Capitulo 10.

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Ya todo está arreglado.

O al menos lo está entre Allison y Tyler.

Porque yo soy un desastre.

Me escondo en la cocina para ocultar mis lágrimas. Ver el beso que se dieron Alli y Tyler me hizo darme cuenta de que nunca tendré algo como eso.

Nadie me toma en serio.

Nadie me quiere lo suficiente.

Y me voy a morir.

Nunca podré enamorarme. O bueno, lo haré; pero nunca seré correspondida. Y si lo soy –que no creo que pase- no importará, porque dejaré a esa persona el día que muera.

Por lo menos mi mejor amiga es feliz. Ella si conoció al amor de su vida.

Porque, digo, el beso que se dieron, y la intensidad con la que se miraban, no es para que su relación sea algo pasajero.

“Moriremos solas”

Lo sé.

Alli y Tyler entran por la puerta y me sonríen. Están tomados de las manos.

“Por lo menos alguien está feliz”

- ¿Estás bien?- pregunta Tyler. Allison levanta una ceja.

 –Si, sólo tengo hambre. –respondo. Lo que no es una total mentira- ¿Y….? ¿Ya se arreglaron?

Allison se sonroja y Tyler me sonríe abiertamente.

Y esa es toda la respuesta que necesito.

Toma un chocolate de mi escondite no-tan-secreto y salgo de la casa por la puerta de atrás.

Digo, capté la indirecta. Muchas gracias.

Es obvio que ellos necesitan intimidad; y honestamente, no quiero escuchar los gemidos de Allison. Otra vez.

Cierro la puerta detrás de mí y me siento bajo un árbol. El jardín trasero es grande. Y muy lindo. Pero lo que más me gusta, es un árbol que está en la esquina,no sé qué tipo de árbol es ni nada de eso, pero me encanta. Sus ramas y hojas hacen un tipo de velo, que cae alrededor de todo su tronco, ampliamente; escondiendo a cualquiera que se quede debajo.

Y a mí me encanta ese árbol.

Espero que Allison sea feliz con Tyler.

Ella sí puede tener una vida larga y feliz.

Yo no.

Y ya me estoy haciendo a la idea.

Escucho pasos acercarse a mí, pero no me levanto, y luego un par de zapatos que reconozco rápidamente, aparecen en mi campo de visión.

–Kaelin, por favor. ¿Podemos hablar? –susurra Alex.

–No –espeto.

–Por favor, déjame explicarte las cosas….Nada, nada ocurrió como tú estás pensando. No es lo que tú estás pensando.

-¿Y qué estoy pensando, Alex? –pregunto- Dímelo, porque ni yo misma lo sé. Lo único que sé es que no puedo tener un amigo verdadero porque luego lo jode todo. No puedo confiar en nadie.

Alex toma una bocanada de aire, y sé que mis palabras lo hirieron, pero no me importa. Él también me lastimó.

-¿Me dejarás explicarte? –susurra. Ésta vez con la voz aún más baja. Mantengo mis ojos cerrados.

–No me he ido de aquí, ni te he dicho que te largues, ¿cierto?

–Kaelin, ¿vas….? ¿Vas a mirarme?

Cómeme con chocolateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora