Capítulo LXII

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Con Carina
Carina, como había ordenado el Capitán Barbossa, seguía controlando el timón hacia el Tridente, y para eso, tenía que ver las pistas que dejaba su diario ya que la isla a la que se dirigían, no se encontraba en ningún mapa más que en las propias estrellas.

Carina: (Mirando su diario) Esta debe ser. (Mirando al cielo, la constelación tallada en la portada de su diario) Tiene que ser aquí.
Barbossa: (Mientras pelea contra marineros enemigos) Encuentra esa tierra, o moriremos aquí!
Carina: (Desde el timón) Es aquí cerca! Tiene... tiene que estar por aquí!

Con Jack y Salazar
Jack seguía saltando por encima de los cañones, de barco en barco, cuando de pronto, la escultura que se encontraba en la proa del Sigilosa María cobró vida, e intentó atacar a Jack.

Jack comenzó a retroceder para escapar de la estatua pero llegó a un punto en el que quedó entre la estatua y el Capitán del Sigilosa María.

Jack, mientras intentaba escapar, se tropezó, y cayó sentado encima de un cañón del Perla Negra. Al verlo, un tripulante del Sigilosa María, activó un cañón de su nave, que apuntaba directo a la cara de Sparrow.

Jack, estuvo un par de segundos quieto sin saber que hacer, pero cuando vio que la estatua del Sigilosa María se asomaba por la cubierta del barco, Jack saltó a colgarse de una cuerda amarrada al cañón que lo apuntaba, haciendo que éste apuntara y disparara hacia arriba, impactando a la estatua gigante.

Jack, nuevamente quedó rodeado entre ambos barcos, la estatua, y Salazar, pero con un choque entre las naves, se rompió parte de la nave maldita, dejando paso a Jack para entrar.

En el Perla Negra
Mullroy: (Mientras pelea, a Carina) Encontró lo que buscaba, señorita?!
Carina: Estoy intentándolo! (Mirando a la constelación) Las estrellas se irán pronto.

En un momento, mientras Barbossa peleaba contra uno de los marineros enemigos, este le hizo un corte en el brazo, dejándolo claramente en desventaja.

Ruby, cuando vio esto, agarró a Barbossa del brazo no herido y lo llevó a un lugar un poco más protegido de las peleas.

Barbossa: Por qué me trajiste aquí?
Ruby: No es muy seguro si sigues peleando con esa herida en el brazo. No va a parar de sangrar tan fácilmente.
Barbossa: Dije que vamos a pelear hasta el final.
Ruby: Por eso mismo te quiero ayudar.
Barbossa: Qué pretendes hacer?
Ruby: (Muestra una bola de fuego en su mano)
Barbossa: (Negando con la cabeza) No lo vas a hacer.
Ruby: Sé que va a doler, pero es lo mejor. Me lo vas a agradecer.
Barbossa: (Inseguro) Estás segura?
Ruby: (Recordando declaraciones anteriores de Barbossa) Te he roto alguna vez una promesa?
Barbossa: (Suspira)

Barbossa le mostró el brazo recién herido a Ruby y ella primero limpió la zona con abundante agua y luego cauterizó la herida para detener la hemorragia. Barbossa claramente sintió un gran dolor en el proceso pero aún así se sintió más fuerte para seguir con la pelea.

Ruby: Mejor?
Barbossa: (En modo de afirmación) Protejamos al Perla Negra.

En el Sigilosa María
Jack caminaba sintiéndose más protegido, pero a los pocos segundos, se la apareció Armando Salazar justo al frente.

Piratas Del Caribe /// Las Llaves Del InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora