Best Friend ||TERMINADA||

44. Yo A Ti No Te Hablo

Mis manos me sudan. Estoy muy nerviosa porque no se como va a reaccionar Sage, pero al menos se que después me lo va a agradecer.

Llegamos con Zander y Sage ya no quería seguir caminando. Se quedó parada en medio viendo a Zander levantarse de la banca.

-¿Ken? - me preguntó viéndome con sus ojos rojos.

-Sage, solo hablen, por favor. - le digo y ella se hace hacia atrás. - Escuchalo.

-La última vez que lo hice y me dijo que lo olvidara. - dice apunto de irse.

-Espera, por favor. - le obstruyo el paso. - Zander me habló a mi para hacer esto y hablar contigo, por favor escuchalo.

Me mira por un tiempo y asiente, se gira y va con Zander apretando sus puños un poco tensa. Rowan fue hacia mí y nos fuimos de ahí para dejarlos solos.

-Espero que funcione. - dije.

-Espero. - dice Rowan.

Seguimos caminando y me acuerdo de Hunter. Quisiera estar con él, pero no puedo dejar solo a Rowan y menos ahora que ellos dos están hablando.

Si Rowan se queda solo y por alguna razón no funciona el plan, él se irá con Zander y Sage se quedaría sola llorando. Así que para evitar eso, mejor me quedo con Rowan.

No se ni que vamos a hacer pero de que haremos algo, habremos algo.

***

Estoy jugando con Rowan, basquetbol en una cancha cerca de donde están Sage y Zander. Mejor dicho, Rowan me esta enseñando a encestar por que no se.

Desde pequeña me traume con basquetbol o más bien, la pelota. Cuando los chicos de grados mayores estaban jugando lanzaron la pelota y me pegaron en la cabeza. Así que con buen recuerdo de este deporte, no tengo.

-No te hará nada, ¿okay? - dice Rowan riéndose cerca del aro.

-A mi no, pero ¿a ti? Te puedo pegar.

-Puedes, pero confío en que la vas a encestar. - se cruza de brazos.

-No lo sé. - digo dudosa.

-Bien, ven. - él camina a un punto cerca del aro.

Caminé y me puse a su lado. Puso sus manos a la altura de mis costillas y se puso justo detrás de mí. Mi respiración se volvió pesada. De no ser por su agarre, si me desmayo.

Varias chicas me han dicho de lo afortunada que soy de tener a Rowan como mi amigo. Aún que se equivocan, tenerlo de amigo tiene sus pros y sus contras.

-Ahora, salta. - dice Rowan y le hago caso.

Al saltar, me alza y yo meto la pelota en el aro. Cuando me baja me siento poderosa por haber encestado.

-Enceste. - grite y lo abracé.

-Si, con mi ayuda. - dice bajando su cabeza para verme.

-Déjame disfrutar de mi pequeña victoria. - digo cruzando me de brazos.

-Bueno, vamos enana. - dice riéndose.

-Que no me digas así. - le doy un leve empujón y nos vamos de ahí.

Ya oscureció, pero gracias a los faroles de la universidad y la luz de la luna, esta iluminado. Miro a Rowan como por lo general hago. Veo su perfil y como sus ojos van atentos al camino. Sus labios están cerrados, sus manos en sus bolsillos y su caminado es seguro. Se que sabe que es guapo, pero el no es tan presumido como yo lo pensaba.

-Mira allá están. - señaló Rowan y moví mi mirada.

Me detuve para verlos. Están abrazados y Sage tiene la nariz roja, creo que lloró. Zander la acaricia del pelo y le da un pequeño beso en la coronilla. Doy una sonrisa de boca cerrada ante esa escena de ellos dos.

-Y, ¿cuando vas a dejar de observarme, enana? - dice Rowan y siento mis mejillas calentarse.

-¿Observarte? - lo miro. - ¿Te estás oyendo? - ladeo la cabeza y el sonríe.

-Si, creo. - dice y me río.

-Y no te estaba viendo. - dije moviendo mi vista.

-Pues tus mejillas no dicen lo mismo. - dice y pongo ambas manos en mis mejillas como reacción.

Se río y me abrazó y yo a él. Me tranquilice cuando me llego el olor de su colonia.

-Te quiero. - solté y se río.

-Yo también te quiero. - hizo una pausa. - Enana.

-Calvovich. - le digo y le saco la lengua.

Se ríe y me alborota el pelo. - Nos vemos, tengo una cita.

-Uy, como no me lo esperaba. - me río.

-Ja, ja que graciosa. - dice. - Bye, loca. - agita si mano yéndose.

-Bye. - agitó mi mano, también.

Me voy de ahí y me dirijo a mi dormitorio. No creo que Sage venga ahorita y si lo hace pues ni modo.

Llegue a la puerta de mi dormitorio y al abrir la puerta vi a Hunter sentado en mi cama esperándome. Me asuste al principio pero reaccione y a paso rápido me senté en sus piernas a besarlo.

Las ganas fueron inevitables, al verlo ahí sentado con sus labios rosado tan suaves y deliciosos, no pude evitarlo. Hunter me respondió al instante colocando sus manos en mi cintura apretando me contra él.

-Eres irresistible. - subió su mano y jalo mi pelo. - Y con esa ropa, uff.

Me reí y lo empujé a la cama.

-Te extrañé, Black. - dije dejando caer mi cabello hacia un lado.

-Yo igual, Crowell.

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Tomen su cap mis ninios.

BESITOOOS

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