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-Sabes que no me molesta ni nunca me molestó que vengas a pasar unos días a mi casa, con Mot, de hecho es más divertido, pero por favor la próxima aparece un poco más... no sé,¿presentable? ¿Con rico olor? Siempre hueles bien, eres de esas personas que siempre huelen a frutas, nada que ver con tu estilo grunge y raro... pero en fin, ¿Que pasó con tu aroma a frutas?

-Ya te dije que me metí a un basurero, vi el coche de mi tío mientras caminaba, fue lo más cercano-Me dejé caer en su sofá, mientras él tenía dos aromatizantes en sus manos-No seas exagerado, estuve un segundo y salí, no es tan fuerte.

-¿Lo más cercano fue un contenedor de basura? Eres asquerosa-Soltó una risita-Tal vez ahora tienes un virus.

Le lanzé una almohada de su sofá.

-Ve a darte una ducha, ya sabes donde es el baño, todo está ahí, tu perfume está en donde guardo los míos.

Si, tenia un perfume y desodorante aquí, al salir tenia olor a marihuana y humo o a alcohol, asi que eso disimulaba un poco, digamos que era como mi segunda cosa, tenia cepillo de dientes incluso.

Esta vez sin renegar fui al baño, tomé mi mochila para sacar ropa y una toalla de Paul.

-¡Oye!-Escuché su voz del otro lado de la puerta mientras me bañaba-¡Cuentame que pasó en tu casa!

-Ya te lo conté-Seguí lavando mi cabello ahora-¿Sabes? Primero iba a  ir a un hotel y no molestarte pero pensé y bueno, decidí venir aquí, salí del sanatorio, después de visitar a Leo. Nadie puede encontrarme, nadie de mi familia sabe que eres real. Piensan que eres una alucinación mía cuando hablaba de ti.

-Ese chico, Luke. Él si me vió, cuándo fui a visitarte la semana pasada. Me miró raro, no me gustó como me miró, parecía enojado conmigo,asi que, por eso lo odio.

-Luke ni sabe tu nombre si no mal recuerdo, no sabe ni dónde vives, nunca le hablé de ti además. Y no puedes odiarlo, ni lo conoces. Es tan lindo y dulce-Sonreí levemente.

-Fuiste realmente impulsiva llamarlo en ese estado y decirle eso sin siquiera meditarlo, eso si me molestó. Vas a lastimarte.

-Como si fuera que no estoy lastimada-Bufé.

-Hablaremos más tarde de eso, dándole vuelta al asunto, me han llamado del banco, dicen que mi cuenta bancaria está... casi vacía.

-Se te termina el dinero-Concluí-Paul, te dije que debías ahorrar, o al menos conseguir un trabajo para ganar más, no vas a vivir toda la vida del dinero que de dejaron tus padres. Lo gastas rápido, y no solo en drogas y cigarrillos, a veces en cosas inútiles.

-Bueno, lo sé. No creí que se me iba a terminar tan rápido, podría decir que estoy en quiebra, asi que voy a tener que...-Hizo una dramática pausa-Trabajar.

-Hace años tuviste que hacerlo.

-Ay, callate, tu nunca trabajaste-Chasqueó la lengua sonoramente-De todas formas, podríamos entrar en el negocio de venta de droga, la banda narcotraficante de Riff no es tan mala como otros narcos.

-No lo sé, ganarás bien pero serás muy odiado, puede que te maten.

-Me cagas todas las opciones, tengo un gato que mantener y muchas cosas girantes que comprar.

-¿Estás... colado?-Alcé el tono de voz, oí su carcajada-¿Tomaste anfetas?

-No...-Se quedó callado unos segundos-Bueno, si, ¡pero solo un poco!

Dejamos de hablar para que yo pudiera bañarme tranquila, cuándo terminé, me sequé con la toalla y me cambié.
Me puse ropa cómoda, unos pantalones de chándal negros y una camiseta holgada.

-¿No crees que siempre los preocupas? Digo, yendote de tu casa-Habló mientras fumaba un cigarrillo normal tirado en el sofá.

Corrí sus piernas para sentarme, él volvió a apoyarlas sobre mi regazo cómodamente, saqué ese habito de él. Observé que lo terminaba y lo dejaba sobre el cenicero para luego sacar otro de la cajetilla y prenderlo.

-¿Me das uno?-Le pedí señalando los cigarros, él estiró uno hacia mí junto con el encendedor. No tarde en encenderlo y llevarlo a mi boca.

-Está bueno, no había probado esta marca, ¿es orgánico?-Él asintió-Ah, eres tan mala influencia-Bromeé

-Lo sé, lo soy desde pequeño. Mis compañeros me odiaban, yo a ellos, asi que conseguí nuevos y peores amigos afuera de la escuela, así comenzó todo-Rió levemente-Deben estar buscándote.

-Deja de hablar de eso-Despeiné levemente mi cabello y bufé-Hablemos de... de otra cosa.

-Como quieras-Se encogió de hombros-Me quiero hacer otro tatuaje-Murmuró con los ojos rojos y llorosos-Ya sabes, me queda un espacio en los brazos.

-Estás en quiebra.

-Puedo hacer que me den un descuento-Sonrió encantadoramente-Hace años me tatuo en el mismo lugar y con el mismos chico. Quentin es genial, el mejor tatuador.

-Que rata que sos-Mordí mi labio y negué con la cabeza-Espera unos meses y hazlo-Palmeé sus piernas como si tocase la batería-Pero espera.

Él bufó rodando los ojos

-Bueno, asi que, ¿a dónde dices que puedo trabajar?

-Yo no te voy a conseguir trabajo, no pienses usarme-Advertí alzando mis notables cejas. Saqué mi celular y lo prendí, al prenderse me llegaron miles de mensajes, hubiese apagado datos móviles.

Eran de mis amigos, de mis hermanos, de mi tío, Liz y mis otros tíos y familiares, que vivían cerca pero casi ni me hablo con ellos.

-Ah, tengo ganas de contestarles-Tiré la cabeza hacia atrás viendo los mensajes.

-Pues hazlo.

-Creí me ibas a detener-Me senté derecha.

-No, si tu quieres mantenerlos al tanto está bien-Siguió fumando con tranquilidad, solté una bocanada de aire, y tecleé en mi celular unas cuantas palabras-¿Solo eso? ¿Estoy bien? ¿Es en serio?

-¿Qué? ¿Quieres que vengan mientras tal vez nos estemos drogando,me manden a rehabilitación y a ti a la cárcel o algo y ya?-Exageré ladeando la cabeza-Se lo envié a Brooke,por que su nombre empieza con B y es lo primero que me apareció.

Él soltó una risita palmeando mi hombro.

-Bueno, ¿vamos a cocinar? Me estoy muriendo de hambre-Sacó sus piernas de mi regazo y se levantó-Quiero comer papas fritas y... carne.

-No sé cocinar muy bien-Caminé tras él a la cocina.

-Si, eso lo sé. Asi que vas a pelar las papas y cortarlas, no es tan difícil, yo voy haciendo lo demás.

Me pasó un cuchillo, observé las papas ya lavadas pero no peladas sobre la mesa y comencé, no era tan difícil, algunas veces en casa no me dejan cocinar por que tal vez me lastime yo misma o a alguien más,  pero me dejan hacer cosas simples como waffles y eso, algunas veces incluso me escondieron los tenedores y cuchillos. Ahora ya no.

El otro día fue bastante tranquilo, quiero decir, preparamos el desayunos y al final terminamos drogandonos más tarde, asi que no sé cómo, pero terminamos en el bar favorito de Paul dónde suelen tocar bandas grunge.

Huele a hierba y cigarrillo, para personas normales era un bar horrible que parece el infierno, parecía ser el típico bar de los 70 dónde van drogadictos y punks a emborracharse. Me recuerda a ese bar dónde hacen una escena de la película Sid y Nancy.

Estaba algo oscuro, no habían demasiadas luces, o eran tenues y una banda estaba tocando canciones.

Paul me esperaba en la mesa dónde estábamos, yo acababa de salir del baño en dónde me metí cocaína por segunda vez en el día para que el efecto se mantenga en mi organismo y, a pesar de lo oscuro que estaba el lugar pude visualizar a lo lejos esos magníficos y brillantes ojos azules.

¿Qué mierda hacia Luke aquí?

Natural Disaster | HemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora