Caminos Inesperados 🌛🌜

Capítulo 37

Sospechas peligrosas. Primera parte:

Celeste:

El olor penetrante a alcohol me obliga a abrir los ojos lentamente. Con la vista borrosa, veo que estoy sobre la cama y con Haruka frente a mí, poniéndome el algodón cerca de la nariz.

* al fin despiertas... Ya nos estabas preocupado, Celeste.

* qué... pasó?

Pregunté intentando levantarme y tocando el lado de la cabeza en donde me golpeé. De inmediato los recuerdos del por qué me desmayé llegan a mí, sin la necesidad de esforzarme.

* lo mismo quisiera saber. Qué te ocurrió? Michiru dijo que estaban tranquilamente charlando, cuando de repente te desvaneciste...

Sentándome y recargando en la almohada, lo miro a los ojos sin decir nada. No sé qué responderle.

* tuviste otra vez visiones, cierto? Sabía que no debí traerte!

* no! No fue por eso... Creo que... fue solo el cambio de aire. No es nada.

Mentí. No podía decirle la verdad. Cómo decirle que me desmayé por la impresión de lo que me dijo Michiru? Cómo decirle que me acosté con uno de los socios de su hermano, y eso me dio terror al grado de desmayarme?!

* que no es nada? Celeste, te des-ma-yas-te! Eso no es cualquier cosa! Por favor, dime qué te ocurrió?! Y no trates de mentirme, porque en tus ojos puedo ver que algo te ocurre.

* en serio te juro que no fue nada de lo que estás creyendo! No me pasa nada! Simplemente fue el cambio de ambiente. Estoy perfecta, qué no lo ves?

* pues no te creo. Y es más, adelantaré el vuelo! Hoy mismo saldremos de aquí. No quiero que te pongas peor.

Se pasa una mano por su rubio cabello. En serio se ve preocupado

* está bien! Pero y Michiru? Y por cierto, en dónde está?

* abajo. Fue a conseguir sales para hacerte despertar. Esta cosa no estaba sirviendo.

Señala el algodón para luego tirarlo en la papelera. Allí había varios más. Parece que no exagera.

* llegando a Nueva York verás a tu psiquiatra, y si me...

Haruka no pudo terminar de hablar porque tocaron la puerta. Escuché que era Michiru cuando Haruka abrió y se pusieron a hablar sobre el vuelo. Ahí fue que por fin me puse en pie y comencé a guardar todas mis pertenencias; Haruka tiene razón, no debió traerme. Fue un gran error. Y no puedo creer que de nuevo me haya metido en una grande! Nuevamente por desobedecer a Jedite, e imponerme, me he metido en problemas y justo con personas que pueden perjudicar a Jedite. Sí él se entera, o su socio le dice algo cuando sepa que soy la protegida de Jedite, esto se puede poner muy feo. Nos llevaremos entre los pies a varias personas, y todo por no hacer lo correcto! Dios mío!

Además, también está eso otro que dijo Michiru y eso me enfada porque ese hombre no era soltero, y aún así permitió que llegáramos lejos! Le fue infiel a su pareja sin ningún problema! No puede ser! Cómo alguien puede ser así?... Acaso él y su "novia" tendrán una especie de acuerdo?
El solo pensamiento, me pone la piel de gallina y mi enojo aumenta más. Pero, no solo con él, sino también conmigo misma porque yo cooperé para que sucediera. Yo fui quien lo trajo aquí sin pensar en las consecuencias...

Michiru* te sientes bien, Celeste? Nos diste un buen susto.

Celeste* sí. Estoy bien, creanme... Guardaré de una vez mis cosas. Muero por volver a casa.