Narra Elliot...
Berlín, Alemania.- ¡Pero yo no quiero ir a ese internado mamá!- supliqué aferrándome a su ropa.
- Lo siento cariño, en ese internado podrán ayudarte con esas "cualidades" que tienes- resaltó incómoda.
- Pero entiende...
- ¡Ya oíste a tu madre!, te vas a ir al internado y ya, fin de la discusión- dijo mi padre sin quitar la vista del caminó.
Ellos nunca me apoyaron como yo hubiera querido, y ahora me mandan a un estúpido internado, ojalá me hubieran escuchado ese día, no fue mi intención, no pude controlarme.
- Si quieres aprender a dominar y controlar bien tus "cualidades", debes ir- dijo molestó.
- Yo solo quiero a Abel de vuelta, no fue mi...
- ¡Que te he dicho de hablar de Abel! ¡Eso afecta mucho a tu madre!- gritó mi padre girando de su asiento para verme.
El volante empezó a girar solo, el automóvil se salió de curso y por una larga y fría ladera, rodamos dentro del auto. Un enorme tronco atravesó al auto y caímos a un lago congelado: el hielo al instante se rompió. El agua inundaba el interior del auto, mis padres solo inflaban las mejillas mientras intentaban romper lo que quedaba del parabrisas para salir.
Sentí tanta presión, no pude controlarme: una ráfaga eléctrica salió de mis manos, y los vidrios se rompieron, la corriente creada por los rayos me sacó del auto, empecé a flotar hacia la superficie. Mientras subía miraba como el auto se perdía en la oscuridad, y en ella, mis padres... Unas manos me tomaron de los brazos y me sacaron del agua.- ¿Tu eres Elliot Hamilton?- una voz masculina se escuchó.
Apenas y podía verlo: era un hombre joven, como de veinte años, no lo miraba bien, mi vista era borrosa, y apenas podía respirar.
- ¿¡Eres Elliot Hamilton!?- insistió.
- Si soy yo- respondí aturdido.
- Tienes que venir conmigo, soy del internado Winchester, soy Louis Bray- dijo amable.
- Yo no quiero ir contigo, ahora estoy solo, ya no tengo a nadie, mis padres y mi hermano murieron- dije melancólico.
- Lo siento pero son ordenes de la dueña- dijo levantándose.
Louis se alejó, y sacó un radio, empezó a hablar, y después de unos segundos regresó.
- Ya vienen por nosotros- dijo sonriendo.
- ¿¡Quienes vienen!?- pregunté molesto.
A lo lejos del bosque, el sonido de un helicóptero se escuchó en lo alto, poco a poco se empezó a acercar; me levanté del hielo y comencé a correr, me resbalé varias veces pero no importaba solo quería huir de ellos.
- No huyas Elliot, de todos modos te vamos a atrapar- una voz decía desde el helicóptero.
Casi salía del lago, cuando de repente una punzada me sorprendió, miré mi hombro y un dardo tranquilizador estaba insertado en él. Mi vista se nubló y los sonidos eran lejanos, me tire al piso, solo alcancé a ver como una red caía sobre mí , para después perder el conocimiento...
°.°.°.°.°
Alguna parte de EU, Internado Winchester.
Desperté en una recámara oscura y fría, todo era gris, entre las paredes se escuchaban gritos desgarradores de niños.
- ¿Que no saludas?- una voz algo ronca me interrumpió.
- ¿¡Quién eres!?- pregunté confundido.
- Soy Axel Salazar... ¿Y tú eres?- dijo algo cómico.
- Soy Elliot Hamilton, mucho gusto- estreché su mano.
- ¿Y de dónde eres?- pregunté para hacer la plática.
- Soy de México, el gobierno se entero de mi peculiaridad y contactaron con este internado, y una semana después, BOM! Atrapado aquí,¿Y tú de dónde eres?- dijo sonriendo a pesar del sufrimiento que pasaba.
- Soy de Inglaterra, y hace poco me mudé a Alemania, pero... Estoy sólo: perdí a toda mi familia, mis padres murieron en un lago hace unas horas y... Mi hermano- dije con los ojos húmedos.
- Lo siento mucho Elliot, se por lo que has pasado: hace poco me dijeron que mi padre había muerto, pero no te sientas mal, nos tenemos el uno al otro para apoyarnos- Axel dio unas suaves palmadas en mi espalda.
- Gracias- limpié mis lágrimas- ¿Y quién más está aquí?
- No se exactamente, solo e visto a una chica japonesa, su nombre es Sakura y fue la primera persona que me habló cuando llegué- dijo entre risas.
- Bien Axel- dije con una risilla.
Unos megáfonos emitieron un sonido y nos indicaban que el almuerzo estaba listo, la puerta se deslizó por si sola y salimos, recorrimos un extenso pasillo tenebroso.
- ¿Qué no te da miedo caminar por aquí?- dije mirando a todos lados.
- No, ya me acostumbre- dijo de forma ignorante.
Llegamos al comedor: era muy parecido el comedor de una escuela, con mesas y bancas para que te sentarás. Tomamos nuestra charola y nos formamos para que nos sirvieran el almuerzo. Después de unos minutos formados fue nuestro turno, nos sirvieron y nos fuimos a una mesa.
- Mira ahí esta la chica de la que te estaba hablando, vamos con ella- señaló Axel.
Nos dirigimos con la chica, no era como las típicas chicas japonesas o coreanas, que son más maquillaje que cara, ella en realidad era bonita, sus ojos rasgados eran oscuros y grandes (a comparación de los demás japoneses) y su piel era pálida.
- ¡Hola Sakura!- exclamó Axel entusiasmo.
- ¿Qué quieres ahora?- dijo rodando los ojos y dejando su sándwich en su charola.
- Quiero presentarte a mi nuevo amigo, es Elliot Hamilton- me presento rodeando mis hombros con su brazo.
- Oh, eres el nuevo, la Sra. Stella nos dijo de ti en la reunión de la mañana- dijo Sakura mordiendo su sándwich.
Nos sentamos a comer lo tres juntos, de inmediato sentí que estaba con unos nuevos y peculiares amigos, era satisfactorio saber que no todo en este estúpido internado era oscuro y soledad, por lo menos ya tenía compañía.
°.°.°.°.°.°.°.°.°.°.°
Holaa
Que les pareció el primer capítulo? Intentaré publicar más seguido esta historia, pero a veces las tareas no me dejan, los maestros se pasan de... Riata >:c
Bueno, esperó recibir su apoyo como en las otras historias.
No olviden dejar su voto y su comentario...
Atte: Leo.
ESTÁS LEYENDO
Le Strange
RandomTodos somos especiales... Ya sea por nuestros habilidades mentales o por nuestro atletismo... Pero no para Elliot y sus amigos. Para ellos ser especial es... Controlar la electricidad o la mente. ¿Como pudieron? ¿Con que ayuda? ¿Quien lo hizo? Y...