- ... Ahri.
Llama a su nombre, aquel león de ojos cegados. Ella estaba pensativa.Frente a ellos, un bar con una variedad de licores.
-...¿Qué crees que es más valioso... -Ahri giro su cabeza para verlo. Ibuku contiuó- Las cabezas con cuernos o crines?
-¿Qué?
- A los clanes aquí les gusta decorar sus paredes con cabezas vastaya. preferiblemente de otros jefes de clanes...
Ahri ríe con un poco de pavor.
- Jajaja. ¿Crees que esta cabeza seria un buen artilugio para interiores? -Cuestionó tomando su propia cabeza, midiendo su valor en su mente.
- ¡¡Lo digo en serio!! ¿Qué haríamos si algún clan se siente amenazado por nosotros viene a reclamar tu cabeza...?
Ahri bajó su mirada, sus ojos no dejaban de reflejar su angustia. Sin animo alguno.
- Entonces morirás en mi lugar, Ibuki. -Puso su mano en su hombro- No puedo morir cuando todo va tan bien. Además, habrá rumores de que mis chicos me comieron en su lugar. No quiero machar el nombre del Shishigumi
Ella habla segura, con una sonrisa reconfortante.
Ibuki la mira sorprendido, luego una cálida sonrisa se forma en su cara. Sus bigotes son caídos, guardando sentimientos.-Por supuesto. Con mucho gusto moriría por ti, Jefa.
-
.
-Bueno, tengo que ir a asearme... -Ibuki se levantó de su silla. sonriente le hablo al dueño del bar-. Oye, me gustaría que nos consiguieras dos Star Guardians.
- No me gusta el alcohol fuerte. -Dijo Ahri tocándose la nariz, mostrando su molestia.
-¡¿Qué?! -Ibuki giro su cabeza sorprendido, mirándola con los ojos abiertos. Pues es la primera vez que pue eso de la boca de ella.
- Ehg, mejor, haz que el otro sea un coctel dulce. -Pidió cortésmente.
-¡Tampoco me insultes! -Reclama la kumiho-.Hm... Tomaré un poco de aguardiente de bayas... con agua caliente.
Tras pedir eso, Ibuki se alejó hasta estar fuera de la vista de Ahri.
En su mente divaga el hecho de que sabía la abstinencia de Ahri hacia el alcohol. eso significa que tiene su confianza. Suponiendo que aquel exasperante pasado tenia un valor después de todo.
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Mientras su acompañante no estaba cerca, unos pasos de tacones cerca de ella hicieron que sus orejas saltaran.
Ahri.
Escucho pasos de tacones. Es una clienta, se sienta a mi lado ¿por qué?
Giré mi cabeza para ver de quién se trata, o qué queria. Para toparme con una sorpresa.
- No te asustes, Ahri. -Dijo esa persona.
Abrí los ojos sorprendida. Xayah traía un traje negro, su cabello estaba recogido, unas gafas de sol redondas y un sombrero la encubría.. Una parte de su cabeza estaba vendada, tapaba su ojo derecho.
- Sé que tengo mucho que explicar, pero ...sabes que soy yo. Me ha costado llegar hasta aquí.
Esta chica...