~EL AS DE BASTOS~ (#Ragoney)

~EL DISCURSO~

*Narra Raoul*

Pues aquí seguimos.

Ya es de noche y todavia no he hablado con Agoney. Como para hacerlo, se ha pasado todo el día pegado  a su maridito. Bueno, en realidad Aarón es el que no le deja separarse más de cuatro metros de él, parece un psicópata, ¿tanto miedo tiene de que me lleve al canario?

El caso es que Álvaro y Merce también están en ese plan, pero aunque estén super pegados al menos no están dandose cariñitos, al contrario, están bromeando y picándose cada vez que pueden. Me recuerdan a Ago y  a mí cuando estábamos juntos, y miranos ahora, uno casándose y el otro mirandole como un tonto mientras tontea con su ahora marido. Que rabia por Dios.

Derrepente una mano toca mi hombro, pero no es quien yo esperaba. No es Agoney.

Raoul: ¿¡AITANA!?

Aitana: ¿qué pasa? ¿no pensabas saludarme?

Me levanto de la silla y la achucho entre mis brazos. Hacia años que no la veía, sigue igual de canija y el flequillo sigue en su sitio.

Raoul: ¿ya estás llorando? *digo riendo aunque me empiezan a caer lágrimas*.

Aitana: *riendo y llorando de la emoción* ¿qué le vamos a hacer si somos unos llorones? *me abraza de nuevo*.

Raoul: *rio* te he echado un montón de menos, no sé como he podido vivir estos últimos cuatro años sin tí *me aferro a ella más fuerte*.

Aitana: jajajaj y yo tonto, aunque casi le quitas el novio a mi hermano yo te sigo queriendo.

Raoul: ¡tú eres tonta!

Aitana: que raro que me hayas llamado "tonta" en vez de "gilipollas" o cualquier otra cosa.

Raoul: *secándome las lágrimas* la emoción, la emoción.

Estamos un rato hablando y es ahí cuando me doy cuenta de que la he echado muchísisimo de menos. Es mi renacuaja al igual que Hugo, son como mis hermanitos. Puede que hayan pasado unos cuantos de años pero a la hora de la verdad nada a cambiado, ni siquiera que yo casi le robara el novio a su hermano como ella dice, pero creo que si lo hubiera hecho nada hubiera cambiado aún así.

También se nos unen Ana y Mimi a la conversación, aunque Ana no habla mucho, creo que se siente incómoda conmigo. Me cuentan que Miriam estaba invitada pero que no ha podido venir de Madrid porque tenía un rodaje o no sé que cosa de trabajo, creo que era una función de teatro, sí, eso era.

Llevamos como una hora hablado, hasta Ana se ha soltado, pero tenemos que parar porque Aarón comienza a hablar desde un micrófono intentando captar nuestra atención. Por mi parte no lo consigue, pero Mimi me obliga con una colleja a que dirija mi vista hacia la mesa de los novios, y así hago.

Aarón: pues bueno, yo no he preparado ningún discurso pero me han dicho que dijera algo y si tengo que decir algo voy a empezar por la maravillosa persona  que tengo al lado y que gracias a Dios voy a tener a mi lado toda la vida desde hoy; ¿qué decirte? Pues que eres perfecto y que nunca podría haber encontrado a alguien mejor que tú *se está poniendo moñas, puag, miro a Mimi que me levanta la mano para que me gire y vuelva a prestar atención al discurso del que llevo desconectado como dos minutos* .... y en conclusión que te quiero muchísimo; os queria agradecer a todos en nombre de los dos que estéis aquí aguantandome *y que lo digas, capullo* pero en especial quería agradecerle personalmente a Raoul Vázquez *tierra tragame, todos se giran hacia mí* todo lo que ha hecho porque sé de sobra que es muy dificil ser testigo de la boda de la persona de la que te enamoraste hace ya cuatro meses, de verdad gracias porque yo mismo no podría hacer eso despues de enterarme que la que yo creía que era la persona más especial del mundo no solo tenía novio sino que se va a casar, gracias de corazón, ¿quieres decir algo?

¡¡¿Quién coño se  cree que es para soltarme eso?!! ¿EHH? ¡¿Quién?!

Raoul: claro *digo con una sonrisa maliciosa y los ojos cristalizados mientras me pasan el micro* *le miro* no, gracias a tí por enseñarme que un cabrón puede ser el triple de cabrón cuando quiere *ahora miro a Ago* y a tí, espero que seas feliz, no, espero no, deseo con toda mi alma que seas la persona más  feliz de este mundo porque quizás no te lo merezcas por todo lo que me has hecho, pero nunca podría ver triste a la persona que más quiero y que más he querido; disfrutad, yo aquí ya he terminado.