Capítulo 16

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Pasaron los minutos, Emily y yo estábamos exhaustas de recoger, acomodar y apuntar los libros que se llevaban o regresaban. Por suerte la señora Clarisse nos ayudó, Darren se acercaba de vez en cuando a ofrecer ayuda.

Mi compañera se fue más tarde de lo que debía solo para ayudar a dejar todo el listo para mañana, sus padres llegaron a recogerla.

—¿Ya está todo listo? —pregunta Darren guardando sus cosas.

—Sí, ya tengo todo, no hay nadie y Clarisse se encargará de cerrar.

Salimos al estacionamiento y veo un auto familiar.

—¿Cuál es tu auto?

—El de allá —señala el que está cerca a la salida del estacionamiento, camino más rápido de lo normal y él lo nota—, ¿sucede algo? No puedo seguirte el paso.

—Solo sube rápido al auto, luego te explico.

No responde solo trata de seguirme el paso, pero no me alcanza. No entiendo cómo supo mi hora de salida o en donde trabajaba, es muy extraño, pero ya estoy cansada de lo mismo. Creí que ya había dejado claro que no quiero verlo.

—¡Blake, espera! —dice Dan a mis espaldas y no me detengo— ¡Solo quiero hablar sin discutir, por favor!

—Blake, te están hablando —Darren me detiene y por fin me doy media vuelta, veo a Dan caminando lentamente hacia nosotros.

—Ya te dejé claro que no quiero hablar contigo —miro a Darren y sigue sosteniendo mi brazo— no quiero saber nada de ti.

—Pero yo sí, quiero saber de ti, te dije que no me daré por vencido contigo —mira la mano de Darren aferrada a mi brazo— ¡quítale las manos de encima!

—¡TE DIJE QUE ME DEJES EN PAZ! —grité— ¡ESTOY HARTA DE TODO LO QUE TENGA QUE VER CONTIGO!

—Ahora entiendo por qué no vuelves a mi, estás saliendo con este imbécil —se cruza de brazos—, sabes que no va a funcionar y al final del día regresaras conmigo.

—¿Quién te dijo en donde estaría? —le cambio el tema para contener mis ganas de lanzarme sobre él y darle los golpes que se merece.

—Es un defecto tuyo, sueles confiar en las personas equivocadas —ríe— solo quería saber cómo estabas, debo irme.

Sin decir más, camina a su auto y se va.

—¿Estas bien? —Darren se para frente a mi y me sostiene de ambos brazos.

—Sí, eso creo —no deja de mirarme a los ojos, tratando de encontrar algo mal.

—¿Tienes hambre? —se aleja de mi espacio personal, pero no deja de mirarme y tampoco me suelta.

—Sí, mucha —me rio— ¿vamos a comer algo?

—Claro, no conozco muchos lugares, pero tengo a la experta —me aprieta la mejilla y camina junto a mi.

Subimos al auto de su padre y le doy la dirección de una pizzería 24/7, no estaba muy cerca, pero se nos antojaba lo mismo.

En el camino mantuvo la radio en el volumen exacto para mantener una conversación, pero de pronto se escuchaba una de mis canciones favoritas y le pedí que suba el volumen.

Entierra todos tus secretos en mi piel comienzo a cantar bajito-,
Márchate con tu inocencia, y déjeme con mis pecados.

El aire que me rodea todavía se siente como una jaula. -canta Darren junto a mi y le sube más al volumen-, y el amor es solo un camuflaje, lo que parece ser rabia otra vez.

Disfrutamos de la gritara y luego grito la siguiente parte de la canción.

Entonces si me amas déjame ir y corre lejos antes de que lo sepa.

»Mi corazón es solo oscuridad para que me importe. No puedo destruir lo que no está ahí.

La canción continua, yo me quedo en silencio un momento y Darren canta otra parte.

No puedo afrontar la vida sin tu luz.

—Pero todo aquello fue destrozado en parte, cuando te negaste a luchar -cantamos al unísono.

»¡Así que guarda tu aliento, no escucharé!
Creo que lo deje bien claro
No pudiste odiar lo suficiente para amar.
¿Se supone que eso fue suficiente?

Solo desearía que no fueses mi amiga
así podría hacerte daño al final.
Nunca mencioné ser un santo.
Mi yo desapareció hace mucho tiempo
¡Tuve matar toda esperanza para dejarte marchar!

Nos miramos por unos segundos, sonreímos y continuamos cantando juntos.

Así que rómpete contra mis piedras y escupe tus penas en mi alma.
Nunca necesitaste ayuda alguna
Me vendiste para poder salvarte a ti misma.
Y no escuchare tus lamentos...
Tú saliste corriendo, son todos iguales. 
Los ángeles mienten para mantener el control.
Mi amor fue castigado tiempo atrás.
Si todavía te importa no quiero saberlo jamás.

Si todavía te importa no quiero saberlo jamás —gritamos y luego nos reímos.

—No sabía que te gustaba esa canción —me dice y baja el volumen de la radio.

—Es una de mis favoritas —me encojo de hombros— siempre la escucho junto a otras canciones tristes.

—Me agradas aún más —sonríe— es una canción muy profunda.

Sin darme cuenta ya habíamos llegado a la pizzería, camino con libertad al lado de Darren. Hace mucho que no me sentía así con alguien que no sea Sam o Meredith.

Comimos mucho, reímos hasta que nos doliera el estómago y se sintió muy bien.

*

Llegamos a mi casa y antes de bajar le digo:

—Gracias, no me había sentido tan bien hace mucho.

—Gracias a ti —sonríe—, es la primera vez que pasamos tiempo fuera del grupo.

—Sí, es diferente —abro la puerta y bajo.

—¿Quieres que se repita?

—Claro, cuando puedas —sonrío y cierro la puerta del auto.

Se despide agitando la mano y se va. Esa sensación de haber pasado un buen rato se me quita por completo al entrar a mi casa.

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Canción: Snuff de Slipknot.

Se viene lo bueno 7u7 pero es muy probable que no pueda subir nada hasta el fin de semana uu

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