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Mi vida en Derry es demasiado aburrida, mis padres no me dejan salir de casa en ningún momento, cuando ellos se van al trabajo yo me quedo sola encerrada en casa. Algunas veces pude salir sin que ellos se dieran cuenta, pero prefiero no hacerlo y evitar problemas.
-¿Eres nueva?- dijo un chico asustándome.
-Maldición- me quejé.
-No era mi intención asustarte, nunca te había visto por aquí ¿Eres nueva?- el chico era amable.
-No lo soy, llevo mucho tiempo viviendo aquí, pero mis padres nunca me dejan salir-
-Que horror, pero si no sales... ¿Cómo vas a la escuela?- me miró confundido.
-Estudio en casa- hice una mueca.
-Igual que mi amigo Mike... Pero tu no te pareces en nada a Mike- comenzó a reír.
-Soy ___ Hargreeves- sonreí.
-Soy Richie Tozier- sonrió también.
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Desde ese día Richie iba a mi casa cuando mis padres no estaban al igual que sus amigos, me invitaban a salir y pasábamos momentos muy agradables. Un día Richie me dijo que le gustaba y me pareció raro ya que el decía que estaba enamorado de la mamá de Eddie y era divertido, pero admití que me gustaba también.
-¿Como está la chica secuestrada más linda?- dijo el chico sonriendo.
-Estoy bien... Supongo- sonreí también.
-¿Supones?- me miró confundido.
-Si, no creas que es muy divertido estar encerrada todo el día- me senté en el borde de la cama.
-Podríamos salir- sugirió sentándose a mi lado.
-Me encantaría- dije emocionada.
Salimos de mi casa, caminábamos sin rumbo con las manos entrelazadas, sin duda Richie es lo mejor que me ha pasado en todo el tiempo que llevo viviendo aquí.
-Eres muy linda- dijo el chico de la nada haciéndome sonreír.
-Richie- tapé mi cara con mis manos.
-¿Qué? Es la verdad- comenzó a reír.
-Gracias Richie, tu también eres muy lindo- sonreí y acaricié su mejilla.
-Lo sé... Me da miedo de que tus padres se enteren de que sales de casa- hizo una mueca.
-A mi también, ellos me dan miedo algunas veces, si algún día se llegan a dar cuenta estaré feliz porque al menos pude estar contigo- sonreí con cierta tristeza.