Lo acepto y no me importa...
Bueno si me importa...
Solo un poquito... Mucho.
Me importa mucho.
Un vastaya pavo real de plumas doradas se encontraba pensativo mientras observaba las nubes que formaban diversas formas; arboles, frutas, figuras... Rostros. En la ciudad, en el campo libre donde se presentaría el festival; las estatuas se encontraban siendo pintadas, rakan ayudaba a neeko con la de galio, la cual era muy alta, pero requería poca pintura.
Desde aquella altura podrías observar a todos los que participaban arreglando todo en el festival; decoraciones doradas, faroles, el gran almacén donde se encontraban las lámparas flotantes que las parejas encienden juntas para liberarlas al aire terminado el festival.
-Hombre pájaro! ¿Le harías el favor a neeko de ir por una cubeta de agua? - Una neeko sonriente desde la segunda planta, de las vigas formadas en tres para agilizar la pintada, le llamo la atención al vastaya en la tercera planta. Este acepto y de forma ágil bajo hasta el suelo aterrizando con gracia. Toma una cubeta vacía y se dirigió a llenarla. Limpiaba sus plumas mientras el líquido llenaba la cubeta hasta el tope.
Mientras tomaba la cubeta para regresar, alguien le toco el brazo haciéndolo mirar a su izquierda, luego lo volvió a tocar a su derecha y así sucesivamente hasta encontrarse con una sonriente xayah.
-Oh! - rakancito dejo la cubeta a un lado y miro a la sonriente vastaya.
-¿Como vas con tu castigo? -
-Es agradable conocer aspectos que no conocía de nadie más - se hizo presente su coqueta sonrisa.
Xayah alzo un ceja, luego prosiguió con lo que iba:
-Hey! Quería pedirte un favor.
Me lo pide a mi! ¿porque no a mi?
Ahh si, probablemente su pareja.
Aunque nunca afirmo tenerla.
Sonríes y tus ojos ambarios tienen un muy bonito brillo.
Tus labios son azules hoy... Quisiera...
-... Y eso, entonces ¿que dices? - término xayah quien le estaba explicando la razón por la que necesitaba ayuda.
No; espera, ¿que dijo?
-Yooo... Emm - inventa una excusa - ahora mismo tenemos mucho trabajo y la verdad no creo poder...
-Hmm, entiendo - se hizo presente su característica seriedad- bien, nos vemos luego.
Tal vez sea lo mejor, además creo que ya no me gusta.
No, no me gusta.
Desestimando sus sentimientos hacia ella la misteriosa dama solo la vio alejarse. No obstante siguió con lo suyo.
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En la estancia del club de teatro se encontraba ahri practicando sus movimientos para la obra del festival. En eso entra el vastaya cuervo melchar quien la observa moverse.
En la mañana del mismo dia; varios miembro del club ignoraron a ahri tras la entrada tardía del vastaya cuervo. Todos ignoraron a ahri en ese momento y se dispusieron a saludar al nuevo compañero, quien se puso en la tarea de conseguir nuevos amigos con quienes ya compartía. Por llegar tarde se ofreció de forma caballeros a limpiar cuando todos se fueran. A eso se disponía cuando entro y ahri practicaba sus movimientos.
-Señorita ahri, no esperaba su estadía aquí. - dejo su maleta aun lado y se dispuso a limpiar. Ahri lo ignoro por un momento y se alejo para que el vastaya limpiará el lugar.
Ya terminada la tarea se dispuso a hacerle una propuesta a ahri:
-Señorita ahri, ¿me concede el honor de practicar conmigo el baile del cortejo? - se inclina ante ella.
