Break The Limit: Pesadilla Final En Edición

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—Te amamos —brillaron.

Todo se había vuelto negro y distorsionado. La chica se exalta, provocando que su corazón se acelere.

—¿Quiénes son? —echa su cabeza para atrás.

Por años, las alucinaciones con personajes que no conoce, la han atormentado. Se pregunta —en especial en las noches— por qué tiene esas pesadillas.
Baja a la cocina por un vaso de agua.

—¿De nuevo?.
—Acostúmbrate.
—Son más comunes en estas fechas.
—Si pudiera comprender de que hablan, sería fácil descifrarlas.
—¿Escuchas algo?.
—No —dijo cabizbaja.
—Tranquila. Acuéstate, hoy tenemos entrenamiento en la pista.
—Trataré.

Hace tres años, conoció a Noel. Un jóven que buscaba una compañera de patinaje. Después de meses se toparon con Alicia, ella confecciona los vestuarios de los participantes en las competencias de patinaje artístico.
Los tres se llevaron bien. Y luego de tantas salidas, convencieron a sus padres en separarse de la familia y vivir los tres solos.

A la mañana, Alice prepara el desayuno.

—Buenos días —saluda ella con una mano batiendo la masa.
—Buenas —contesta Noé.
—Igualmente —Faty se restregó los ojos.
—Oí gritos, ¿fuiste tú, corazón? —dejó los que estaba haciendo para mirarla atenta.
—En octubre se ponen intensas, lo siento.
—Debes de ver a un psicólogo, ¿quieres que te saque cita?.
—Alice, te agradezco mucho, pero sólo son sueños.
—A veces se presentan como recuerdos del pasado —Noé dice con cierta emoción.
—Si fueran recuerdos, serían más decentes que estar en una cueva con un monstruo en forma de mariposa esquelética; y en vez de que personas sean atacadas por ella y que se desvanezcan como luciérnagas, haya gente normal.
—Hubo, hace siete años; un chip que era para la educación, resultó ser una catástrofe porque encerraron a niños y adolescentes dentro del aparato. Su nombre: BYL.
—Yo tuve en uno de esos, fue de repostería —Alicia está sirviendo las panqueques a cada uno.
—¿Y eso qué tiene que ver con mis sueños? —cuestiona la castaña cruzándose de brazos.
—El anime se incluyó como una materia. Bastantes se anexaron a ese tema; fue como un juego de realidad virtual. Supervivencia, duelos, magia, espadas, bosques; se veían a lo alto de los edificios. Tambien existieron los más populares, por ejemplo: "Scarlet Light", "RogersPop" y quien se discutía por un reinado "TLD" —Alicia se limpia los restos del bocado.
—Yo escuche de ella. Una muchacha que fue asesina por venganza y dolor —comió un bocado.
—¿"TLD"? —no entiende, Faty.
—The Little Demon. El reino de los demonios necesitaba una monarca que fuera mujer, por extrañas razones se decidió así. Karl Sakamaki, fue el que escogió a su futura reina; ella lo rechazó por cuestiones de estar inconforme con el mundo en el que vivía —prosigue la mayor—. Fátima, mi amor —llamaron su atención—. Pocos fueron quienes entraron al juego, duró un año entero.
—No he oído hablar de BYL o de un accidente por un chip —Faty parte los panqueques.
—En tu escuela tal vez evitaron tener los programas. Y para las noticias, les importó un pepino; por otros navegadores se hizo público el cachivache junto a la situación —Noé razona.
—"Demon" desapareció del mundo virtual y su nombre era igual que el tuyo —señala Noé a la castaña.

El timbre suena. A Fátima se le hacía conocido el apodo de "Demon"; le restó importancia para tomar el desayuno.

—La pista está lista para probar la —entran.
—Ya nos vamos, Alicia —anuncian.
—Bueno, veré que puedo arreglar en su vestuario de la próxima competencia. La empresa de Alie, se ofrece a ayudarnos y he agendado una junta con ellos.
—Que te vaya bien —despiden.

La casa, en la mayor parte del tiempo, se encuentra vacía.
Alice va a la empresa para acordar un diseño.

—Se lo haremos saber cuando esté dispuesto a enseñarse. Denos su dirección y las mismas jefas, van a hacérselo entregar.
—Lo necesito para esta semana.

Con el tiempo agotándose, Alice planeaba realizar desde cero los diseños.
Unos golpeteos en la puerta, alertan a todos.

—¡Llegaron! —exclama la rubia.

Dos mujeres pasan al vestíbulo.

—La señorita Alicia Vásquez —leen.
—Soy yo —levanta la mano.
—Usted ha pedido diseños para una competencia de patinaje.

Vásquez, asiente.

—Necesitamos un modelo.
—Mis amigos son los que practican el deporte. Permiso —sale de la sala para avisarles a sus compañeros de la aparición de Alie.

Faty y Noel, se muestran ante las expertas en moda. Al observar a la de menor estatura, ambas chicas, la inspeccionan.

—Les presentó a Fátima Otero y a Noel Gallagher. Fátima, Noé; Leslie Flores y Alex Marín.

Los mencionados, estrechan manos.

—El plazo para que estén condiciones de usarse son de cuarenta y ocho horas.
—La competencia, ¿en que día es?.
—El veintidós de octubre.

Las chicas, se miran con tristeza.

—Aun tenemos tiempo. Descuiden estarán listos —se paran de sus asientos.

Discutieron con Alicia en privado, una sorpresa sería. Se marcharon.

—¿Alguien las notó tensas? —el de ojos ámbar, comenta.
—Deben tener trabajo extra.

Más tarde, hicieron las prácticas correspondientes al horario. 

—Considera bien lo que vas a hacer.
—Tenemos bastante tiempo para pensarlo. Si lo hago, probablemente me dejen en paz.
—Ya me dijeron que está compleja la presentación —entrega dos botellas de agua. 
—Alicia, no debes espiar —reciben. 
—Lástima.

Volvieron a su hogar, cenaron en un restaurante y fueron a la cama a descansar. A la mañana, fue que llagaron más temprano al lugar. 

—¡Ya entendí, me largo! —dramatiza en la pista.
—Te puedes quedar con la condición de no grabar ni decir lo que otros ensayamos, ¿de acuerdo?.

La rubia asiente repetidas veces. 
Continuaron los entrenamientos por horas, así por dos semanas.