Alejandro, Felix Agreste, Tom Holland y Aslan estaban almorzando juntos en el Tony's. Estaban sentados adelante y cada vez que se abría la puerta, automáticamente controlaban a los que entraban. Adrien Agreste estaba en la parte de atrás y aunque ahora no había ningún conflicto entre las Familiar, era mejor obrar sobre seguro.
-¿Qué pasó con Jimmy?-Preguntó Aslan.
-Astutatu-morte-Le contestó Alejandro-El imbécil hijo de puta cayó por la hermana de un detective. La tipa tenía muy buen cuerpo. Eso se lo reconozco. Ella y su hermano polizonte le hablaron a Jimmy de un golpe. Jimmy arregló una entrevista con Adrien y llevó un cable escondido en la pierna del pantalón.
-¿Entonces qué pasó?-Preguntó Tom.
-Lo que pasó es que Jimmy se puso tan nervioso que tuvo que ir al baño a orinar. Cuando abrió los pantalones, salió el cable.
-¡Oh, mierda!
-Eso es lo que dijo Jimmy. Adrien lo hizo regresar con Bucky, Usó el alambre de Jimmy para ahorcarlo. Se fue muy despacio-La puerta se abrió y los cuatro hombres levantaron la vista. Era el chico con los diarios, con la edición de la tarde del New York Post. Aslan lo llamó.
-Por aquí, pequeño-Se volvió a los otros-Quiero controlar la formación de Hialeah. Tengo un caballo corriendo hoy-El chico de los diarios, un adolescente de rostro curtido por la intemperie le alcanzó el diario a Aslan, quien le dio un dólar-Quédate con el vuelto.
Eso es lo que Adrien Agreste hubiera hecho. Aslan empezó a abrir el diario y los ojos de Alejandro fueron atrapados por una foto en la página principal.
-¡Eh!-Dijo-¡Yo he visto a ese tipo antes!-Felix Agreste echó una mirada sobre el hombro de Alejandro.
-Por supuesto que lo has visto, tonto. Ese es Nathaniel Kutzberg. Es candidato a Presidente.
-No-Insistió Alejandro-Quiero decir que yo lo vi-Se frotó las cejas tratando de recordar. Repentinamente lo supo-¡Lo tengo! Era el tipo en el bar de Acapulco que estaba con Marinette Dupain.
-¿De qué estás hablando?
-¿Se acuerdan cuando estuve afuera el mes pasado para llevar un paquete? Vi a este tipo con Marinette. Estaban tomando una copa juntos-Tom Holland lo miraba fijamente.
-¿Estás seguro?
-Sí. ¿Por qué?-Holland le dijo cuidadosamente.
-Quizá sea mejor que se lo digas a Adrien.
Adrien Agreste miró a Alejandro:
-¡Estás totalmente loco! ¿Qué podría estar haciendo Marinette Dupain con el senador Kutzberg?
-Pégueme, jefe. Todo lo que yo sé, es que estaban sentado en ese bar tomando una copa.
-¿Sölo ellos dos?
-Sí.
-Pensé que tenías que saberlo, Adri-Explicó Tom Holland-Este idiota de Kutzberg es el que estaba investigando toda esa mierda sobre nosotros. ¿Por qué Marinette tomaría una copa con él?-Eso era exactamente lo que Adrien quería saber. Marinette le había hablado de Acapulco y había mencionado a varias personas con las que se había encontrado. Pero no había dicho una palabra sobre Nathaniel Kutzberg. Se volvió hacia Felix Agreste.
-¿Quién es el jefe del gremio de porteros?
-Charlie Corelli-Cinco minutos más tarde, Adrien estaba hablando con Charlie Corelli.
-...Las torres Belmont-Dijo Adrien-Un amigo mío vivió allí hace nueve años. Quiero hablar con el tipo que fue portero entonces-Adrien escuchó por un momento-Te lo agradezco mucho, compañero. Te debo un favor-Cortó. Alejandro, Agreste, Holland y Aslan lo miraban-¿No tienen nada que hacer pedazos de inservibles? A volar de aquí- Los cuatro hombres se fueron apresuradamente.
Adrien se quedó sentado, pensando, imaginando a Marinette y a Nathaniel Kutzberg juntos ¿Por qué Marinette nunca lo había nombrado? Y el padre de Louis que murió en la guerra de Vietnam. ¿Por qué Marinette nunca había hablado de él? Adrien Agreste empezó a pasearse por la oficina. Tres horas más tarde Felix Agreste introdujo a un hombre tímido, mal vestido, de unos sesenta años, que estaba evidentemente aterrorizado.
-Este es Willy Kawolski-Dijo Felix. Adrien se puso de pie y estrechó la mano de Kawolski.
-Gracias por venir a verme, Willy. Te lo agradezco. Siéntate. ¿Puedo ofrecerte algo?
-No, no, muchas gracias, señor Agreste. Estoy muy bien. Gracias, muchas gracias-Le faltaba hacer reverencias.
-No te pongas nervioso. Lo único que quiero es hacerte un par de preguntas, Willy,
-Seguro, señor Agreste. Todo lo que usted quiera saber. Todo.
-¿Todavía trabajas en las torres Belmont?
-¿Yo? No señor. Salí de allí, oh, hace cerca de cinco años. Mi suegra tuvo artitris y...
-¿Recuerdas a los inquilinos?
-Sí, señor. A la mayoría de ellos, creo. Eran...
-¿Recuerdas a Marinette Dupain?-La cara de Kawolski se iluminó.
-Oh, seguro. Era una señorita muy bonita. Incluso recuerdo el número de su departamento. Diecinueve ventinueve. Como el año que el mercado quebró, ¿sabe? Ella me gustaba mucho.
-¿Tenía visitantes la señorita Dupain, Willy?-Willy movió despacio la cabeza.
-Bueno, eso es difícil de decir, señor Agreste. Yo solo la veía entrar o salir.
-¿Algún hombre pasaba la noche en su departamento?-Willy Kawolski movió la cabeza.
-Oh no, señor-Entonces todo esto había sido por nada. Sintió una ola de alivio. Había sabido todo el tiempo que Marinette nunca podría...-Su amigo venía a buscarla a casa y se quedaba con ella-Adrien pensó que había entendido mal.
-¿Su amigo?
-Sí. El tipo con el que la señorita Dupain vivía-Las palabras hirieron a Adrien en el estómago como si fueran un martillazo. Perdió el control. Agarró a William Kawolski de las solapas y lo sacudió.
-¡Maldita mierda! Te estoy preguntando si... ¿Cual era su nombre?-El hombrecito estaba aterrorizado.
-No lo sé, señor Agreste ¡Le juro por Dios que no lo sé!-Adrien lo empujó. Tomó el periódico y lo puso delante de las narices de Kawolski. Kawolski miró la fotografía de Nathaniel Kutzberg y dijo excitado-¡Ese es! ¡Ese es su amigo!
Y Adrien sintió que el mundo se hacía pedazos a su alrededor. Marinette le había mentido todo el tiempo. ¡Lo había traicionado con Nathaniel Kutzberg! Los dos habían estado solapandose a sus espaldas, conspirando contra él, convirtiéndolo en un idiota. Ella le había sido infiel. Los antiguos impulsos de venganza se agitaban con fuerza en Adrien Agreste y supo que los iba a matar a los dos.
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La venganza de los ángeles (+18) ©
FanfictionArtículo 1º: Honor y dignidad de la profesión: El abogado debe cuidar el honor y dignidad de la profesión-Código de ética profesional de la escuela de abogados. Marinette Dupain-Cheng está por iniciar su profesión. Todo era nervios en aquel juicio e...