Deathbeds [Wigetta]

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-¿Quieres entrar tu después de ellos?- preguntó Rubén acercándose a Guillermo para que sus palabras no sonasen tan fuertes, aunque tampoco tenía muchas fuerzas para que eso sucediese.

-No lo sé- el menor sintió sus mejillas ser humedecidas y el roce de sus padres en su espalda –Tengo miedo.

-Yo también- confesó Rubén –Esto... es muy difícil.

-Cariño- escuchó a su madre hablar, por lo que movió la cabeza para observarla –no es necesario que entres ahora. Puedes hacerlo después, cuando te sientas preparado para ello- el menor bajó la mirada y se planteó la idea; estaba aterrado por la posibilidad de ver a Samuel como su mente se lo estaba imaginando.

Ángela, por su parte, observaba la situación con tristeza. Quería darle confianza de alguna forma al muchacho, pero no encontraba la manera para hacerlo.

-No puedo- articuló David con la mirada fija en el suelo –Estoy aterrado- confesó y el padre de Guillermo se acercó para acompañarlo.

-Es muy difícil- habló el mayor con tranquilidad, siendo quizás el más calmado de los cinco –y nadie los obligará a entrar si no pueden hacerlo. Pueden esperar a que Amelia y José vuelvan, escuchar que tienen ellos para decir y luego decidir si entrar o no- todos, incluida la enfermera, miraron al mayor con verdadera atención, sintiéndose acompañados por sus palabras –Encontraron a Samuel y lo están acompañando de la mejor manera que pueden, no se sientan en falta si no pueden afrontar esto ahora- los tres más jóvenes asintieron –No se presionen, ¿vale? Todo estará bien.