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Ella no es una zorra

Narra Jackson





Escondí el ticket en uno de los compartimentos de mi billetera, no es que Callie fuera a revisarla, es que soy perseguido, ¿Culpa? Siempre, pero me la aguanto. Tenía que volver a casa hoy después del trabajo, ya no podía seguir dando vueltas, mi cuñada no me querría allá y la entiendo, ¿A qué chica le gusta saber que su hermana sufre un engaño por parte de su cuñado? A ninguna.

Me debatí unos largos segundos antes de empujar la puerta y ejercer ese viejo y habitual papel, el de esposo. 






Karin- ¡Papi! Viniste.- Corrió a mí y la alcé, para tener ocho era la consentida de papá. 

Jackson- ¿Cómo has estado?

Karin- Bien, de nuevo jugando a las peluqueras. 

Jackson- Rayos, olvidé tu muñeca, prometo que te la compraré sin falta mañana.

Karin- Bueno.

Callie- No maldigas delante de Karin.- Salió sonriente de la cocina- Hola cariño.- Me dio un pico- ¿Qué tal el trabajo?

Jackson- Bien, todo bien, el jefe les dio vacaciones a algunos empleados.

Callie- ¿Y eso qué quiere decir?

Jackson- Que tendré que trabajar de noche también, es evidente que me lo pagan pero ah, será agotador, no tienen a otros empleados de confianza que cubran esos puestos, Tae-Yang también los cubrirá.

Callie- No es para siempre, solo hasta que los empleados que suplanten regresen de sus vacaciones.- Su padre es mi jefe, pero casi nunca está para vigilarme, el tipo vive la vida de rico.

Jackson- Haré de mozo, ¿Puedes creerlo? Prefiero la recepción.

Callie- Nunca te ha gustado atender mesas, te conozco.

Jackson- Por qué no vas tú hija, por papá, yo me quedaré en casa a descansar.

Karin- Yo soy pequeña para trabajar.

Jackson- No, eres una princesa, tengo que cuidar de ti y darte los gustos.- Besé su mejilla.

Callie- La cena ya va a estar, los quiero en la mesa.







En la mesa, con el volumen de la televisión baja, los tenedores pinchando la carne jugosa que, cielos se veía apetitosa, pero esta vez volver a casa no me apetecía, varias veces que peleé con mi esposa y me iba porque claramente no les quitaría la casa que por derecho les pertenece a ellas dos, además que me iba por culpa de mis equivocaciones, luego volvía con ganas, y gracias al perdón de Callie; mi familia esperaba en casa, sin embargo no estoy a gusto, no en este preciso momento.







Callie- Sonrió y se limpió con la servilleta- Tu hija tiene una mente demasiado activa.

Jackson- Bebí un poco de vino- ¿Por qué?

Callie- Dile lo que me contaste hoy cuando fui a buscarte a la escuela.

Karin- Mis amigas tienen hermanos grandes, otros más pequeños, ¿Por qué yo no?

Jackson- El vino que pasaba por mi garganta se quedó estancado, no sé de cómo no me ahogué- Porque...- Me pausé- Sus papás deben tener una casa más grade que esta, por eso.- Me excusé de la forma más pobre.

Teacher or apprentice? (Jackson Wang)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora