Caminos Inesperados 🌛🌜

capítulo 16

Un cumpleaños más sin ti:

Darien:

Ha transcurrido muy poco tiempo desde que conocí a Jedite y de que cerramos el trato, pero no dejamos pasar ni un segundo para ponernos manos a la obra. Ahora estamos en el terreno en dónde está siendo instalada. Al inicio yo quería que la fábrica empezara desde cero; osea, comprar el terreno y partir de ahí, pero Jedite consideró que era más apropiado comprar una de las fábricas abandonadas y solo hacerle los cambios para adaptarla a nuestras necesidades. Así sería terminada más rápido, y nos ahorraríamos muchos asuntos además del dinero. Yo acepté, ya que viendo personalmente el lugar y el estado en el que se encontraba la fábrica, no era tan mala idea.

En este momento acabamos de hablar con los arquitectos e ingenieros que se están encargando de todo lo que tenemos en mente.
No sé cuanto nos demoráremos, pues queremos que todo sea perfecto hasta en el detalle más mínimo, pero al ritmo que llevamos, creemos que no nos tomará más de un año para lanzar formalmente al mercado nuestra planta armadora automotriz, la cual aún no tiene nombre.

* cómo te decía, Shields... Una cosa son los...

Jedite no puede terminar la frase, porque somos interrumpidos por una mujer castaña muy bien vestida. Trae en sus manos unos papeles dentro de un folder blanco y luce como si hubiera corrido. Aunque lo dudo con esos tacones que trae.

Saori* disculpe la demora, señor Aino. Aquí está lo que me pidió.

Jedite* ah, Shields, te presento a mi contadora; la Srta. Saori de Santiago. Saori, él es Darien Chiba Shields, mi nuevo socio del que te hablé.

* mucho gusto!

Ambos decimos al mismo tiempo estrechando nuestras manos.

Jedite* me disculpas unos segundos? Debo atender algo.

Darien* claro, claro. No hay problema.

Ambos se retiran mirando los papeles que Saori trajo. No quería que pensaran que era un metiche, pero no podía dejar de mirar a Jedite. Y no por lo que estaban leyendo, sino porque el rostro de Jedite estando de perfil, hacía que más le diera un aire a Serena y Rini. Pero en especial a Serena. Más de lo que me pareció la primera vez.

* necesitas un pañuelo para la baba? Jajaja hombre! Digo, esa mujer parece muy atractiva, pero no crees que es muy pronto para que de nuevo andes de casería?

Me dice mi amigo Kakeru a la vez que golpea mi espalda. No había notado a que hora llegó. Si no hubiera dicho eso, yo ni en cuenta de su presencia.

* te va a sonar raro, pero no estaba mirándola a ella, sino a Jedite.

* qué? A Jedite, dijiste? Jajaja..

* de qué hablan? Y por qué ríes así, amigo?

Pregunta mi hermano Taiki quien también acaba de llegar. Habíamos quedado que entre los tres nos iríamos juntos a recoger a Zafiro del aeropuerto. Aunque tiene mucho trabajo, nunca se pierde un cumpleaños y menos el de hoy que es el de sus sobrinos. Rini no pudo venir, ya que sigue viendo los detalles de su boda, y otros asuntos.

Kakeru* que te diga tu hermano.

Ríe.

Darien* no es gracioso, Kakeru. Si digo que lo miro a él, es porque no dejo de notar cierto parecido con Serena. Tienen los mismos ojos, el tono de cabello rubio y la misma sonrisa que es lo que más me desconcierta últimamente.

Taiki* pues yo no le veo nada de parecido! Los extranjeros así son en su mayoría; rubios y ojo azul.

Darien* y la sonrisa?