Capitulo 86 - Tiempo

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Saúl: Altagracia... ¿donde estas? - estaba recorriendo toda la casa tratando de encontrarla, pero no habia rastros de ella - Amor por favor responde - ella seguia sin aparecer hasta que saul escucho pequeños sollozos que provenían desde el baño - ingreso rapidamente y lo que vio rompió su corazón - mi amor.

~ Altagracia estaba sentada en el suelo abrazando sus rodilla mientras lloraba intensamente. Los sollozos eran cada vez más fuertes y ella sólo movía su cabeza como si quisiera alejar de su mente imágenes que la atormentaban.
Saúl se agachó velozmente y trató de acunarla entre sus brazos pero ella no se lo permitió y lo alejo rápidamente con gritos ~

Altagracia: NO ME TOQUES, NO TE ME ACERQUES POR FAVOR... TE LO SUPLICO.

Saúl: Amor, Alti mirame soy yo - ella lo observó y su llanto aumentó - ven acá.

Altagracia: no puedo, no puedo con esto Saúl... No puedo más con este dolor - el quería abrazarla pero el cuerpo de ella temblaba con tan solo sentir su cercanía - noe toques, no lo hagas... Solo déjame sola - saúl sabía perfectamente porque lo decía pero en el fondo ella lo necesitaba más que nunca.

Saúl: vamos no te hagas esto, se que nesecitas de un buen abrazo - sin mas que decir ella se abalanzó a sus brazos y lo apretó tan fuerte que por un momento ambos se quedaron sin respiración.

Altagracia: ya no se que hacer - dijo en un tono apenas audible debido al llanto.

Saúl: tiempo al tiempo mi amor, te prometo que en unos meses todo esto será solo un mal sueño. - besó dulcemente su frente y la aferro más a su cuerpo - ya no temas corazón, no estas sola y no lo estarás nunca más... Eso lo juro.

Altagracia: es que los recuerdos no me dejan en paz, quiero olvidar pero no puedo... Con solo verme al espejo y ver estos golpes siento odio, dolor, asco, vergüenza y mucho, pero mucho miedo. - su cuerpo seguía temblando y Saúl trataba de contenerse pero las lágrimas no tardarían mucho en salir.

Saúl: shhh ya todo pasó... Con nuestro amor y el de toda tu familia sanarás y no solo físicamente también de aquí - apuntó su corazón - y de aquí - esta vez apuntó su cabeza - Te amo y haré hasta lo imposible porque vuelvas a ser feliz - se acerco con un poco de miedo pero deposito un dulce beso en los labios de la mujer que más ama en el mundo.

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Altagracia: tenias razón mi amor... Me hiciste tan feliz, lograste que dejara mi pasado atrás - dijo con nostalgia mientras sostenía una foto de su matrimonio en las manos. Sin notarlo ya estaba derramando algunas lágrimas.

Mónica: ¿Mamá? ¿Estas bien? - prefiero un poco extrañada por haberla visto llorando.

Altagracia: si, si... Solo estaba viendo una foto - se seco las lágrimas y dejó la foto sobre su buro mientras se ponía de pie. - ¿que pasó?

Mónica: Llevaré a Eduardo a casa de Emiliano, iré con Isa... ¿Nos quieres acompañar? Es el cumple de Leticia y mi hermano no quiere que ella esté tan sola.

Altagracia: no lo sé mi cielo, ya sabes que se me complica salir con los niños - le hablaba mientras acomodaba su ropa y buscaba algo en su celular - mejor solo ve tu con Isa y Edu.

Mónica: anda mamá vamos, necesitas distraerte un poco, hacer algo que no solo sea ver a los niños y trabajar... - dijo con un tono de preocupación pues hace tiempo veía a su madre mal y eso le dolía, le angustiaba sentir que no había algo que aliviará ese dolor que sentía aquella mujer que por muchos años ha sufrido más que muchas personas - mira si quieres no lo hagas por mi, hazlo por tu nieto - dijo con una sonrisa y una mirada tierna con la que esperaba poder convencer.

Nada es Eterno - COMPLETA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora