La Lista de Muerte (2° parte de El Campamento)

Capítulo 12: El Segundo Hogar

Alex

Cuando Natalie me dijo que continuaría con la búsqueda fue como al fin respirar. El único problema era la presión de mi padre para que volviera a casa.

Me tiré sobre la cama y cerré los ojos. Mi teléfono comenzó a vibrar en el bolsillo de mi pantalón. Era mi papá otra vez. Tenía suficiente en mente como para lidiar con él ahora. Sin embargo, había estado ignorándolo todos estos días y ya era hora de que le atendiera el teléfono o las cosas podrían ponerse peor.

—Hola—dije sin ganas.

—¡Por Dios, Alexandra! ¿Estás bien? Me enteré de lo que sucedió—dijo en voz alta y enojado, claramente.

—Perfectamente—respondí—Y si llamas para decirme que vuelva, olvídalo.

Me dolía responderle así, pero ahora mismo tenía el peor de los humores.

—No, Alexandra—dijo cortante—Estoy cansado de esa relación, te está llevando por el mal camino. Incluso ahora me contestas mal—sonaba decepcionado—Tuviste mucha suerte de no estar con él cuando se lo llevaron, ese chico te puso en peligro. Ahora te quedarás encerrada en el departamento de tu abuelo, me dijo que era totalmente seguro. Y apenas lo rescaten terminarás la relación y volverás a casa.

—¡Jackson no tiene la culpa de todo esto!—repliqué enojada.

—¡Estas cegada!—exclamó enojado—Esa relación es tóxica y desde un principio te dije que no me gustaba nada ese chico. Así que harás lo que te diga—gritó lo último.

Colgué el teléfono furiosa y me largué a llorar de la impotencia que tenía. Eran lágrimas cargadas de ira y desesperación.

Ya estaba harta de que todo el mundo me dijera que me alejara de Jackson, de que me hablaran mal de Jackson, de que me recordaran cosas que pasaron hace años, cuando él era una persona distinta. Pero eran todas cosas de un Jackson al que yo no conocí. Yo conocí a un Jackson humilde, inteligente y sincero, que me enseñó lo que es amar de verdad y me enseñó a tomar té, una persona que vio en mí lo que nadie más había visto y de la cual aprendo todos los días. Sin embargo, lo único que ha hecho la gente hasta ahora es tirar piedras a nuestra relación. Jackson estaba lejos de ser perfecto; pero me hacía feliz y de alguna forma, eso era todo para mí.

Luego me llamó mi mamá, de seguro mi papá ya la debe haber llamado para contarle de nuestras peleas.

—Tu padre sólo está preocupado por ti—dijo ella.

—Él cree que a Jackson se lo llevaron porque hizo algo malo—repliqué—Tienes que entender lo que está sucediendo, están asesinando espías.

—Lo encontrarán vivo—dijo a modo de consuelo.

—Por favor, intenta convencer a papá de que no puedo volver ahora...—la puerta del departamento se abrió repentinamente y me encontré con Noah, Becca, Lucas y Bill mirándome ceñudos—Tengo que colgar.

Los cuatro entraron y me rodearon.

—¿A dónde volverás?—preguntó Bill tratando de sonar indiferente.

—¿Qué no es obvio?—Becca se colocó las manos sobre las caderas y me miró con su mirada de arpía—Ya pensaba en irse y dejarnos.

—¡Becca!—saltó Noah enojado y luego dirigió su mirada hacia mí—¿Tus padres quieren que vuelvas?

—Sí; pero no lo haré—recalqué y dirigí mi mirada hacia Becca, quien sólo me blanqueó los ojos—Natalie reanudará la búsqueda.

Les conté todo lo que había pasado en mi reunión con Natalie y Gower, ellos no dudaron en unirse todos a la búsqueda.