En tu planeta me quede

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— ¿Entonces tienes una relación con Beck?

— Eso si no me lo esperaba — Exclamó Jade mientras encendía su cigarro — Pero tengo que admitir que me alegra que este contigo cuñadita

— Estaba — Recalcó.

— Oh vamos Trina — Cat trataba de animarla — Beck no esta celoso de Tori y Jade, ya paso mucho tiempo — Después le dio un sorbo a su refresco. 

— ¿Porque crees que esta celoso? — Pregunto Tori mirándola con seriedad

— Por favor — Trina suspiró con algo de tristeza —  Con ver el rostro que hace cuando ustedes dos se apapachan te das cuenta, aparte sus comentarios

— ¿Comentarios? — Preguntó Jade confundida mientras continuaba disfrutando de su cigarro

— Si, tal vez no lo noten... ¿Puedo? — Trina tomó uno de los cigarrillos de Jade, quien solo asintió con la cabeza  — Tal vez sea pura paranoia mía pero... Esta mañana por ejemplo, cuando dijo que tu odiabas el chocolate, según el, se puso así, porque cuando andaban una vez te invito uno y se lo arrojaste en la cara. — Suspiro — Y luego lo escuche hablando con Andre, le preguntaba porque con el eras diferente que con Tori...

— Vaya ... — Jade se quedó pensando por unos segundos, Trina encendió el cigarrillo — Lo lamento Trina

— No es tu culpa y créeme que en parte lo entiendo, duraron tanto tiempo juntos — Ella bajo la mirada  — Y aunque me duela admitirlo, jamas podré competir contigo

— Por favor — Exclamó Jade con frialdad — No tienes que competir con nadie por un chico.

— Y si crees que tienes que hacerlo, el no te merece

— No Deberías de ser segunda opción de nadie amiga — Cat se recostó sobre un mueble masajeador

— Al diablo, hay chicos mas guapos que Beck, ademas, el no tiene lo que se necesita para hacer feliz a una chica — Trina miró hacia Tori y Jade riéndose, todas la miraron sin entender — Por lo que vi en el video, no lo tiene — Ella mostró su dedo meñique tratando de explicar. 

— Trina ... — Tori miró a Jade con vergüenza

— Vamos Merlina, dime, sálvame de no perder mi tiempo — Ella comenzó a reír, Jade, Tori y Cat se miraron la una a la otra sin entender.

— Solo puedo decirte, que nunca fui tan feliz como ahora con Tori

— Oh y ahora serás mas feliz — Trina se puso de pie y tomó la caja donde estaba su regalo — Les compre esto para que no digan que nunca hice nada por ustedes.

— Oh por favor, como si eso pudiera utilizarse, es demasiado grande — Dijo la gótica mientras abrazaba a Tori.

— Quien sabe — Trina volvió a tomar asiento y le lanzó aquel juguete a Jade.  — Esto podría convertirse en su próximo mejor amigo

— ¿Duele? — Preguntó Cat con inocencia

— Oh mi pequeña amiga Cat — Trina se acercó a la pelirroja y con su brazo le rodeó el cuello. — Claro que duele, pero es el mejor dolor que vas a sentir en tu vida

— Trina, deja de pervertir a Cat — Exclamó Tori con una sonrisa burlona.

— ¿Acaso bebieron algo ustedes dos? — Preguntó Jade, mientras veía como Trina y Cat se acurrucaban en aquella silla de masajes juntas

— ¿Puedes culparnos?

— Oh Dios ¿De verdad tomaron algo? — Exclamó Jade soltando una carcajada.