•Capitulo veintidos•

563 24 4
                                    

Carlos
Julia y yo nos encontramos donde siempre, en la azotea, la única diferencia es que ahora estamos tapados con mantas porque ya casi ha llegado el invierno.
Queda menos de tres semanas para Navidad, por lo que todos tenemos que empezar a prepararnos para los exámenes, a pesar de que estudiamos diferentes carreras los dos venimos aquí casi todas las tardes, a penas estamos juntos pero nos hacemos compañía, y eso es genial.
—Estoy harta de estudiar... —dice Julia apoyando su cabeza en mi hombro —¿podemos hacer un descanso?
—Justo estaba pensando en eso —respondo soltando el libro que estaba leyendo.
Julia suelta una pequeña carcajada a lo que yo respondo con un beso en la frente.
—Quería hablar contigo sobre algo... — comienza Julia poniéndose seria —no queda nada para las vacaciones de Navidad.
—Lo se —respondo recordando el hecho de que tenemos que volver a casa.
—No me hace ninguna gracia que tengas que ir con tu padre.
— Llevo diecinueve años con el, no me pasará nada, además, el lado positivo es que voy a poder hablar en persona y convencerlo de que pague de una vez.
—¿Y si se enfada y te hace algo?
Por el tono en el que habla puedo notar que está realmente preocupada, por lo que cojo una de sus manos y se la acaricio, quiero que vea que no va a pasar nada.
—Se controlar a mi padre, te lo aseguro.
Julia asiente, espero haberla convencido.
—Otra cosa más...—dice cambiando el tono de su voz— ¿me echarás de menos estas dos semanas?
—Creo que no mucho, eres bastante pesada —respondo bromeando.
Recibo un golpe en el hombro por parte de Julia y no puedo evitar soltar una carcajada.
—Con que soy pesada... te recuerdo que si no fuese por mi el examen no te hubiese salido bien.
—Y yo te recuerdo que si no fuese por mi te habría atropellado una bicicleta.
Julia sonríe, la he pillado y no sabe que responder.
Justo entonces me suena el móvil indicándome que tengo una notificación, lo saco de mi bolsillo y miro la pantalla para ver que es, me encuentro con un correo escrito en inglés, esto solo puede ser una cosa.
—¿Que te pasa? —pregunta Julia al ver que me ha cambiado la cara.
—Creo que me acaban de enviar el resultado del examen —respondo en un susurro.
—¿Pues a que esperas?
Me quedo mirando la pantalla durante unos segundos, tengo miedo de lo que pueda haber... de repente empiezo a recordar como me salió el examen, salí contento pero hubo algunas cosas que creo que no hice bien.
Julia me quita el móvil de las manos y se coloca en frente mía, la verdad es que prefiero que las vea ella antes.
Ninguno de los dos habla durante casi un minuto, de repente veo como Julia se pone muy seria y se me cae el alma a los pies.
—¿Que pasa? —pregunto asustado.
—No se que decir... —comienza Julia — ¡soy tan buena profesora que he conseguido que apruebes! —termina de decir cambiando su expresión por una sonrisa.
Suspiro aliviado, me había asustado bastante.
—Te voy a matar —digo cuando ya estoy más tranquilo —¿eres consciente del susto que me has pegado?
—Lo siento —responde ella acercándose a mi para darme un corto beso en los labios —te quiero.
Y así confirmo por enésima vez que me es imposible enfadarme con Julia.
—Bueno, pues supongo que esto habrá que celebrarlo... ¿pedimos una pizza?

No confío en ti ||Julright||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora