capítulo 51

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La verdad se destapa, parte dos:

Serena:

Darien no dejaba de mirarme a los ojos, esperando mi confesión. Y yo no tenía idea por dónde comenzar, hasta que no vi de otra que relatarle desde el comienzo. Y no solo lo que pasó con Black, sino también, decirle lo de mi etapa de confusión con Jedite. Lo hago con todo el tacto que puedo, pero también con toda honestidad porque ya no quiero guardarme nada. El nerviosismo me mataba. Igual que el miedo, y la nostalgia.

* no sé si me puso algo en la bebida, para que así fuera más accesible, pero, eso no cambia el que me entregué a él... Como te dije, no fue la primera vez; ya en otra ocasión estuvimos a nada de llegar lejos y... me siento tan culpable! Desde que llegaste a mi vida nuevamente, quise decírtelo pero no sabía cómo! Al menos tú tienes una justificación, pero yo no! Yo lo hice en su mayoría consciente! Llegué a estimar a Black. A considerar una vida a su lado. Le fui infiel a tu recuerdo y, lo peor de todo, es que aún hay más. Lo más delicado de todo...

Hice una pausa para limpiarme las lágrimas y así poder verlo. Darien estaba pálido como papel, y su mirada lucia muy rara. Muy extraña. Jamás lo había visto así! Hasta ahora, no ha dicho absolutamente nada. No sé si está en shock o qué. No me atrevo a pedirle que diga algo, porque yo aún no término...

* querías saber por qué tengo el tatuaje y qué significa? Pues esa noche fue que me lo pusieron. Esas letras dicen: me perteneces, DB... No sé con qué fin lo hizo, y eso no importa ya. Como dije, eso no es lo más delicado. Porque... a unas semanas de haber terminado con Diamante, me comencé a sentir mal. Al principio no le di importancia, porque no era gran cosa, pero unas semanas después llegue a... Llegué a... A creer en serio que... me embarace de Diamante. Sé que tú y yo estuvimos juntos por esas fechas, pero contigo sí tomé algo para impedirlo. Además, mucho antes de ti, ya me sentía extraña. Así que no había manera de que pudiera ser tuyo...

Darien hizo un gesto aún peor del que ya tenía. No puedo describirlo, pero no debía ser nada bueno.

* he hecho cosas terribles! Lo sé. Fui en contra de mis viejas creencias y valores. Incluso, y esa fue la peor de todas, hubo una temporada en la que me llegué a fijar de Jedite, por culpa de mis sentimientos mal dirigidos. En una ocasión hasta intenté... Intenté besarlo. No llegamos a nada! Te lo juro! Jedite no lo permitió. Me empujó para impedir el beso. Y jamás volvió a suceder algo así. Te lo juro por mi vida! Pero tenía que decírtelo! Tenia que ser sincera, y decirte todo aquello que no me permitía estar cerca de ti. Me sentía... Me siento aún tan indigna de ti y de mi hija! Por como me convertí al no saber quién era... En serio que no tengo cara, pero repito que tenías que saberlo...

Bajé la mirada por vergüenza, pero no fue por mucho tiempo, porque la voz de Darien estalló escuchándose como un trueno. Uno muy furioso!

* Quién demonios eres?!

Sus ojos se oscurecieron al grado de hasta convertirse en una mirada casi cruel y sobrehumana. Como si le hubieran sacado el alma, y todo aquello que lo hace resplandecer. Su voz, era tan potente y furiosa, como nunca lo había escuchado desde que nos conocimos. Quedé muda y fría, y eso que no fue todo. Sin quitarme la mirada continuó.

* ...la Serena que yo conocía, jamás se hubiera dejado tocar ni siquiera un pelo! Mucho menos atreverse a seducir a un hombre mayor y casado! Te desconozco por completo! No puedo creer que mientras yo me odiaba a mí mismo, por haberte fallado, tú también lo hacías y justo con aquellos a quienes llegué a estimar, y puesto toda mi confianza en ellos!

«Qué?! Ya conocía a Diamante? Pero cómo? Nunca me lo dijo!»

Darien se pone en pie sin dejar de hablar furioso, y casi puedo sentir como si esa mirada sin vida me asesinara. Aún no puedo hablar. Me he quedado en completo shock por lo que acabo de escuchar, y porque me negaba a aceptar que reaccionaría así de mal. Era de esperarse, y me lo temía desde un principio, pero tenía una mínima esperanza de que no lo hiciera. Sé que está en su derecho, porque lo mío fue peor. Y lo es el doble porque nunca le había fallado de esa manera...

Caminos Inesperados 🌛🌜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora