Break The Limit: Pesadilla Final En Edición

•27•

Alzaron la vista hacia la voz. Les sonreía como si fuera la primera vez que los veía en su vida.

—Stan bajará en unos momentos —habló en español.
—Claro —siguió Raúl.
—¿Cómo se llaman?, digo hay que ser justos; ustedes han de saber el mío.
—Raúl.
—Leslie —se levantó del sillón.
—J —desvió la mirada.
—Cenen con nosotros, está caliente y es spaghetti. 
—Él nos invitó a pasar la noche, nos perdimos desde hace horas y no encontramos la casa de mamá —Raúl explicó breve lo sucedido esperando a que le creyera.
—Tranquilo, sin duda hay personas que te olvidan fácil —Faty lo miró con tristeza.
—Stan es un buen chico —Leslie apartó el tema y uno nuevo surgió.
—No lo niego, ahora estamos en discusión, por eso no se preocupen; si oyen gritos somos nosotros o- —fue interrumpida.
—Se va a enfriar —Stan pasó primero a la mesa.
—SÍ, vamos —Faty lo siguió.

Durante la cena fue la ley de hielo, hasta que....

—¿Irás al baile, Stan? —Faty busca como entablar una conversación sin perjuicio para ambos.
—No estoy seguro —dio su primer bocado.
—Amm, me quedaré en casa de Beverly —dijo ya en inglés.
—Ya veo, diviértete —le contestó en español.
—Está delicioso —apresuró a decir Less.
Faty y Stan no se movieron ni hicieron un gesto.

Concluyó la comida, Faty había sido la primera en subir y "dormir". Stan no se fue hasta que los tres chicos estuvieran en calor.

—Sin otra cosa, me retiro. Buenas noches —apagó las luces de la habitación saliendo de ahí.
—Debemos irnos de aquí, no soporto verla feliz —Less se dio cuenta de sus palabras y comenzó a llorar.
—Hey, no te preocupes haremos que regrese y con eso resuelva todo este embrollo —Raúl la abrazó—. No has dicho nada J.
—¿Qué quieres que te diga?, "Estoy enojado, parece hipócrita". No tiene ni idea de quiénes somos —dio vuelta dándoles la espalda.

En la mañana entregan el periódico, por medio de ahí, hubo un artículo que la escuela volvería a sus actividades normales y que el baile sería próximamente la semana siguiente.
Por ese día faltó Stan, al quedarse con Raul, Leslie y J.
Faty continuó con su plan para el obsequio junto al resto del club.

—¿Y St-t-tan? —Bill preguntó al no verlo detrás de la castaña.
—Iba ser un guía para unos chicos que estaban perdidos —respondió dando un suspiro.
—Así podemos acabamos con esto de una vez y descansaremos al fin de este trabajo —Richie llegó en ese momento.
—Tiene que ser pronto —Faty se recostó en su banca.
—H-hoy se-será la últ-t-tima sesión para la c-c-canción —sentenció el tartaja.

Al ir a casa a dejar su mochilas e ir por lo restante para terminar, los chicos encontraron Stan fuera de la escuela. Con cara molesta, o sin expresión alguna, se vieron mutuamente. No utilizaron palabras, así que continuaron su trayectoria a sus hogares.

Faty llegó a casa primero encontrándose todavía con los tres, no saludó gracias a la prisa que llevaba.
Ellos solo observaron sus acciones, resignados a pensar que los recordaría.

—¡Fátima, ven ahora mismo! —en la puerta estaba el castaño claro, se le notaba que estaba nervioso, ¿por qué?, ni él sabe.
—¿Está todo bien? —Leslie interrogó.
—Sí... —dejó en suspenso—. No —se quejó—. Simplemente es hora de solucionar las cosas.

Faty venía con la guitarra en su espalda, bajando. Lo malo era que no se fijaba por donde pisaba; traía las notas para la melodía y parte de la letra en la cara leyéndolas. Sus ojos enfocaron a Stan, se limitó a mirar de nuevo las hojas y seguir su camino, pisó una de las agujetas y resbala.
Stan no movía ni un dedo, pero supo que debía ir a ayudarle. Faty se posó sobre él quedando pocos centímetros de la cara; Raúl y Leslie prefirieron enfocarse en el instrumento.
Permanecieron así unos momentos mirándose a los ojos, se dieron cuenta que los estaban ojeando.

—¡Rayos!, llego tarde —dijo Faty levantándose y apoyando a Stan en el acto.
—Puedo solo —se zafó bruscamente.
—Bien. Los veo al rato —salió sin antes recoger las hojas y quitarles la guitarra.
—¿No te lastimó? —Raúl le tocó el hombro.
—No —se alejó—, me enterró sus codos en las costillas —respondió Stan subiendo a su recámara.

Finalmente se escuchó la puerta cerrarse para burlarse de J y su gesto al ver la escena.

—<<Parece que alguien no aguanta no tener a la original>> —dijo por lo bajo el de lentes.
—Cierren la boca —J se enojó —, no iba a pasar.
—Ajá, y ella me ama —Raúl señalo a Less.
La mencionada se puso roja como tomate mirando hacia abajo.
—Tenemos que vigilar, si hay un evento de la escuela y colarnos o no sé —J daba vueltas.
—Cálmate, ya veremos que hacemos —Leslie se apoyó en sus compañeros.