De camino a mi casa no dejaba de pensar en él, en todo lo que pasó, pero me sentí bien. Me sentí bien conmigo misma porque entendí que el amor de tu vida no es la persona con la que regresas millones de veces. No es la persona que siempre estará ahí para ti, no es el que no te respeta, no es la persona que te resta en lugar de sumar algo en tu vida.Me di cuenta que últimamente me he sentido mucho más cómoda con mi soledad, no he tenido a nadie que me reclame nada, que necesite de mi atención y eso está bien.
Creí que él sería alguien que me querría siempre, que estaría para mi siempre, pero eso no siempre será así, llegará el momento en el que se deba dar cuenta que lo que está haciendo está mal, no puedes obligar a alguien a quedarse en tu vida y tampoco seguir insistiendo cuando claramente tu presencia le incomoda a la otra persona.
Ojalá, algún día lo entienda.
*
Llegué a mi casa y me encuentro a Lorena en la sala.
—Hola cariño ¿está todo bien? —me mira examinando mi rostro.
Traté de disimular todo lo que pude, pero creo que ella lo notó, solo dije:
—Sí, solo he tenido un día demasiado largo —veo el lugar y algunas cosas estaban desordenadas— ¿sucedió algo?
—Sí, es solo que... —mira a otra parte— nada, está todo bien.
—¿Y mamá salió?
—No, está durmiendo —dicho esto se va y me deja sola en la sala.
¿Quién duerme a las 6 de la tarde? Mi mamá muy rara vez suele dormir en la tarde, solo recuerdo que dormía mucho cuando estaba resfriada o en algunos momentos cuando la encontraba durmiendo a la hora de llegar de la escuela, es muy extraño. Todo sigue siendo extraño para mi.
Siento vibrar mi celular en mi pantalón y es Darren. ¿DARREN? él nunca me ha llamado.
—Hola.
—Hola Blake, quería saber a qué hora llegas a la biblioteca.
—A las 8 ¿por?
—¿Recuerdas los libros que te pedí que me guardes?
Ah, por eso.
—Sí, llegas a la hora de mi turno.
—Está bien, te veo luego.
Dicho eso cuelga. ¿Qué más podría decirme? Si solo hablamos en persona y únicamente en las reuniones del grupo.
Estas semanas estaré llevando algunos turnos hasta casi la media noche, ahora necesitarán más ayuda, se acercan los exámenes y eso significa: biblioteca llena.
Mi tía preparó la cena y pudimos cenar juntas. Me dijo que mamá seguia dormida y que sería mejor no molestarla. Le agradecí por la cena y preferí no preguntar más.
Fui directo a la biblioteca, me encontré con una chica tras el mostrador que no había visto antes, a simple vista se veía agradable, no como los otros compañeros que tengo.
—¿Y tú eres...? —le pregunto con el tono más amable que me pudo salir.
—Hola —sonríe—, soy Emily, llevo un par de días aquí.
—Mi nombre es Blake —le sonrío de vuelta—, lo siento, si me dijeron que habían contratado a alguien más, pero no tenía idea de cuando te vería.
—Llegué hace media hora —se encoge de hombros— tenemos casi un turno completo juntas, la señora Clarisse se fue por un par de horas.
—Está bien —me pongo cómoda en la silla que está a su lado— ¿estudias aquí?
—Sí, este semestre necesitaba con urgencia un empleo. Por suerte encontré este, se me hace mucho más fácil con los horarios y la cercanía.
—Sí, este trabajo es muy bueno, puedes leer lo que sea cuando no hay mucha gente —miro a mi alrededor y veo casi todas las mesas ocupadas— pero esto ya se acabará y tendremos libertad.
Con la pequeña charla que tuve con Emily, me enteré que está un semestre menos que mis amigos y está por cumplir 20. Es muy agradable.
—Aquí estás —Darren me sonríe de oreja a oreja.
—Hola —le sonrío— espera un momento.
Voy al estante en donde tenia los libros que me pidió y se los entrego.
—Te debo una y muy grade —me mira aliviado por haber cumplido mi palabra.
—Descuida.
—¿Hoy sales un poco tarde? —mira su reloj— Sam ya no tiene clase más tarde y me dijo que estudiará en casa, supongo que no tienes con quién regresar.
—No está tan lejos, descuida.
—No se diga más, traje el auto de mi padre, puedo llevarte a tu casa —se queda en silencio y luego agrega—, ¿te parece bien?
—Está bien —me rindo— salgo a media noche.
—Perfecto, me da tiempo de estudiar aquí, estaré por allá —señala una mesa vacía que no está tan alejada— me avisas a la hora que nos tenemos que ir ¿si?
Se va sin esperar respuesta y no recordé la presencia de Emily, me sentí muy avergonzada de no presentarla, pero ella me tranquilizó diciéndome que estaba bien y no quería interrumpir la conversación que tenía con Darren.
Mi celular vibra sobre el mostrador en el momento que estaba organizando algunas cosas en el computador, era Meredith.
—¿Sucedió algo? —dije primero.
—No, es solo que estoy con Sam y Darren no le contesta.
—¿Qué haces con Sam?
—Lo ayudo a estudiar, estamos en grupo con Luke y Ryan, se supone que Darren vendría hace una hora, pero no contesta.
—Dile que no se preocupe, lo estoy viendo en este momento —sonreí al verlo muy concentrado-, se quedó estudiando aquí en la biblioteca.
—Debe tener el celular en silencio.
—Dile a ese idiota que para la próxima vez, me avise —grita Sam, debo estar en altavoz.
—Está bien, se lo diré, adiós —recibí un adiós de parte de mis amigos y la llamada se cortó.
Las horas pasaron y Darren no se despegaba del libro que tenía y una libreta de notas. Hubo un momento en donde dejó todo, sostuvo su cabeza con sus manos y con los codos apoyados en la mesa, debe estar muy estresado y cansado.
Le preparé un café, era la única cosa que tenía a la mano y que claramente le serviría de mucho, me acerqué con cuidado y le toqué el hombro con delicadamente para no sobresaltarlo.
—Aquí tienes —pongo el café sobre la mesa y hago ademán de alejarme, pero él me toma del brazo.
—Gracias, este tema me estresa demasiado y estoy haciendo todo lo posible por entenderlo. Necesitaba mucho un poco de esto —sostiene el café y le da un sorbo-, negro y sin azúcar, mi favorito —sonríe— y el tuyo también.
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05:13 a. m.
El insomnio atacando otra vez, pero con un capítulo nuevo :')
Buenos días, tardes o noches. Cuando sea que leas el capítulo, gracias por leer. <3
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Rota
Teen FictionBlake, una chica de 20 años que está enojada con el mundo, un pasado problemático y una madre que no parece entenderla. Todo se torna doloroso cuando descubres lo mal que entendiste las cosas, confiar es difícil y depender de alguien no es una opció...