En tu planeta me quede

21

— Escuche que estuviste internada. — Beck se acercó a Jade recargándose con mucha tranquilidad en el casillero de junto. .

— Escuchaste mal – Exclamó con evidente molestia.

— Jess, la enfermera que siempre te atiende, tiene mi número – Dijo con seriedad, provocando que ella levantara la vista hacia el por un segundo.

— No se porque no me sorprende – Exclamó con el ceño fruncido, mientras devolvía la vista a los libros que estaba guardando.

— Ella me llamo — Agrego — Dijo que pasaste la noche abrazada a una chica – Jade dio un portazo a su casillero y comenzó a caminar ignorando completamente al moreno, quien la siguió. – Me gustaría pensar que esa chica era Tori.

— ¿Qué quieres Beck? — Finalmente se detuvo a mirarlo con un poco de frialdad.

— Necesito hablar contigo de un tema privado.

— Bien – Ella se cruzó de brazos mirando a Beck con atención — Te escuchó.

— Vayamos al armario del conserje.

— No lo creo

— Vamos Jade, a diferencia de ustedes, yo jamás intentaría nada contigo sabiendo que ya tienes pareja

— Si lo dices por Tori — Aclaro molesta — Te recuerdo que yo ya no tenía pareja cuando empezó lo de nosotras

— Olvídalo, fue una estupidez lo que dije – El miró a su alrededor un poco nervioso, luego fijo su vista en Jade.

— Si que lo fue – Jade continuó caminando, ignorando nuevamente al moreno, quien la detuvo tomándola del brazo

— Por favor Jade, ya te demostré muchas veces que estoy de tu lado, aunque no esté completamente de acuerdo en cómo sucedió todo, yo las apoyo – Finalmente la soltó – De verdad necesito que hablemos, es un tema algo delicado y no tenemos mucho tiempo.

— ¿Tiempo? — Ella lo miró confundida, él se quedó callado — Bien, iré contigo al armario.– Explicó – Pero si llegas a intentar algo raro juro que te ...

— No intentare nada. — Afirmó el — Créeme, si por mi fuera evitaría esta platica.

Ambos caminaron en silencio hasta aquel viejo armario, Beck abrió la puerta cediéndole el paso a la enojada chica.

— Bien, ya estamos aquí — Ella se cruzó de brazos volteando su mirada hacia el — Habla.

— Jade, antes de explicarte lo que sucedió quiero decirte que de verdad no tienes ni idea de cuanto lo lamento y que te juro que haré algo para arreglarlo.

— ¿Qué ocurrió? – El la miró con preocupación, Jade se quejó. – Si es tan difícil para ti decirlo, pudiste habérmelo texteado, como cuando terminaste conmigo.

— Perdí mi teléfono – Afirmó con evidente nerviosismo – En realidad de eso es lo que quería hablarte

— ¿Me trajiste hasta aquí para decirme que perdiste tu teléfono? — Preguntó confundida

— Escucha — Le explicó — Cuando la enfermera Jess me llamo yo estaba molesto, se que dije que estaba bien con tu nueva relación y lo estoy. Pero en ese momento miles de recuerdos pasaron por mi cabeza, cuando nos acurrucábamos en tu cama de hospital y pasábamos la noche platicando, tu sabes

— Correcto — Ella lo escuchaba con atención

— Y como estaba molesto, decidí salir a buscar alguna chica para – El hizo una pausa