Batman: The Dark Is Back

En Gotham...

El Joker se regocijaba de felicidad con su plan final. Ya se empezaba a aburrir del caos tranquilo que estaba sucediendo. Al fin y al cabo, los malos también querían algo de paz, de delirio en sus objetos robados. Eso le fastidiaba demasiado. El caos debía ser constante, que arrasara día y noche.

Ahora se encuentra en la habitación medio destrozada. El único mueble que ha sobrevivido a los golpes de furia y se encuentra estable es la cama. En esta, tumbado, intentaba escribir boca arriba, sin soporte para el papel. Le daba igual que no entendiera su letra después, necesitaba escribir todas sus ideas maravillosas para la gran fiesta final. Harley, sin llamar a la puerta ni avisar, entra en la habitación.

-¡AMOR!¿Tienes hambre?

-No - le respondió secamente, molesto de que le desconcentrara.

-¡De acuerdo! - responde ella con un tono lleno de ilusión - ¿Qué quieres hacer?

-Que me dejes en paz.

-Venga... Cuéntame lo que haremos - dice una vez ha saltado a la cama de forma coqueta.

Él la mira de reojo y acepta en un cambio de ánimo repentino. Le explica su plan con detalle, sin dejarse nada. Des del primer al último momento del plan. Todo tenía que estar acorde. Harley se muestra totalmente feliz de verle a él con una gran sonrisa en el rostro cicatrizado.

-¡Aaaii!¡Qué buena idea, amor!

Harley salta a los labios del Joker con fervor, rodeándole con los brazos. Él la corresponde, pero de una manera fiera y rápida. No se quieren despegar del calor que sienten ambos... Hasta que es él quién la empuja abruptamente para hacerle caer al suelo.

-No tengo tiempo para esto.

Harley sorprendida y algo adolorida, se rasca la cabeza donde se ha dado el golpe, mirando al Joker cómo hace un camino hasta el gran ventanal. Éste se ata el botón de la camisa morada que Harley tenía intención de desabrochar.

-En tres días... Esto va a subir de tono. Para siempre.