Capítulo 18: Pirámide Reptílica

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Apenas vi a Jackson atado y luchando, mi corazón dio un vuelco, no soportaba verlo así, tenía que terminar esto ahora. La gente comenzó a abuchear a Jackson y a gritarle horribles insultos. Algunos gritaban "Hubiese preferido al padre" "Niño consentido" o "Merece morir de la peor forma"

Mi mirada se cruzó con la de Noah y el negó disimuladamente con su cabeza, en señal de que tenía que esperar. No quería esperar, había esperado demasiado. Noah volvió a negar con su cabeza y corrí la mirada enojada.

-No saldrás de ahí...-canturreó Donovan a Jackson, a quien le caía sangre de las muñecas de tanto tironear para librarse-Hace un par de horas, este mismo chico me dijo que la vida hacía justicia por sí sola-comentó Donovan. A pesar de que su voz era cantarina y sonreía en grande cada vez que hablaba, se podía notar la malicia y el resentimiento que tenía cada palabra que le dirigía a Jackson-¡Pues yo también lo creo! Abran las puertas de la justicia y que este chico sea la demostración en carne y hueso de que el karma existe-a medida que hablaba levantaba más su voz para hacerse oír entre los gritos y aclames y terminó diciendo la palabra "existe" en un sonoro grito.

El suelo de dividió en cuatro alrededor de Jackson y comenzó a deslizarse hacia dentro de los muros que separaban las gradas de la arena. Donde antes había un suelo ahora había agua. Miré extrañada y mi mirada se volvió a cruzar con la de Noah. Él asintió con su cabeza y di unos pasos hacia atrás para despegarme de la gente. Saqué un arma de la parte trasera de mi pantalón y apunté hacia el cielo. Era el momento. Apreté el gatillo y salió el tiro, que se hizo sonar entre todo el barullo de la multitud.

Comenzaron los gritos de la gente y luego escuché otro disparo, Noah; luego otro, Briana; otro más, Lucas, Becca y Bill. La gente comenzó a correr hacia las salidas y volví para mirar a Jackson. Él buscaba con la mirada por todas partes, sin embargo seguía tratando de librarse del poste. Varios helicópteros sobrevolaron el anfiteatro y los alrededores.

-¡La policía!-gritaban-¡Salgan todos, es la policía!

Las cuatro salidas del anfiteatro explotaban de gente desesperada por huir. Dos helicópteros se posaron sobre el anfiteatro y de él comenzaron a bajar hombres armados que detenían a cualquiera que se le pasara por delante.

Busqué a Donovan y él ya había desaparecido. Noah vino corriendo hacia mí, esquivando gente.

-Donovan se fue-grité entre la multitud.

-Yo me encargo, tú rescata a Jackson-gritó y desapareció entre la gente.

Comencé a bajar las escaleras esquivando gente que me empujaba o me daba codazos. Cuando por fin llegué a un claro, me quedé observando a un hombre mayor, pero no tanto, que llevaba puesta una capucha y empujaba violentamente a la gente para salir. Su rostro me parecía conocido, sin embargo no le di demasiada importancia y seguí corriendo escaleras abajo. Una vez que llegué a la primera grada, me quité el pañuelo para que él pudiera verme. Jackson levantó la mirada y sonrió, luego gritó algo que no escuché por todo el ruido.

Me tiré al agua y noté que no era nada profundo, de hecho sólo me llegaba hasta la cadera, así que me moví mucho más rápido. Cuando llegué a él, me subí al pequeño escalón en el que estaba parado y saqué un cuchillo para cortar las sogas que ataban sus manos y sus pies.

Nos quedamos mirándonos a los ojos, como si aún no nos cayera la ficha de que estábamos juntos otra vez. Finalmente terminamos abrazándonos fuertemente. Jackson pasaba su mano por mi cabello como para asegurarse de que en serio estaba allí y yo me aferraba tan fuerte a él que en cualquier momento sentiría el "crac" se sus costillas.

La Lista de Muerte (2° parte de El Campamento)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora