Aroma. (Brutasha)

1

—Una pequeña reunión se convierte en una gran fiesta he. ¿Quién lo diría? Demasiado raro en Stark.

La voz del hombre sorprendió a Natasha quién se encontraba sentada en uno de los sofás. Giro la cara para confirmar que se trataba de Thor, ese aroma tan característico de él, aunque en ocasiones se confundía con el casi apestoso aroma de Steve.

—No esperaba menos de ese omega, creo que si hubiera hecho algo más íntimo estaría brutalmente decepcionada.

El alfa sonrió ante la broma de su amiga pelirroja mientras se sentaba a un lado de ella.

—Me he enterado del nuevo científico que traerán. ¿Sabes algo sobre eso?

—No mucho, Fury me comentó que esta fiesta era por su llegada, al parecer es un gran amigo de Tony.

—Steve dijo que es un omega, deberíamos preocuparnos un poco.

Natasha lo miro con algo de intriga.

—¿Es en serio? Thor rompió el contacto visual. Es un científico que vendrá a ayudarnos a mejorar todo, al parecer el tipo se la vive en un laboratorio y lo único importante que tienen sobre él es que es un omega. Negó con la cabeza.  No sabía que aún estaban en la pubertad.

Natasha le regaló una sonrisa burlona antes de caminar hacia su habitación. La espera la estaba matando, tantos olores en un solo lugar le parecía un delito. El aroma de Stark debería considerarse un verdadero delito. ¿Con qué valor ese hombre se atrevía a contaminar el ambiente de esa forma?

Abrió los ojos perezosa al sentir el aroma de Tony en su habitación.

—El invitado llegó. Creo que es hora de ir a conocerlo.

La alegría de Stark la hizo sonreír, asintió con la cabeza mientras miraba al multimillonario regresar por el largo pasillo.

Maldijo por dentro al tener que caminar por dónde señor olor había caminado. Sonrió maliciosamente al sentir el aroma de Steve en el aire. ¿Cuánto tardarían en darse cuenta que terminaran enlazados? Vaya par, definitivamente el amor es para tontos.

Tapo su nariz con la manga de su suéter agilizando el paso, en cualquier momento ese olor a algodón de azúcar la haría vomitar. O quizá solo estaba exagerando.

Se acercó al resto del equipo y antes de que pudiera hablar Wanda ya había contestado.

—Fue con Stark a la cocina, ahora regresan.

Natasha miro a la beta pero está la ignoró con una gran sonrisa en la cara.

¿Alguien por favor, podría explicarle a la espía por qué todos los omegas tenían que tener aromas tan dulces?

Y es que ¿Cómo se atreven?

Stark con su olor a algodón mega super dulce generaba dolores de cabeza.
Loki lima-limon andaba por la vida como si todos quisiéramos oler eso.
Peter oliendo a cerezas era lo último que necesitaba en ese momento.

Podía verse en cualquier situacion pero tan solo pensar en despertar con algún aroma dulce en sus fosas nasales le provocaba querer arrancarse la cabeza.

No entendía como Thor vivía con el aroma de Loki en la ropa. ¡Detestable!

Una voz suave y desconocida la saco de sus pensamientos, giro bruscamente para encontrarse con un delgado hombre.
Miro detenidamente cada parte de su cuerpo. ¿Acaso mandaban ángeles a la tierra? ¿En qué momento se habían ganado ese derecho?
Las gafas le daban un toque especial pero esa camisa lila parecía estar hecha a la medida.

Un aroma llegó a su nariz, tan suave que parecía pedir permiso.

Respiró hondo para encontrarse con una combinación de café y tabaco. Para sorpresa de todos era un aroma digno de recordar pero para Natasha era la respuesta a todos y cada uno de sus problemas.