•Capítulo 84• Alta Gama

458 32 10
                                    

Narra (T/N):

Desperté bien entrada la mañana. Era sábado, festivo, por lo que no había problema. Sentía unos brazos alrededor de mi cuerpo de forma protectora, por lo que alcé la mirada para distinguir a Shoto abrazándome mientras dormía. Sonreí y comencé a acariciar su cabello. Me separé como pude y me senté con cuidado a horcajadas sobre él. Tampoco es como que fuera a notarme, tenía el sueño muy profundo. Acaricié su cabello con cariño, a veces su mejilla. Hasta que comencé a delinear como tantas otras veces su quemadura. Poco a poco ascendía cada vez más hasta comenzar a retirar cabellos rojos de su frente. Miré un segundo su rostro y al determinar que continuaba dormido, aparté con mi mano las hebras bicolores de su frente, hasta que sentí una fría mano tomarme de la muñeca con fuerza. Los orbes heterocromáticos me miraban serios, mientras me percataba de que sí estaba despierto.

- Te he dicho muchas veces que no lo hagas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Te he dicho muchas veces que no lo hagas. No me gusta mi quemadura, ¿por qué te empeñas en acariciarla?- preguntó con un leve tono de molestia. Aparté la mirada avergonzada.

- Es que... a mí sí me gusta... para mí, aunque no lo creas...- respondí. Le miré una milésima de segundo antes de continuar con un gran sonrojo.- ...m-me pareces más atractivo con ella...- susurré, sin saber como lo tomaría. Tiró de mi muñeca y esa mano pasó rápidamente a mi nuca, atrayéndome a él para besarme con necesidad. Me apoyé con una mano en su pecho y la otra en la almohada, mientras continuaba el beso siguiendo el ritmo que demandaba. Su otra mano pasó a mi cintura, mientras su lengua comenzaba a jugar con la mía. Comencé a sentir la falta de oxígeno y nos separamos unos centímetros, con un hilo de saliva uniendo nuestros labios.

- ...¿de verdad te gusta?- cuestionó, acariciando mi mejilla.

- Sí, al fin y al cabo, sin ella no serías tú y... bueno... ya dije que te hace más lindo...- respondí.

- No usaste esa palabra, preciosa.- susurró antes de volver a unir nuestros labios en un ferviente beso. Mordió mi labio inferior, provocando un ligero gemido de mi parte, que cortó el beso.- Eres simplemente deliciosa.- confesó, mirando mis labios con deseo. Me ruboricé ligeramente y aparté la mirada.

- Deberíamos bajar a desayunar y tal...- murmuré. Él aceptó con una pequeña sonrisa y nos levantamos. No di ni dos pasos cuando sentí como me abrazaba por la espalda.

- ¿Estás bien?- preguntó preocupado. Tragué en seco, recordando lo pasado la noche anterior.

- A medias... y-yo... tengo algo que deciros.- anuncié, antes de que me soltara y bajásemos al salón. Tomé a Shiro, Denki y Shoto y los traje al pasillo. - Fue Dabi quien me salvó. Lo recordé ayer.- dije, antes de que preguntaran nada.

- ¿Ves? Te dije que no debías dar nada por hecho.- dijo Shiro, antes de abrazarme. Correspondí inmediatamente, era raro que fuera ella quien me abrazara.

-Promesa- (Todoroki x Lectora) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora