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Puede que no haya sido buena idea que Luke tome el volante en el estado en el que está, pero hizo un berrinche de niño pequeño para que pueda conducir y la chica tuvo que darle la razón.

Danielle juraba que estaba a punto de vomitar de lo mal que conducía estando ebrio.

No sabian a donde iban, solo tomaron el auto y él comenzó a conducir mientras carcajeaban y se besaban, parecían dos malditos locos, y los cuarenta y cinco minutos conduciendo ningún policía nos frenó, lo cual es extraño, pero mejor, iban por las partes menos transitadas.

Ahora se reproducía algunas canciones de Fletwood Mac y ellos cantaban gritando y  riendo de ellos mismos.

Pararon en la playa, sin parar la música se recostaron en unas rocas, mirando el mar y las olas violentamente chocar.

-Jamás vine a este lugar de noche.

-No puedo creer que nunca viniste a la playa de noche, no has vivido...-Negó ella en una risa-Se va a largar una tormenta pero de todas formas...

-Bueno,no conozco cada lugar de Sydney, es bastante grande... pero es precioso.

Siguieron hablando y hablando, comprando botellas de alcohol,sobre todo para Luke, aunque la chica bebió un poco y de alguna u otra forma terminaron en una de esas pequeñas cabañas que servían de hotel.

Los labios de la castaña se paseaban por el cuello del chico, que se aferraba fuertemente de las caderas desnudas de el demonio que tenía encima.
Un jadeo salió de sus labios en cuanto la sintió succionar en su clavícula, volvió a sus labios con una sonrisa, él olía a alcohol, pero realmente no le importaba ahora.

Ambos ya se encontraban completamente desnudos pero no habían comenzado a hacer nada,solo se acariciaban y besaban,la luz de la habitación era muy pobre, pues la cabaña en la que se encontraban no era precisamente de una buena calidad, aunque a Luke le fascinaba aquello, la poca luz hacia ver el cuerpo de la chica un poco más bronceado y brillante, además de que era el mismísimo cielo, cualquier lugar era el cielo con Danielle. Aunque también podría conventirse en un infierno.

Luke la volteó, quedando encima de ella, le separo las piernas y se acomodó entre ellas, jadeando, casi quedándose sin respiración, tomó su miembro entre sus manos y rozó unas cuantas veces con la entrada de la chica y sin previo aviso se introdujo en ella, la rodeó un poco con sus brazos, comenzando a moverse muy rápido, gimiendo y besandola de vez en cuándo.

La cama comenzó a moverse, chocando con la pared, Danielle gimió notando que Luke se movía demasiado rápido, más de lo que ella creía, asi que le dijo:

-No tan rápido, me das miedo-Murmuró, el chico tardó unos segundos en frenar, se le quedó mirando a Danielle al rostro y estallaron en ruidosas carcajadas.

-¡Eso fue tan...-Siguió carcajeando.

Se dejó caer encima de el delgado cuerpo de Danielle, aunque sosteniendose un poco con sus codos, sin dejar de reír, limpió unas cuantas lágrimas que le salían de los ojos pero no paró.
Siguieron riendo sin parar un rato más, les dolía el estómago y la garganta de tanto reír y soltaban pequeñas lagrimas.

-Cagué el momento,¿verdad?-Susurró ella, dejando de reír de a poco.

-Definitivamente, aunque no sé si eso sea gracioso, pero bueno... nos causó risa...-La beso en las mejillas, riendo de vez en cuándo-Te juro que... este es el mejor cumpleaños que pude haber tenido. Es inolvidable.

Natural Disaster | HemmingsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora