distancia veo su cabellera atada en un moño alto, mi sonrisa se ensancha más de lo normal y camino hacia ella. Han pasado meses desde la última vez que la vi, y la falta que me ha hecho es enorme; me acerco con cuidado y la abrazo por la espalda, logrando que se sobresalte y me carcajeo por ello.

—¡Owen! —exclama en un chillido y la giro, tomándola por los hombros.

No hay tristeza en sus ojos, ya no la hay. Sus ojos brillan de felicidad y mi pecho se llena de esa misma felicidad. Saludo a Hugo que está a su lado y le agradezco que la haya convencido de venir, pero él dice que alguien más lo hizo. Arqueo una ceja e introduzco mis manos en los bolsillos del pantalón.

—Así que alguien más —murmuro enarcando una ceja y ella revolotea los ojos.

—No es ningún hombre, es una buena chica que conocí hace poco, es agradable y la estoy acompañando para que escriba la nota que necesita.

—Y también vino acompañada del hijo del dueño del bufete y de su amigo —añade Hugo.

Alzo las cejas con sorpresa y le sonrío, Clary le lanza una mirada de pocos amigos a Hugo y él alza sus manos mientras sonríe en mi dirección. Ya sabía que ella estaba entre salir y no salir con alguien, Hugo me lo contó, pero no sabía quién era.

—No conozco al afortunado, pero quizás lo vea durante la velada.

—Espero que no o estarás en posición de hermano protector —masculla y se cruza de brazos.

—Es mi deber hacerlo.

Entrecierra los ojos y abre la boca para replicar, pero la voz de Timmy se le adelante.

—¡Tía Clary! —grita el enano y lo veo correr hacia ella. Clary se agacha y lo recibe con los brazos abiertos, ambos sonríen y ella besa su mejilla.

—¡Estás hablándome! —dice sorprendida y acariciando su cabello—. ¡Me estás hablando!

—Lo estoy haciendo —dice sonriendo—. Te extrañe, tía Clary.

La mencionada sonríe y sus ojos brillan de lágrimas, lo atrae hasta su cuerpo y lo estrecha con fuerza contra su pecho, dejando un beso en su cabeza. Hace meses que el enano dejo de pronunciar mal la R, ahora lo hace a la perfección.