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Capítulo 21 "Ahora estoy aquí contigo."

La puerta de su habitación se abrió de una patada. Todavía no sé en qué momento fue que acepté ir con él, el caso es que allí estaba yo, en su casa, mientras él me llevaba en brazos por las escaleras. Era la primera vez desde que le conocí que estaba siendo tierno conmigo.

Me tiró suavemente sobre la cama después de cerrar de nuevo la puerta y se puso sobre mí.

Levantó un poco mi camiseta y acarició mi piel haciendo que se me pusiera la piel de gallina. Dejó de moverse de repente y su mirada fijaba una parte de mi piel, justamente lo que no quería que viera.

-¿Quién te hizo esto?- Puse mi mano sobre mis ojos intentando no dejar que las lágrimas salieran, me costaba respirar porque él seguía a mi lado. No quería que él viera eso, no debía, sabía que iba a volverse loco.

Fue hace mucho, en la noche en la que Derek me intentó violar, pero Liam no debía saber eso porque no me quiero ni imaginar cómo reaccionaría esta vez. La anterior no mató a Derek de milagro pero no creo que la segunda vez tenga la misma suerte.

-¿Allyson? Contesta. ¿Quién te hizo esto?- Me levanté un poco, quedando sentada y lo miré a la cara observando como sus nervios desaparecían y tiré de él para acercarlo a mí y metí mi cabeza en el hueco de su cuello.

- Por favor, Liam, no importa. Ya pasó.- Tensó su brazo alrededor de mi cuerpo pero se relajó enseguida cuando yo lo volví a tirar sobre mí. Puso sus manos a cada lado de mi cuerpo intensificando el beso. Sentía su calor a través de la camiseta y rodeé su cintura con mis piernas. Rió ligeramente mordiendo mi labio. Sus dedos bajaron rápidamente al cierre de mis pantalones abriéndolo enseguida. Tiró con fuerza de ellos y se levantó poniéndose encima de mis piernas para poder quitármelos del todo. Abrió mis piernas haciéndose espacio y me asusté. Mucho.

-Liam, por favor, no lo hagas.- Pedí dejando escapar una lágrima. No estaba preparada para eso y estaba segura de no querer que él lo haga.

Él me miró y enseguida se dio cuenta de lo que estaba pasando. Ne dio otro beso en la frente y acarició mi mejilla. Me miró un poco asustado pero enseguida sonrió en señal de que todo estaría bien.

- No tienes por qué tenerme miedo. No haré nada con lo que tú no estés de acuerdo.- Le miré directamente a los ojos y en ese momento sentía que todo estaría bien. -Yo no soy él.-

Sonrió mirándome con compasión y acarició mi mejilla antes de quitarse de encima y tenderme la mano en la que sujetaba su camiseta. Entendí segundos después que era lo que quería así que cogí la camiseta y me la puse.

- Liam...- Susurré meditando si debería o no hacerle la pregunta que tanto había estado dando vueltas por mi cabeza durante varios días. Una vibración sobre la mesa me llamó la atención sólo para darme cuenta segundos después de que era mi móvil el que hacía ruido.

-No contestes.- Pidió cogiéndome de la mano para impedirme coger el móvil mientras dejaba besos por mi mandíbula.

-Tengo que contestar, es mi madre.- A regañadientes me soltó la mano y yo me levanté de la cama. Miré a Liam asustada antes de contestar.  -¿Sí?-

-¿Ally? ¿Cariño, que haces que no estás en casa?- Su voz sonaba preocupada probablemente por no saber nada de mí en todo el día.

- Lo siento ma, he salido con... Diana y se me olvidó llamarte.- Mentí agradecida de que mi madre no pudiera verme. Liam me miraba sonriente con los brazos cruzados y negando con la cabeza.

-Pues la próxima vez que se te ocurra salir de casa, por lo menos avisa a alguien. Estábamos preocupados por ti.-

-Lo siento, iba a llamar pero se me pasó.-