Le Strange

22. Papá

Venecia, Italia.
2 días después...

Narra Jessica...

Pasaron dos días después de lo ocurrido en el Vaticano, estábamos hospedados en un departamento, que al parecer era del comandante.

Estaba en la cocina sirviendo un vaso de agua, apenas era la una de la tarde. Caminé por el pasillo y cuando iba hacía las escaleras, Leonard corrió a toda velocidad hasta llegar abajo.

- ¿Y tu a dónde vas?- dije con mi mano en su pecho y lo empuje levemente.

- Con Mateo, viene por mí, está abajo, me está espegando- dijo mi hermano y se puso su chaqueta de mezclilla.

- Está bien, cuídate. No llegues tagde- dije y me despedí de él con un beso en la mejilla.

Desdé que me lo presentó, nunca le tuve buen espina. Aparte por que estuvo del lado de Génesis, por eso no me agrada; lo pensé un poco y corrí lo más rápido que pude a mi habitación, bueno a la habitación de las chicas: Amber, Sakura y Yo

Tomé lo primero que encontré: un pantalón de mezclilla negra, una blusa blanca sin mangas, una chamarra de cuero negro y unos tenis converse negros con blanco. Me vestí muy rápido y tomé el celular antes de salir del departamento.

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Salí como loca. Busqué con la mirada por todas partes, en eso, vi a Leonard junto a Mateo que lo iba abrazando de la cintura; y en ese momento me di cuenta que Mateo era mucho más alto que mi hermano... Siempre consideré que Leonard era alto, 1.82, pero Mateo, 1.90, más o menos calculé... Pero eso no es el punto.

Los continué siguiéndolos, saqué el celular de mi mi bolsillo del pantalón y llamé a Leah mientras caminaba muy rápido.

- Si Jessica, ¿Qué pasa?- dijo la voz de Leah desdé el otro lado del celular.

- Estoy siguiendo a Leonard y a Mateo, ¿Tu dónde estás no te vi en la mañana?- dije y no paraba de caminar.

- Déjalos, quieren privacidad. Estoy con el comandante en un restaurante- dijo Leah con un tono risueño.

Comencé a reir y escuché un pequeño bufido.

- No estoy saliendo con el comandante de ese modo... Stephen es lindo pero... ¡Pero eso no es el punto! No los sigas- dijo un poco molesta.

- Sabes que Mateo no me da buena espina, y esto tampoco. Pgesiento algo Leah; si gequiego ayuda manda al FBI pog favog- dije y me escondí detrás de un local cuando voltearon.

- Está bien, te hablaré constantemente, con cuidado Jessica- dijo Leah de manera seria.

Pasé unos minutos siguiéndolos hasta que entraron a un departamento. Por la ventana frontal vi a Génesis, entonces sentí una sensación de preocupación extrema; corrí hacía la parte trasera del departamento, donde estaba otra ventana.

- Muy bien- dije con valor.

Cambié de forma a la de una serpiente y me deslize sobre los muros del edificio. Cuando llegue hasta el departamento, cambié a mi forma normal y entre abrí la ventana, saqué mi celular y llamé a Leah. A los pocos segundos contestó la llamada.

- ¿Qué pasa?, ¿Todo bien?- dijo Leah muy preocupada.

- Sólo escucha- susurre y no hubo respuesta pero sabía que Leah seguía ahí.

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Narra Génesis...

Estábamos sentadoa viendo un programa de televisión cuando de repente llegó Mateo junto con Leonard.