En tu planeta me quede

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Después de esa cena, la casa de Jade era el lugar favorito de las chicas, casi todas las noches Tori se quedaba a dormir con ella. Uno de los tantos fines de semana que pasaban ahí y ya a altas horas de la madrugada, las chicas estaban acostadas, se dieron un baño y miraban televisión, Tori estaba emocionada pues, Jade, con la tarjeta de su padre, había comprado una plataforma donde podía ver todas las series de super héroes que le gustaba mirar cuando se quedaba en casa de su abuelo.

— Oh por Dios Jade, no puedo creerlo, había olvidado este episodio por completo — Exclamo la latina muy emocionada en cuanto apago la televisión

— Pareces una pequeña — A Jade le parecía lo mas fascinante del mundo observar como Tori se emocionaba con las peleas, los cameos entre héroes y los trajes

— ¿Pequeña? — Pregunto de manera burlona mientras la abrazarla — Pero soy mayor que tu Jadelyn August

— Ya vi que cometí el peor error de toda mi vida al decirte mi nombre completo. — Ella sonrió

— Tu secreto esta a salvo conmigo cariño

—  Te tengo noticias Tor — Ella colocó sus brazos alrededor de Tori — Es oficial, mi padre te ama

— ¿Que? O por Dios, eso es algo grande — Exclamó emocionada — Creí que después de que nos escuchó la otra vez me odiaría

— Oh no, es todo lo contrario, en realidad una de las principales razones por las que te ama es porque no puedes embarazarme...

— Hace un par de meses, quien diría que me amaría porque no soy un chico...

— Ni que lo digas — Ella sonrió — Y también me dijo que estas en muy buena forma, que seguramente haces mucho deporte.

— Oh claro, toca mis músculos — Dijo mientras hacía toda la fuerza posible para marcar su pequeño brazo

— Por favor — Se burló — Los únicos músculos que utilizas son los de tus dedos y eso solo porque dibujas.

— ¿Ah si? — Ella se separó un poco de Jade, levantando la vista hacia ella enmarcando su ceja — ¿Segura que solo cuando dibujo?.

— Bien — Sonrió — Admito que no solo cuando dibujas, pero esto no cuenta, igual tus dedos son algo débiles cariño  — Ella se burló, después de eso comenzó a besar a Tori y a acariciarla, incluso logro quitarle su blusa, así estuvieron por algunos minutos hasta que Tori se detuvo y se hizo a un lado, simulando bostezar.

— Hoy mis flojos y débiles dedos están cansados — Dijo de manera burlona.

— Oh vamos Tor — Se quejó.

— Buenas noches cariñito — Tori quien estaba en ropa interior,  le dio la espalda a su chica, segundos después comenzó a simular que roncaba

— Tori ... Tor — Jade comenzó a moverla con gentileza — ¿Cariñito? — Ella trataba de hacerle cosquillas, pero la latina no cedía, cosa que comenzaba a desesperar a la gótica — Oh vamos, no me puedes dejar así — Jade se resigno, dejo de insistirle a su chica, quien rápidamente se volteo hacia ella 

— ¿Así como? — Tori la miro con mucha tranquilidad 

— Tu sabes — Dijo haciendo un puchero — Así de ... caliente

— Oh — Tori la beso, enseguida comenzó a acariciar su cuerpo lentamente y ahora ella le quito la blusa a Jade, paro en cuanto vio que volvió a encenderse paro — Pero cariño, tu no necesitas mis débiles dedos para quitarte la calentura

— Por favor Tor, sabes que eres la única persona que sabe como hacer que tenga un orgasmo ... — Ella la mira con un poco de vergüenza y un poco de súplica en su tono de voz

— Claro que no me necesitas — Exclamó, aún jugando con la calentura de su novia — Puedes utilizar el juguetito que te dio mi hermana

—  Por favor Tori, como si fuera posible utilizar esa cosa— Ante esto y ya un poco frustrada decidió apagar la luz, se tapo con el cobertor y se recostó

— ¿Porque no? — Ella se estiró para alcanzar la lámpara que Jade había apagado

— ¿Recuerdas lo largo y grueso que se ve? Seguramente va a doler

— ¿Porque te dolería si ya has tenido un pene adentro? Es lo mismo — Explicó sonriente

— Olvídalo Tor, mejor hay que dormir ya — Dijo volviendo a apagar la lampara un poco avergonzada

— Oh no — La encendió nuevamente

— Se esta haciendo tarde y ya no quiero nada

— Sabes, podría ser divertido — Ella se puso de pie, aun en ropa interior — Por lo que he llegado a ver en videos, las personas parecen disfrutar esa estimulación

— Tor, de verdad no quiero hablar de eso

— ¿Porque no? — Dijo mientras comenzaba a buscar entre los cajones del closet

— Escucha — Ella se encogió de hombros mientras observaba con curiosidad lo que Tori hacía — Cuando lo hacia con Beck jamas se sintió bien, era todo lo contrario, sentía dolor, frustración y era tan incomodo... me sentía como una muñeca que solo estaba ahí para ser penetrada.

— Eso era porque Beck solo se preocupaba por su placer, jamas recorría tu cuerpo, ni sabia lo que te gustaba, Beck no amaba cada pequeño rincón de ti, no como yo lo hago — Finalmente saco aquel juguete y entro al baño para lavarlo

— Puede que tengas razón — Ella bajo un poco la mirada

— No quiero presionarte, pero — Dijo en cuanto salió del baño y recostándose en la cama, con aquel juguete en la mano — ¿No te da curiosidad?  — Sonrió — Solo lo haremos si tu quieres cariño, pero si aceptas, prometo tener mucho cuidado

— ¿Y pretendes estrenar esa cosa conmigo? — Preguntó con una sonrisa — Oh no, es mi regalo de cumpleaños, si alguien lo va a estrenar seré yo — Ella se lo arrebato — Prometo no lastimarte cariño

— Oh no — Muy nerviosamente Tori se cruzó de piernas — Eso es demasiado injusto, acabas de decir que es muy grande

— ¿Y?

— Jade, yo nunca he ... — Ella comenzó a tartamudear — Nunca he estado con ningún chico.

— Oh por Dios — Con sorpresa y una gran sonrisa en su rostro miró a Tori — Victoria Vega ¿eres virgen?

— Búrlate todo lo que quieras pero virgen no soy, quiero decir, eh estado con otras chicas

— ¿Ah si? ¿Con cuantas?

— Ese no es el punto, el punto es que, uno no puede ser virgen si ha hecho lo que yo — Exclamo avergonzada al mirar la sonrisa de Jade — Solo no he estado con ningún chico, ni he tenido cosas ahí metidas

— ¿Tu himen sigue intacto? — Ella aún se burlaba

— Podría decirse

— Dios Tori, de verdad eres como un unicornio, pero esta bien — Finalmente dejó el juguete sobre la cama y besó la mejilla de Tori — Haremos lo que tu quieras

— ¿De verdad? — Tori se levanto emocionada — ¿Sabes como se utiliza eso?

— ¿Que? ¡No! Tu eres la que ha visto esos videos Tor

— Supongo que con mucho lubricante — Ella tomó aquel juguete entre sus manos y lo miro con curiosidad — O algo así.

— Con lo mucho que me encantas, no creo que utilice lubricante cariño — Ella la beso en los labios tiernamente, haciendo que Tori hiciera el juguete a un lado

— Sabes, creo que estoy lista Jade — Suspiró.

— ¿Lista?

— Pero realmente tienes que ser muy gentil conmigo

— Tor — Ella la miró con mucha confusión — ¿Estas segura?

— Quiero dar este paso contigo — Ella acarició el rostro de Jade, tratando de ocultar su nerviosismo — Tan solo ... se muy gentil