En tu planeta me quede

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— ¿Recuerdas cuando robe tu lugar en los platinum music awards?

— Y luego me lo devolviste

— Esa noche, mientras cantabas — Dijo mientras se acomodaba en la cama, levantándose sobre sus antebrazos — ¿Recuerdas que hicimos contacto visual y luego terminaste de cantar y nos abrazamos?

— Lo recuerdo.

— Desde esa vez me gustaste.

— ¿De verdad?

— Creí que lo habías notado, después de eso fui un poco menos ruda contigo, no tenía idea de cómo actuar al respecto. — Explicó — Pero luego le pagaste a un sujeto raro para que me invitara a salir e hiciste que Beck y yo volviéramos y bueno, creí que sería imposible que salieras conmigo, así que guarde mis sentimientos en lo más profundo de mi oscura alma

— Tu alma no es tan oscura — Tori quien se encontraba sentada, abrazando sus rodillas mientras recargaba su torso en el respaldo de aquella gran cama, acarició la mejilla de Jade con una gran sonrisa en su rostro.

— Ahora es tu turno de decir cuando te fijaste en mi.

— Es un poco patético — Dijo encogiéndose de hombros.

— Por favor, nada en ti es patético.

— La tercer semana de escuela, cuando dijiste que te había golpeado en el ojo y acepté el castigo — Ante esto, Jade suspiró avergonzada, Tori sonrió — Me sorprendió mucho que fueras a ayudarme a limpiar el teatro.

— ¿De verdad Vega? — Jade se burló, levantando una de sus cejas con algo de sorpresa.

— Desde ahí lo supe.

— ¿Que supiste?

— Que no eres mala, en realidad me pareciste muy hermosa, inteligente y considerada — Jade negó con la cabeza — Luego botaste a Beck, viniste a mi por ayuda, volviste con el, pintaste mi libro de historia Americana de negro y aún lo conservo. — Sonrió — Y el mejor día de toda mi vida en Hollywood Arts fue la primera vez que me abrazaste, después de tu obra "buenos deseos", cuando dejamos a Daisy colgada. Eso fue incluso más genial que cantar en los platinum music awards

— No puedo creerlo. Tal vez si sea un poco patético después de todo — Se burló levantándose para quedar a la altura de Tori — Pero también es muy tierno.

— Oh fue muy patético, después de ese día, literalmente podría haber hecho cualquier cosa por ti, incluso llegue a darle consejos a Beck para que fuera más tierno contigo. ¿Recuerdas aquel disco de los Beatles que te regalo para contentarte cuando pelearon por culpa de Robbie?

— Jamas supe cómo se enteró que es de mis bandas favoritas. Los Beatles son uno de mis placeres más culposos.

— Beck dijo que jamás te gustaría — Se burló — Pero, la playlist privada que tienes... Yo soy tu único seguidor.

— Oh por Dios Vega — Ella soltó una carcajada. — ¿Entonces tu fuiste la que le revelo a Beck uno de mis secretos mejor guardados?

— En mi defensa yo no sabía que era un secreto y él planeaba regalarte una de esas cosas K-pop. Por alguna razón creyó que te encantaría.

— Vaya Vega, entonces doy gracias a Dios que en esos tiempos me conocías tan bien. — Se burló.

— Búrlate todo lo que quieras Jadelyn, pero esa no fue la única cosa en la que lo ayude, técnicamente andabas conmigo, solo que él se llevaba la parte de los besos y abrazos — Agregó avergonzada — Fue muy difícil para mi tener que ver como Beck te hacía feliz a costa mía. Fue toda una tortura.